Marcos acusa al arzobispo de Manila de "avivar las llamas de la rebeli¨®n"

El presidente filipino, Ferndinand Marcos, acus¨® ayer al arzobispo de Manila, cardenal Jaime Sin, de violar la Constituci¨®n y fomentar la rebeli¨®n y amenaz¨® con detener a quienes participen en la manifestaci¨®n de protesta prevista para el pr¨®ximo domingo. Marcos afirm¨®, en un mensaje televisado, que el arzobispo ha violado el precepto constitucional de separaci¨®n entre Iglesia y Estado y que, al dirigirse recientemente a c¨ªrculos empresariales de Manila, "aviv¨® las llamas de la rebeli¨®n".

El cardenal Sin, que es tambi¨¦n presidente de la Conferencia Epis copal Filipina, hab¨ªa invitado el pasado 2 de octubre a los hombres de negocios de la capital a unirse a la manifestaci¨®n contra el r¨¦gimen prevista para el domingo. La ma nifestaci¨®n, que tendr¨¢ lugar en el centro de Manila, est¨¢ convocada para protestar por la actuaci¨®n de las fuerzas del orden en la repre si¨®n de una manifestaci¨®n de protesta el 27 de septiembre, en la que una persona result¨® muerta y varias heridas. Sin calific¨® aquella actuacion "salvaje y brutal". La invitaci¨®n del cardenal para participar en "el Parlamento de la calle", para que el presidente veaque "el desencanto y descontento no son exclusivos de los estudiantes y obreros", tuvo una acogida favorable entre los empresarios. Marcos advirti¨® ayer que la polic¨ªa "podr¨ªa verse forzada a practicar detenciones, tanto entre los dirigentes como entre sus seguidores", ya que, dijo, "el Gobierno tiene que demostrar que es capaz de hacer cumplir la ley". Para defender su prestigio en las delicadas conversaciones de la renegociaci¨®n de la deuda, dijo Marcos, el Gobierno no debe dar la impresi¨®n de ser d¨¦bil e incapaz y no tolerar por m¨¢s tiempo "las manifestaciones ilegales de la plebe".

Por otra parte, han surgido serias diferencias en el seno de la comisi¨®n que investiga el asesinato de Aquino, la publicaci¨®n de cuyo informe ha sido aplazado, seg¨²n un miembro de la citada comisi¨®n. El principal punto de fricci¨®n entre los componentes del grupo estriba en si hay o no evidencias suficientes para implicar al general jefe de las Fuerzas Armadas, Fabian Ver. Al parecer, la soluci¨®n no va a ser f¨¢cil y la publicaci¨®n del informe puede retrasarse hasta final de mes.