La pu?etera lluvia
Lo ¨²nico que un chaval pudo comentar de la jornada del lunes fu¨¦: "Esta lluvia pu?etera parece que nos tiene man¨ªa". Y los componentes de Bajas Pasiones estaban, con seguridad, de acuerdo. Escaso fu¨¦ el p¨²blico con e valor necesario como para asistir al arranque de la jornada: musical de anteayer en Camoens. A pesar de este h¨²medo h¨¢ndicap y de la demasiado pobre iluminaci¨®n que acompa?a las actuaciones de los grupos m¨¢s humildes en este escenario, los Bajas Pasiones ofrecieron lo mejor de su repertorio, concebido con la ingenuidad de quien est¨¢ convencido de lo que hace.Tras un peque?o retraso, Los Elegantes saltaron a la palestra y demostraron con su show que suenan incomparablemente mejor en directo que en sus primeros discos. La actuaci¨®n de este veterano cuarteto madrile?o reflejo, como siempre en sus directos, un gusto aut¨¦ntico por el pop, el soul y el rock and roll de toda la vida, que viene a cristalizar en una brillante hoguera de canciones sobre el escenario, todas realizadas con contundencia y coraz¨®n. Emilio, guitarra y voz, grit¨®: "El fr¨ªo no existe". Era el calor de Los Elegantes contra el cruel fr¨ªo de la noche madrile?a. Y Los Elegante vencieron y convencieron.
Conciertos de San Isidro
Conciertos de Bajas Pasiones, Los Elegantes, Danza Invisible y Luz Casal Paseo de Camoens. Madrid, 13 de mayo.
Evoluci¨®n
A las once, los malague?os Danza Invisible hicieron su aparici¨®n, tras una larga ¨¦poca sin tocar en Madrid. Presentaron el material de su nuevo disco, muy distanciado de sus primeras composiciones. Menos recursos t¨¦cnicos, menos pedales de efectos y bater¨ªa ac¨²stica y, a la vez, la mayor soltura y cantidad de matices vocales por parte de Javier, el solista, el estilo depurado del bater¨ªa y la perfecta compenetraci¨®n entre los dos guitarras, con especial menci¨®n para Antonio, son los s¨ªntomas de la evoluci¨®n de este grupo, que demuestra no perder el tiempo en las etapas oscuras que una banda atraviesa hasta consolidarse.
Y para finalizar, la lujosa actuaci¨®n de Luz Casal, rockera con coraz¨®n y sensibilidad, que sali¨® a cantar con una superbanda de ocho excelentes m¨²sicos, entre los cuales se encontraba ese superproductor de rock llamado Carlos Narea. La cosa sonaba como una locomotora, con la voz, quebrada y sentida a la vez, de Luz Casal, al frente. Y, c¨®mo no, tambi¨¦n se ech¨® una mirada al pasado para rescatar aquella canci¨®n de Jos¨¦ Mar¨ªa Guzm¨¢n, a tiempo de reggae, que hizo saltar de la noche a la ma?ana a Luz a las listas de ¨¦xitos: El ascensor. La gente, empapada y aterida, core¨® y disfrut¨® la actuaci¨®n estrella de la velada, y pidieron los bises rigor que fueron concedidos sin apenas esperar.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.