Esqu¨ªs a punto

El acabado que traen los esqu¨ªes nuevos apenas dura un par de jornadas de esqu¨ª, por lo que para que siempre deslicen bien hay que repasarlos regularmente.Adem¨¢s, cada temporada es necesario darles un repaso general de cantos y suelas para que est¨¦n en condiciones de responder bien a lo que les pidamos.

Encerado. Se pueden encerar los esqu¨ªes con ceras especiales, que se venden para cada calidad de nieve, o bien d¨¢ndoles parafina, que no es tan eficaz como las ceras pero s¨ª mucho m¨¢s barata. En cualquier caso, el procedimiento es el mismo. Para derretirlas se puede usar una plancha de ropa ya fuera de uso, dejando gotear la cera sobre el cofis o suela del esqu¨ª. Si no se dispone de plancha (una plancha normal quedar¨ªa impregnada de cera), se puede calentar la cera o parafina en un cazo al fuego bajo (ojo a los incendios) y aplicarla con un pincel, que se destinar¨¢ s¨®lo a ello (queda pr¨¢cticamente inutilizado).

Una vez aplicada la cera, rascarla con una esp¨¢tula para que quede lisa, recuperando el sobrante.

Reparar cofis. Comprar las barritas de cofis del color adecuado; prenderlas fuego y dejar gotear sobre los ara?azos que. se hayan hecho en las suelas hasta que sobresalgan ligeramente; una vez fr¨ªo, rascar lo que sobra con una cuchilla afilada hasta que quede liso. Hay que mantener el canal del esqu¨ª libre de gotas.

Cantos. El sistema ideal es con una lijadora de banda, pero es una herramienta cara. Por lo tanto, nos conformaremos con usar una lima para metales de grano medio, bien afilada para que sea efectiva sobre el acero de los cantos. Pasarla en plano sobre la suela hasta eliminar los rayones de los cantos, y luego lateralmente, hasta conseguir una arista perfecta.

Poner ataduras. Para marcar el lugar donde van hay que hacer coincidir una se?al que hay en el centro de la suela de la bota (en un lado) con una se?al semejante que hay en el esqu¨ª. Si no tienen estas marcas, poner la puntera de la bota en el centro (medido) del esqu¨ª, marcar con un punz¨®n a trav¨¦s de los agujeros de las fijaciones (a veces, para que se vean, hay que levantar una tapita de pl¨¢stico). Taladrar con una broca del di¨¢metro adecuado (igual a lo fino del tornillo). Para no salir por debajo, poner un tope de profundidad con. un taco de madera. Atornillar fuerte. Si se dejan agujeros de otras ataduras, rellenarlos con cofis derretido.

Al final de temporada. Poner las ataduras en posici¨®n cerradas; aflojar los tornillos de regulaci¨®n a tope para que los muelles no se cansen; no guardar los esqu¨ªes cerca de fuentes de calor; revisar las arandelas de los bastones por si est¨¢n rajadas, y... a so?ar con la nieve hasta el invierno que viene.