El mal de las adolescentes

Todos hemos visto a Marta Bobo en los Juegos Ol¨ªmpicos de Los ?ngeles, tan diminuta que parec¨ªa quebrarse como un suspiro de aire. Marta, que tiene anorexia, pesa tan s¨®lo 29 kilos a sus 18 a?os. Tambi¨¦n se dijo que la princesa de Gales ten¨ªa esta enfermedad porque empez¨® a adelgazar alarmantemente y no recuperaba peso, pero lo cierto es que muy poca gente sabe de que trata.Es enfermedad t¨ªpica de la infancia y la adolescencia, aunque se diferencian claramente una de otra y tienen incluso distinto tratamiento. Las dos terceras partes de los afectados son mujeres, y es tina enfermedad psicosom¨¢tica, es decir, se manifiesta en el cuerpo, pero la causa ¨²ltima es ps¨ªquica, por lo que requiere un tratamiento psicoanal¨ªtico.

El anor¨¦xico rechaza el alimento y llega a poner en peligro su vida. Pero es muy dif¨ªcil de diagnosticar: todos tenemos temporadas en las que se pierde el apetito, incluso por un simple cambio de temperatura. Los s¨ªntomas se complican con la edad, y al psic¨®logo se llega s¨®lo despu¨¦s de un largo peregrinaje por distintos especialistas (pediatras, digestivos, endocrin¨®logos). Algo tan corriente como no querer -o no poder- comer es la luz roja que avisa, en realidad, de la existencia de una gran angustia. Por eso se dice que la anorexia se da ¨²nicamente en personas sometidas a una gran tensi¨®n. "La relaci¨®n entre madre e hija es muy complicada. La madre da su cari?o con el alimento y acepta muy mal el rechazo de ¨¦ste, porque lo vive como un rechazo hac¨ªa ella".

"Cuando el ni?o dice 'no como' fracasan todas las dietas especiales, los cambios de alimentaci¨®n, de horario, los juegos. Es una pelea que ¨¦l siempre gana; por eso es mejor no guerrear ni cambiar los horarios de la comida y s¨ª, en cambio, analizar c¨®mo vive la madre su maternidad. No es una buena madre la que consiente todo, sino la que frustra cuando tiene que frustrar", seg¨²n el psic¨®logo Manuel Serrano, especializado en el tratamiento de ni?os y adolescentes.

Con estos ¨²ltimos la situaci¨®n se complica m¨¢s porque entran en juego otros factores, como el desarrollo sexual y las nuevas funciones sociales. La anorexia en adolescentes coincide casi siempre con la primera menstruaci¨®n, cuando se produce toda una alteraci¨®n hormonal. "Hay una negaci¨®n a crecer y perder la infancia". No es extra?o, porque aun a las mujeres se les hace vivir esta etapa como algo terror¨ªfico. Es algo vergonzante y vergonzoso, cuando tendr¨ªa que ser todo lo contrario, porque es la manifestaci¨®n de que el cuerpo est¨¢ vivo. Se utiliza un lenguaje oculto, que enmascara la realidad. Se dice "estar mala", "la regla", "no me puedo ba?ar" o "ten cuidado, se pueden secar las plantas". En cambio, a los chicos hacerse mayor no s¨®lo no les limita, sino que ven ampliado su campo de libertad.

Hay una obsesi¨®n por no engordar. Baja la temperatura basal, el electroencefalograma describe ondas mucho m¨¢s planas, se puede producir p¨¦rdida de cabello, sudoraci¨®n fr¨ªa, las mamas desaparecen y la piel queda acartonada. Entonces, la anor¨¦xica quiere comer y no puede. Su cuerpo lo rechaza y vomita lo que ingiere. Es una forma de defenderse contra algo.

"Cuando se llega a este punto -muchos anor¨¦xicos no se diagnostican como tal hasta que el cuadro est¨¢ muy avanzado- hay que partir del ¨®ptimo para llegar a lo posible. Lo adecuado ser¨ªa alejarles del medio que origina el conflicto -la familia-, pero esto normalmente no es posible". Lo primero es, mediante medicaci¨®n, cubrir las deficiencias que se han producido y, una vez que esto se resuelve, hacer un tratamiento ambulatorio de acompanamiento al medio familiar para que acepten que la ni?a tiene algo importante. Son casos dificiles de tratar (detr¨¢s puede haber tanto un rechazo de la adultez como una agresi¨®n hacia los padres) y requiere un buen especialista. La anorexia es una enfermedad, insistimos, que con demasiada frecuencia no llega a la consulta. "Para la sociedad, unajoven sin apetito es 'una cruz que ha ca¨ªdo encima' y se trata s¨®lo cuando ya hay que ir a urgencias, poner suero e intentar salvar la vida".