Juan Pablo II y los pobres
Los viajes del Papa se multiplican y se trivializan. Es la vig¨¦simocuarta vez despu¨¦s de su elecci¨®n que Juan Pablo II abandona el Vaticano para viajar al extranjero. Ha hecho una breve escala en Espa?a, pa¨ªs que hab¨ªa visitado en 1982; luego ha emprendido viaje a una Am¨¦rica Latina que hab¨ªa descubierto en 1979. ( ... ) Su viaje a la Rep¨²blica Dominicana y a Puerto Rico el 11 y 12 de octubre adquiere una importancia particular, debido al debate sobre la teolog¨ªa de la liberaci¨®n. ?No ha nacido en el continente latinoamericano esta ambici¨®n de reconstruir la cristiandad apoy¨¢ndose en los pobres? El debate parece un poco abstracto en Europa; todo lo contrario en esos pa¨ªses agobiados por la miseria donde la Iglesia se encuentra fatalmente en el coraz¨®n del drama. ( ... ) En un discurso muy esperado, pronunciado el 11 de octubre en Santo Domingo, Juan Pablo II no cit¨® ni una sola vez las palabras marxismo y teolog¨ªa de la liberaci¨®n.Pero esos temas estaban presentes a lo largo de un texto sin ambig¨¹edad. ?Prioritarios los pobres? Juan Pablo II lo admite evidentemente, pero con la condici¨®n de no hacer una clase, y todav¨ªa menos una clase en lucha. Y sobre todo, una Iglesia aparte, separada de sus obispos y olvidando la. obediencia debida. Aqu¨ª reside la esencia de la controversia. Pues los te¨®logos de la liberaci¨®n que afirman su independencia con respecto al marxismo son sobre todo criticados porque ponen en causa la autoridad en la Iglesia. El poder hist¨®rico de los pobres defendido por el te¨®logo peruano Gustavo Guti¨¦rrez es inadmisible para un Papa. Sobre todo cuando se llama Juan Pablo II.
Par¨ªs, 13 de octubre
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