Derribados un colegio y una parroquia el barrio de Palomeras

El colegio Santa Mar¨ªa de los Pinos y el anejo pabell¨®n prefabricado de una parroquia eclesi¨¢stica fueron desalojados y derruidos ayer, por orden de la Comunidad de Madrid, en la calle de Villalobos, en el barrio de Palomeras, al sureste de la ciudad. Esta medida, ejecutora de un expediente de expropiaci¨®n de 1978, deja pendiente la indemnizaci¨®n al colegio y la reinstalaci¨®n parroquial.

Vecinos del barrio de Palomeras se manifestaron ayer en contra del citado desalojo. A pesar de ello, el derribo, anunciado para las diez de la ma?ana, se inici¨® a las dos de la tarde.La ejecuci¨®n expropiatoria de estos inmuebles plantea dos conflictos. Por un lado, las negociaciones entre la comunidad y el arzobispado de Madrid no han resuelto a¨²n la instalaci¨®n del nuevo pabell¨®n donde se realojar¨¢ la parroquia acogida en el edificio ahora derribado. No obstante, ya se han iniciado las obras a este efecto en la parcela de enfrente. Por otro, la sociedad propietaria del colegio considera que la Comunidad de Madrid ha perjudicado sus derechos al rebajar en 17 millones la cifra de indemnizaci¨®n fijada por el Instituto Nacional de la Vivienda (INV), pues este organismo evalu¨® en 40 millones el precio de las construcciones en un expediente de indemnizaci¨®n anulado luego por la comunidad.

El conflicto (ver EL PA?S del 15 de abril) surgi¨® en 1978 al crearse una junta de compensaci¨®n en la zona donde estaba el colegio. Los propietarios del terreno, que por falta de plan parcial no hab¨ªan podido construir viviendas, entregaron la parcela al Instituto Nacional de la Vivienda en una operaci¨®n compensatoria dentro de un programa de ordenaci¨®n del suelo.

El INV, al comprobar que en dicho suelo exist¨ªa un colegio y una guarder¨ªa construidos en los a?os 70 por la sociedad Santa Mar¨ªa de los Pinos, cifr¨® una indemnizaci¨®n de 40 millones. Sin embargo, al realizarse el traspaso de competencias urban¨ªsticas a la Comunidad de Madrid, la Consejer¨ªa de Ordenaci¨®n del Territorio, Medio Ambiente y Vivienda estim¨® que no correspond¨ªa a la Administraci¨®n efectuar ese pago, sino al propietario del suelo pues la parcela hab¨ªa sido cedida libre de cargas.

La Comunidad acept¨® arbitrar entre ambas partes en caso de que no hubiera acuerdo sobre la valoraci¨®n del colegio. La propiedad del colegio tas¨® los locales en 46 millones y el propietario del suelo ofreci¨® ocho, de acuerdo a los costos de 1974. La comunidad, por su parte, valor¨® las instalaciones en 23 millones, a¨²n no pagados al colegio.

Jes¨²s Mor¨®n, viceconsejero de Ordenaci¨®n del Territorio, Medio Ambiente y, Vivienda, manifest¨® que la Comunidad de Madrid ha ocupado el terreno al haberse cedido a la comunidad, por un lado, la parcela y, por otro, las instalaciones, seg¨²n un escrito de los due?os de la construcci¨®n en el que desist¨ªan del tr¨¢mite de expropiaci¨®n. "No entiendo c¨®mo la Administraci¨®n pudo admitir un terreno libre de cargas, sin estarlo, ni c¨®mo despu¨¦s se valor¨® la construcci¨®n en 40 millones de pesetas. Tampoco entiendo c¨®mo, para que no interrumpiera su actividad, la Administraci¨®n cedi¨® a la sociedad Santa Mar¨ªa de los Pinos unas construcciones que se acababan de hacer en el barrio que cuestan 150 millones de pesetas sin que se estableciera ninguna relaci¨®n contractual ni hubiera ninguna contrapartida".