Indios caduveo, no kadiwe
Publica el n¨²mero de su peri¨®dico del d¨ªa 24 de enero una gacetilla titulada Ultim¨¢tum de los indios kadiwe", que trata sobre el ultim¨¢tum que estos ind¨ªgenas han dado al delegado de la Fundaci¨®n Nacional del Indio (Funai) para que los blancos abandonen sus tierras situadas en las cercan¨ªas de la sierra Bodoquena.Me ha asombrado que los traductores de la agencia Efe no hayan identificado a los kadiwe con los caduveo, tribu especialmente conocida desde que L¨¦vi-Strauss estudi¨® sus pinturas corporales en un cap¨ªtulo de su libro Tristes tr¨®picos.
Despu¨¦s de Boggiani y Fritch, L¨¦vi-Strauss visit¨® a los caduveo en 1935, utilizando como base la Fazenda Francesa, una finca de m¨¢s de 60.000 hect¨¢reas cuya abarroter¨ªa era la ¨²nica tienda en 100 kil¨®metros a la redonda. Por aquel entonces a¨²n no se hab¨ªa terminado el enlace ferroviario entre San-
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Indios caduveo , no caduwe
Viene de la p¨¢gina 13ta Cruz (Bolivia) y Campo Grande (Matto Grosso, Brasil) a trav¨¦s de Corumb¨¢ y el Gran Pantanal, la mayor ci¨¦naga del mundo, h¨¢bitat de los guayeur¨²e, tribu extinta de la que los caduveo Gunto con los mbaya, toba y pilaga) son los ¨²ltimos descendientes.
El mismo L¨¦vi-Strauss vislumbraba hace medio siglo los problemas actuales al referirse a la inicua explotaci¨®n que sufr¨ªan indios y peones en las haciendas ganaderas. Seg¨²n ¨¦l, sus hu¨¦spedes franceses aceptaban su condici¨®n de xplotadores "filos¨®ficamente"; cuando, qui¨¦n sabe si movidos por la amabilidad del equipo de antrop¨®logos que los visit¨®, los caduveo se aventuran a llegar a Fazenda, caen en un malentendido generalizado que culmina con la muerte ("asesinato", seg¨²n el profesor franc¨¦s) de uno de los hacendados a manos, se insin¨²a, de alg¨²n indio celoso no de sus tierras, sino de sus conquistas femeninas ind¨ªgenas.
Los kadiguedogui -verdadero nombre de los caduveo- vuelven a la carga sin que, al parecer, haya servido de nada el que sus famosos tatuajes y pinturas hayan dado la vuelta al mundo. Las agencias de informaci¨®n se empe?an en volver a bautizar a este pueblo de escultores y pintores. A L¨¦viStrauss, patrocinador de Survival International, organizaci¨®n que defiende los derechos tribales de las etnias amenazadas, ?le habr¨¢ llegado siquiera la noticia?- Antonio P¨¦rez.
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