Gran acogida a Jerry Lee Lewis y Brenda Lee en el Primer Festival Country de Madrid

Una de las marcas famosas de la poderosa tabacalera estadounidense de Richmond logr¨® en su campa?a de prestigio el ¨¦xito deseado de atenci¨®n y asistencia a la primera presentaci¨®n del sonido country en Madrid gracias a un despliegue magn¨ªfico de publicidad en todos los medios y al nombre del legendario cantante-pianista de rock and roll de Luisiana Jerry Lee Lewis. El Parque de Atracciones madrile?o se llen¨® en su mayor parte con seguidores del estilo rockabilly, originalmente llamados rednecks, con sus pa?uelos rojos al cuello. Brenda Lee entusiasm¨® y levant¨® a los espectadores de sus asientos.

Tambi¨¦n acudieron, adem¨¢s de los seguidores del sonido country, esos identificados con la vida sure?a de Estados Unidos (unos pocos ondeaban banderas sudistas) o simplemente aficionados, que pudieron disfrutar de un acontecimiento poco o nada conocido aqu¨ª.Este festival de ocho actuaciones en cinco horas y media, organizadas con precisi¨®n y armon¨ªa, introdujo n¨²meros medianos en su primera parte (The Duke Boys, Freddy Fender, Coriway Twitty y Jimmy C. Newinan Band actuaron en dos horas), aunque fueron m¨¢s notables hacia el final.

The Duke Boys, m¨²sicos de acompa?amiento que tocan cualesquiera de los tonos country, fueron ligeros y breves porque simplemente ten¨ªan que abrir el programa. Un cantante tejano muy hortera, Freddy Fender, que hablaba castellano, altern¨® nuestra lengua con el ingl¨¦s para interpretar sus canciones. "Muchos thanks you", dijo, y enton¨® despu¨¦s frases como Mi coraz¨®n se muere por tu amor, y se atrevi¨® con All¨¢ en el rancho grande, adem¨¢s de su tema m¨¢s popular Wasted days, wasted night.

Le sigui¨® Conway Twitty, un veterano artista que ha repasado en su carrera desde el rock de los cincuenta a las baladas m¨¢s melosas y redundantes. Y as¨ª lo demostr¨® este hombre que realiza con su banda m¨¢s de 200 actua ciones al a?o.

Los siete de la banda Jimmy C Newman salieron con cazadoras de la firma patrocinadora y se recrearon a base de banjo, acorde¨®n y viol¨ªn, con los instrumen tos de acompa?amiento para hacer sonar a ritmo de galope piezas tan cl¨¢sicas como In the mood, de Glenn Miller. Brenda Lee trajo el entusiasmo.

De Brenda a Jerry

De imagen peque?a y vetusta, Brenda Lee, que comenz¨® su carrera a los cinco a?os, cuando se llamaba Brenda Tarpley, de Atlanta, levant¨® con su voz alta de garganta rabiosa a los espectadores, que s¨®lo se sentaron cuando ella hab¨ªa terminado su bis, felices todos de bailar y aplaudir sus ¨¦xitos (I'm sorry o Dum-Dum), siempre a un comp¨¢s veloz y contagioso. Su gracia y br¨ªo hubieron de responderse ¨²nicamente con el carisma asumido y adorado de Jerry Lee Lewis.Los hermanos Bellamy (David y Floward) aportaron sin lucidez su especialidad en country-rock. Let your love flow, su mayor y quiz¨¢ ¨²nico ¨¦xito real, abri¨® su turno, del que ciertamente sobraron las dos canciones de retorno a escena. Rednecks girl y Rockabilly hab¨ªan logrado ya su objetivo con la participaci¨®n de su impetuoso solista de guitarra. Y es que era el m¨¢s joven de la banda.

Y Rita Coolidge, est¨¢tica y fr¨ªa, relaj¨® los ¨¢nimos con sus baladas casi siempre poco populares en Espa?a. Es una cantante espl¨¦ndida en disco, pero su presencia en directo se advierte m¨¢s bien por su cuerpo, que, maduro, se ve estupendo. Canta pop con todas las combinaciones de country blues, jazz y rock.

Ox¨ªgeno y hielo

Jerry Lee Lewis necesit¨® una botella de ox¨ªgeno, un recipiente de cubos de hielo y cuatro botes de coca-cola, y sali¨® totalmente despejado. Los fan¨¢ticos rednecks bailaron y bailaron como locos. Y los dem¨¢s tambi¨¦n. De The Georgia a Lucille, de Great bally of fire a Booggieman, Tenessee ofreci¨® las grandes notas del rock and roll. Si ha perdido nervio este cantante nacido en Lousiana en 1935 y que comenz¨® su carrera profesional a los 15 a?os, influido por el gospel y el swing, adem¨¢s de por el country, le queda el genio interpretativo, su manera de apo rrear las teclas con codo y tal¨®n su voz misma, invariable.Quiz¨¢ le reste poco, pero nue vas generaciones lo han visto aqu¨ª, en esta ciudad inquieta como ninguna, para que pasado un largo tiempo m¨¢s y nuevas personas propaguen la leyenda: "Llegu¨¦ a verlo". Se fue del escenario con la gente fervorosa y solicitante a la que hab¨ªa gritado: "Come on, come on". Los all¨ª presentes se tuvieron que resignar porque Jerry Lee Lewis no retorn¨® a escena. "El pr¨®ximo a?o ser¨¢", se o¨ªa por megafon¨ªa para tranquilizar a los insatisfechos.