Elogio apasionado del p¨²blico
El grupo vasco Oskorri subi¨® al escenario del paseo de Camoens a las nueve y cuarto de la noche. Desde hac¨ªa una hora ca¨ªa sobre Madrid una lluvia pertinaz, lo que no impidi¨® que numeroso p¨²blico se congregara bajo el agua, abrigados en impermeables y anoraks o bajo cientos de paraguas. Durante tres horas continu¨® lloviendo m¨¢s que el d¨ªa que debieron enterrar al famoso Zafra.El espect¨¢culo de varios miles de j¨®venes bailando y cantando una m¨²sica tan poco promocionada por los medios de comunicaci¨®n y tan desasistida por la industria discogr¨¢fica como la de ra¨ªz folcl¨®rica, que seguramente s¨®lo una peque?a parte de ellos hab¨ªan escuchado con anterioridad, constituy¨® uno de los recitales m¨¢s emocionados de mi ya larga experiencia de asistente a este tipo de actos.
Conciertos de San Isidro
Oskorri, Milladoiro y Labanda. Paseo de Camoens. Madrid, 15 de mayo.
Protagonismo robado
Los espectadores robaron el protagonismo de la fiesta a los grupos, aunque para que se establezca esa extra?a magia de la comunicaci¨®n sea tan imprescindible un p¨²blico como el que estaba en el parque del Oeste y unos m¨²sicos tan excelentes como los que actuaban sobre el escenario. Oskorri, Milladoiro, y Labanda hicieron una demostraci¨®n evidente de que en los ¨²ltimos a?os ha surgido en Espa?a -en ¨¦ste y en otros estilos musicales, desde el rock al jazz, la canci¨®n de autor o el folclor- una generaci¨®n de m¨²sicos excelentes, creativos, profesionales e imaginativos, capaces de mover al entusiasmo de los p¨²blicos m¨¢s variados.
Mientras que avanzaba la noche fueron apareciendo en la fisonom¨ªa de los presentes extra?as variaciones anfibias. El ata¨²d de Zafra, que bajaba arrastrado por las aguas paseo de Camoens abajo, se estrell¨® contra el calor que desprend¨ªa un paisaje de paraguas inasequibles al desaliento. Cuando a las dos de la madrugada se cerr¨® el recital, ya hab¨ªa terminado de llover. Los grupos cortaron orejas y rabo en todas las faenas; el p¨²blico, adem¨¢s, dio la vuelta al ruedo.
Babelia
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