La CEE confirm¨® que Espa?a no podr¨¢ exportar carne por deficiencias en los mataderos

El Comit¨¦ Veterinario de la CEE ha confirmado esta semana la prohibici¨®n a Espa?a de exportar carne hacia la Comunidad. Dicho comit¨¦ no homolog¨® el ¨²nico matadero espa?ol -el Ernesto Montero Alonso, de Ir¨²n, Guip¨²zcoa- que hab¨ªa pedido una nueva inspecci¨®n tras gastarse 300 millones de pesetas en reformas para poder exportar carne hacia el mercado de los diez. Entre otras cosas, ahora la CEE pide que Espa?a reforme su sistema de inspecci¨®n veterinaria.

Los efectos de la decisi¨®n del Comit¨¦ Veterinario no requieren su publicaci¨®n oficial por la CEE, ya que es la confirmaci¨®n de una decisi¨®n anterior. En febrero de 1984, la comisi¨®n inspeccion¨® ocho importantes mataderos espa?oles que ped¨ªan la homologaci¨®n comunitaria para exportar carne hacia la CEE. Ninguno pas¨® la prueba. La CEE dio un plazo hasta el pasado 1 de febrero para que estos mataderos pudieran seguir exportando si lo autorizaban las autoridades importadoras de cada pa¨ªs, ofreciendo entre tanto una nueva inspecci¨®n, oferta que s¨®lo Montero recogi¨®. Pasado este plazo, la prohibici¨®n era autom¨¢tica.S¨®lo el matadero Montero pidi¨® una nueva inspecci¨®n, que se llev¨® a cabo en enero, tras unas costosas obras de reforma. Pero los inspectores de la CEE descubrieron desconchones, rieles en malas condiciones, sangre en el suelo y otros fallos que, seg¨²n la parte espa?ola, se debieron al temporal de fr¨ªo de esos d¨ªas y no eran deficiencias sustanciales.

En realidad, Montero s¨®lo quer¨ªa la homologaci¨®n para la parte del matadero que se dedica a la carne ovina, de la que exportaba unas 500 toneladas anuales hacia la CEE. Los inspectores comunitarios encontraron poco satisfactorias las medidas de separaci¨®n del matadero entre esta parte y la que se dedica a otras carnes.

Las autoridades espa?olas intentaron replicar dando garant¨ªas de que los peque?os defectos ser¨ªan subsanados en-este ¨²nico matadero que pidi¨® la homologaci¨®n.

La CEE las rechaz¨®, aunque se muestra dispuesta a efectuar nuevas inspecciones de homologaci¨®n en Espa?a siempre que se le pidan.

La CEE plantea un problema m¨¢s amplio que el caso de un matadero: cuestiona el sistema espa?ol de la inspecci¨®n veterinaria. En Espa?a, seg¨²n expertos espa?oles, los inspectores veterinarios cobran por mitad su sueldo del Estado y de los propios mataderos, con lo que, para la CEE, pierden independencia y no se atreven a hacer informes negativos. Los inspectores veterinarios espa?oles, para la CEE, deben ser plenamente pagados por el Estado, como ocurre en los otros pa¨ªses de la Comunidad.

Una vez que ingrese en la CEE, el sistema que se seguir¨¢ para la homologaci¨®n de mataderos que quieran exportar hacia los pa¨ªses comunitarios es que las autoridades espa?olas presentar¨¢n una lista de centros homologados por ellas a la Comisi¨®n Europea. Los servicios de la comisi¨®n pueden luego ir inspeccion¨¢ndolas y prohibir estos centros para la exportaci¨®n. En los ¨²ltimos dos a?os han comenzado inspecciones en serio que han provocado revuelos, pues recientemente se ha prohibido exportar carne a mataderos importantes de Luxemburgo -que viv¨ªa de la exportaci¨®n a B¨¦lgica- y de este ¨²ltimo pa¨ªs.

Los efectos econ¨®micos de la prohibici¨®n a los mataderos espa?oles de exportar carne hacia la CEE son escasos a nivel nacional, pero importantes a escala individual para los mataderos como Montero.