Arzallus afirma que Garaikoetxea gobernaba con despotismo

PATXO UNZUETA, El pasado 28 de diciembre, en una reuni¨®n interna celebrada en la sede social del Partido Nacionalista Vasco (PNV) en Ando¨¢in (Guip¨²zcoa) el ex presidente del partido Xabier Arzallus expuso, con la crudeza de quien previamente se ha cerciorado de que sus palabras no van a trascender fuera del local, las razones de fondo que, a su juicio, justificaban el entonces reciente cese de Carlos Garaikoetxea como lendakari. Arzallus coment¨® qu¨¦ algunos consejeros del Gobierno vasco se quejaron de la forma desp¨®tica de gobernar de Garaikoetxea, y que el lendakari imped¨ªa cualquier modo de coordinaci¨®n con el partido.

Las palabras de Arzallus han sido conocidas ahora merced a la transcripci¨®n de la cinta que alguien logr¨® grabar introduciendo subrepticiamente un magnet¨®fono en la sala.Xabier Arzallus se esfuerza, especialmente en la primera parte de su charla, en demostrar la falsedad de la hip¨®tesis de una "operaci¨®n de acoso contra Garaikoetxea" de la que el propio Arzallus ser¨ªa principal impulsor. "Nunca supimos qu¨¦ pod¨ªamos hacer o no hacer de cara a un Gobierno que estaba fuera de la disciplina del partido. Recibimos una vez una comunicaci¨®n escrita del lendakari en la que dec¨ªa que cualquier relaci¨®n del partido con un miembro del Gobierno pasara a trav¨¦s de su persona; por tanto, se nos evit¨® la capacidad que pudi¨¦ramos tener como EBB (Consejo Nacional del PNV). Intentamos establecer mecanismos de coordinaci¨®n. No fue posible, porque al Gobierno nunca le interesaron mecanismos de coordinaci¨®n".

Seg¨²n Arzallus, la decisi¨®n de suspender la situaci¨®n de afiliado exento de disciplina de que hab¨ªa disfrutado Garaikoetxea no se debi¨® a una animadversi¨®n especial, sino a esa dificultad de coordinaci¨®n y a "hechos concretos: a m¨ª me vinieron con la legislatura anterior cinco consejeros, y ahora puedo decir los nombres: F¨¦lix Ormaz¨¢bal, Javier Garc¨ªa Egocheaga, Carmelo Ronobales, Jos¨¦ Luis Robles y Javier Aguirre, con la dimisi¨®n en la mano porque no aguantaban ni estaban dispuestos a tolerar m¨¢s tiempo la forma desp¨®tica de gobierno y el presidencialismo de Carlos Garaikoetxea ( ... ), y otros dos, que son Mario Fern¨¢ndez y Juan Carlos Isasti, me dijeron que no volv¨ªan jam¨¢s con ¨¦ste a un nuevo Gobierno por una serie de razones, que all¨ª no hab¨ªa equipo...".

La falta de comunicaci¨®n tuvo ocasi¨®n de ponerse de relieve, por ejemplo -dice Arzallus-, en relaci¨®n con la pol¨ªtica de personal. "Sectores enteros del Gobierno vasco no solamente no se preocupaban de que, por lo menos en casos de igualdad, fuera gente del partido a determinados cargos, incluso cargos pol¨ªticos, sino que al gunos evitaron cuidadosamente que gente del PNV entrara all¨ª, porque crearon sus propios polos de poder. Me refiero, por ejemplo, a Euskal Telebista ( ... ); no digamos en otros sectores, donde gente de EE, HB, gente de los que fueron de Esei, parientes, amiguetes, etc¨¦tera, han ido entrando, y cuando nosotros quer¨ªamos que entrara alguien que fuera del partido se nos pon¨ªa por delante la imparcialidad de unas oposiciones".

Pol¨ªtica con EE UU

Antes de relatar una nueva experiencia de falta de colaboraci¨®n, a juicio de Arzallus, de Garaikoetxea con el PNV, el ex presidente del partido duda "si es- prudente decir todo", pero, tras preguntar si hay en la sala "alguno que no es afiliado o alg¨²n periodista", se decide a narrar "c¨®mo procedimos hace cuatro a?os, cuando la primera elecci¨®n de Reagan".

