15 d¨ªas sin v¨ªveres ni combustible.

El Pantanassa, con 10 hombres a bordo, hab¨ªa permanecido cerca de 15 d¨ªas anclado en el exterior del puerto de Valencia, frente a la playa de Nazaret, sin m¨¢s v¨ªveres que algunas cajas de spaghetti y con una escasa cantidad de combustible, la estrictamente necesaria para las maniobras de aproximaci¨®n a las instalaciones portuarias.Seg¨²n relat¨® el capit¨¢n, el griego Ioannis Barbagiannis, el Pantanassa entr¨® en aguas espa?olas a principios de marzo, buscando alguna carga que transportar por su zona habitual, la costa mediterr¨¢nea y el ?frica occidental, y al no encontrarla en Tarragona ni en Castell¨®n recibi¨® ¨®rdenes de dirigirse a Valencia, donde les, esperaban instrucciones en una empresa consignataria. Esta empresa, al parecer llamada Consigmar, no apareci¨® y el barco, que llevaba largo tiempo sin atracar en ning¨²n puerto, qued¨® sin viveres, sin combustible y sin dinero para pagar los gastos de entrada en el puerto.

A partir de ese momento la situaci¨®n de la tripulaci¨®n, abandonada a su suerte se hizo desesperada, aunque aguantaron en el buque en espera de alguna soluci¨®n que no lleg¨®.

3 millones de deuda salarial

Las gestiones iniciadas por el sindicato UGT, representante en Espa?a de la ITWF, a quien solicit¨® ayuda el capit¨¢n tras 10 d¨ªas de espera en el barco, han permitido establecer contacto con la empresa propietaria del mismo, una naviera griega, que adeudaba a la tripulaci¨®n un total de 19,000 d¨®lares -alrededor de 3.300.000 pesetas- en salarios, y que al parecer deseaba deshacerse del barco alquil¨¢ndolo a otra compa?¨ªa.

El pasado jueves se person¨® en Valencia un griego que aseguraba ser representante de los armadores, y anunci¨® que estaba dispuesto a pagar los salarios, y proporcionar alimentos y combustible al Pantanassa. Junto con ¨¦l lleg¨® un grupo de empresarios italianos que aseguraban que iban a alquilar el barco en cuanto el problema estuviese solucionado.

La UGT exigi¨® a ambas partes la entrega de alimentos a la tripulaci¨®n, como condici¨®n imprescindible para iniciar cualquier negociaci¨®n. Una partida de alimentos lleg¨® al barco el mismo d¨ªa, pagada por los armadores, aunque no ocurri¨® lo mismo con el dinero ni con el combustible.

Por su parte, los 10 miembros de la tripulaci¨®n -dos griegos, tres egipcios y cuatro indiosotorgaron poderes notariales al sindicato UGT para que ¨¦ste pudiera emprender las acciones necesarias para solucionar el problema laboral, dirigidas por un asesor jur¨ªdico. Las negociaciones -entre las dos empresas, por una parte, y entre ¨¦stas y los tripulantes, por la otra- duraron hasta la noche del s¨¢bado, con momentos de gran tensi¨®n.

Finalmente, y seg¨²n anunciaron fuentes de UGT, se lleg¨® a un acuerdo, quedando la empresa italiana como responsable del Pantanassa. Los marineros, algunos de los cuales llevaban m¨¢s de 10 meses sin cobrar, recibieron el importe de los salarios atrasados, por un total, entre todos, de 19.000 d¨®lares (algo m¨¢s de tres millones de pesetas), y el capit¨¢n y dos miembros de la tripulaci¨®n decidieron no reincorporarse al barco, cuyo pr¨®ximo destino se desconoce.

Sin garant¨ªas laborales

La penosa situaci¨®n del Pantanassa y su tripulaci¨®n, con sueldos de miseria, sin ninguna garant¨ªa laboral y expuesta a todo* tipo de riesgos, como los d¨ªas pasados en Valencia sin v¨ªveres ni combustible, es habitual en los barcos con pabell¨®n de conveniencia, seg¨²n indicaron fuentes de UGT. "El escaso control que se realiza sobre estos buques y sobre las empresas propietarias facilita la existencia de todo tipo de irregularidades, empezando por una situaci¨®n de los trabajadores m¨¢s pr¨®xima al esclavismo que a otra cosa", indicaron.

El secreto que han revestido las negociaciones entre los armadores griegos, en este caso, y los nuevos responsables italianos -se ignora si han comprado o alquilado el barco- ha impedido conocer incluso los nombres de ambas empresas, y las condiciones del acuerdo. Seg¨²n indicaron fuentes de Uni¨®n General de Trabajadores, "nuestro papel como mediadores se ha limitado a la soluci¨®n del problema laboral, sin ¨ªntervenir en los tratos entre las empresas, que desconocemos".