Invitado por el Departamento de Estado norteamericano, Xabier Arzallus, junto con otros dos dirigentes nacionalistas, visit¨® Nevada, California e Idaho, y concibi¨® la idea de "hacer como una especie de grupo de apoyo all¨ª a partir de unos pol¨ªticos a los que los votos de los vascos les interesaban!'.

El plan inclu¨ªa una visita del lendakari Garaikoetxea a Estados Unidos. Pero "Ajuria Enea no reaccionaba". Aquella visita "se suspendi¨® porque cada uno es como es. Primero, porque Carlos Garaikoetxea estaba empe?ado en que le recibiera Ronald Reagan, y Reagan no pod¨ªa; eso es no conocer los elementos de c¨®mo se mueve la pol¨ªtica internacional". La conclusi¨®n de Xabier Arzallus es: "Nosotros siempre le dimos la peana y no fuimos correspondidos".

Otros ejemplos citados por Arzallus son: el descubrimiento de un yacimiento de gas en la costa de Vizcaya, "que yo fui el primero en enterarme, porque un afiliado nuestro estaba en una multinacional", y que no provoc¨® ninguna "reacci¨®n del Gobierno de Garaikoetxea, y anduve dos a?os detr¨¢s del tema para que se interesase". Lo mismo pas¨® "en el tema europeo que hemos estado fuera de juego, y el partido no ten¨ªa medios .Y yo y otros tenemos la profunda convicci¨®n de que el Gobierno de liberadamente ha evitado que e partido tenga medios econ¨®mico para poder hacer su funci¨®n, por que no les interesaba un partido fuerte".

Los 'progresistas'

La pretendida oposici¨®n entre foralistas y nacionalistas, que algunos comentaristas han considerado fundamental en la crisis reciente del PNV carece, a juicio de ArzalIus, de cualquier fundamento:. "Me acuerdo que cuando pusimos aquella disposici¨®n adicional en la Constituci¨®n, que fuimos Mitxel Unzueta y yo los que esclarecimos la estrategia de c¨®mo no tener que decir s¨ª a la Constituci¨®n, y pusimos esa f¨®rmula, y no la de autodeterminaci¨®n, porque cre¨ªamos que as¨ª ech¨¢bamos encima de ellos la carga de la prueba, y no nos iban a dar, como sucedi¨®. Y tendr¨ªamos efectivamente un motivo serio y perfectamente explicable de no aceptar la Constituci¨®n".

Respecto a algunos de los sectores que en la actualidad apoyan a Garaikoetxea, el ex presidente del PNV se sorprende de que se consideren ahora progresistas sectores -como el agrupado en el colectivo Bultzagileak, que eran "foralistas", y cuya "obsesi¨®n, es el antimarxismo".

Del dirigente hist¨®rico de dicho grupo, Antxon Irala, opina Arzallus que "es un ciudadano americano, miembro jubilado de la CIA, que todos los meses cobra- en el Departamento de Estado. Yo no dudo de su nacionalismo, pero pienso que alg¨²n tipo de lealtad se podr¨¢ ver obligado a tener".

Pacto con Coalici¨®n Popular

La expulsi¨®n de la organizaci¨®n navarra del PNV, por negarse sus dirigentes a aplicar un pacto de la direcci¨®n del partido con Coalici¨®n Popular, es tambi¨¦n ampliamente explicada por Arzallus. Tras los resultados de las elecciones locales de 1983, "el perder la diputaci¨®n de ?lava era una cat¨¢strofe para nosotros".

Por ello, tras unos contactos de Mitxel Unzueta con Miguel Herrero de Mi?¨®n, se acord¨® que Coalici¨®n Popular apoyara al candidato nacionalista en la Diputaci¨®n alavesa y en los ayuntamientos de Bilbao, Vitoria e Ir¨²n. A cambio, los tres representantes nacionalistas en el Parlamento de Navarra se abstendr¨ªan, con el fin de que fuera elegido presidente del Gobierno de dicha comunidad el candidato de la derecha.

Explica Arzallus sobre ¨¦sto: "Nosotros les dec¨ªamos: si vosotros os absten¨¦is salen los de la derecha. El abstenerse no es dar nada a nadie. Simplemente os absten¨¦is y dej¨¢is el juego de la mayor¨ªa". Sin embargo, "los navarros ten¨ªan su proyecto: quer¨ªan negociar con los socialistas".