Aventuras a la medida
Viajar por libre sale m¨¢s caro, pero resulta m¨¢s apasionante
Probablemente los viajes individuales son la m¨¢xima expresi¨®n de la aventura. Son los que uno programa con la participaci¨®n exclusiva del capricho, la fantas¨ªa, los mitos alimentados desde la infancia o el simple gusto por lo improvisado. Son, en definitiva, lo m¨¢s indicado para aquellos viajeros que prefieren sentirse perdidos por el mundo, y sobre todo para los que conf¨ªan en sus propias fuerzas a la hora de resolver un simple problema aduanero o una delicada cuesti¨®n de aprovisionamiento en un lugar deshabitado. Sin duda alguna la experiencia es muy diferente a la que se obtiene en un viaje organizado por especialistas que se responsabilizan del bienestar del aventurero, pero es preciso reconocer que la opci¨®n de viajar por libre en algunos continentes acarrea algunos riesgos y siempre resulta m¨¢s cara
En Madrid: Trekking y Aventura, tel¨¦fonos 91 / 40122 08 y 40122 54
A?os Luz, tel¨¦fonos 91 / 445 1145 y 445 59 62. Nuevas Fronteras, tel¨¦fonos 242 39 90 y 242 3 9 9 1. Edelweiss, tel¨¦fono 431 77 24. Oriente es As¨ª/Intrek, tel¨¦fono 409 32 81. En Barcelona: Viajes Aster, tel¨¦fono 93 / 237 58 00. Nuevas Fronteras, tel¨¦fono 318 61 84. Trekking y Aventura, tel¨¦fono 254 37 02. Viajes Edelweiss, tel¨¦fono 209 97 44. En Bilbao: A?os Luz Bideak, tel¨¦fono 94 / 424 42 65. Ostadar, tel¨¦fono 445 95 72. En San Sebasti¨¢n: Izadi Artean, tel¨¦fonos 943 / 35 18 39 y 61 82 86. En Jerez de la Frontera: Aljibe, tel¨¦fono 956322625.
Autoestop y transportes locales
Adem¨¢s de ser extremadamente barato, el autoestop es toda una manera de viajar que requiere s¨®lo un trato amable y ofrece la posibilidad de trabar amistades -aunque efimeras- con gente del pa¨ªs capaz de proporcionar informaciones muy detalladas al viajero. Cualquiera puede imaginar cu¨¢les son las reglas de oro de este tipo de viajes, que en resumidas cuentas no son otras que las de la buena educaci¨®n y la prudencia. En Francia, B¨¦lgica, Reino Unido, Austria, Rep¨²blica Federal de Alemania, Australia y Estados Unidos existen organizaciones que, mediante el pago de una modesta cuota o de un kilometraje m¨ªnimo, ponen en contacto al viajero con los con ductores que hacen el recorrido deseado. En Estados Unidos y Canad¨¢ es posible recurrir al drive-away, un sistema mediante el cual resultan muy econ¨®micos los trayectos largos. Consiste en conducir un coche cuyo propie tario se ha desplazado en avi¨®n y necesita su veh¨ªculo en el punto de destino. El cliente del drive away s¨®lo tiene que pagar una fianza (entre 10.000 y 20.000 pesetas), que se le devuelve a la llegada, y la gasolina necesaria. No est¨¢ permitido, sin embargo, desviarse del trayecto trazado.
Los transportes locales -trenes y autobuses principalmente- constituyen un medio r¨¢pido y eficaz para conocer, en su propia salsa y sin adornos, la vida cotidiana de un lugar. Si el viajero se encuentra en un pa¨ªs del Tercer Mundo, sin embargo, debe prepararse para afrontar largas esperas, un desplazamiento a veces muy lento y las aglomeraciones habituales. Para conocer las l¨ªneas de todos los pa¨ªses conviene consultar la gu¨ªa C¨®mo ir por el mundo, editada por la revista Viajar en febrero de este a?o.
A bordo
Adem¨¢s de alquilar un yate, con tripulaci¨®n o sin ella, rumbo al Mediterr¨¢neo o a cualquier otro mar, existen otras maneras m¨¢s modestas de disfrutar de unas vacaciones navegantes sin recurrir a los consabidos y numeros¨ªsimos cruceros organizados. Mundivela (paseo de la Castellana, 123, Madrid; tel¨¦fono 91 / 456 66 11) y Charter Internacional de Yates Privados (C¨®rcega, 289-291, Barcelona; tel¨¦fono 93 / 237 42 42) informan al respecto y se encargan de poner en contacto a los propietarios de yates con los posibles clientes. Pero si lo que se pretende no va m¨¢s all¨¢ de una traves¨ªa en barco, el viajero puede aspirar a uno de los pocos pasajes de que disponen algunos cargueros, compartiendo la comida y las distracciones de la tripulaci¨®n. Para informarse de las l¨ªneas de las compa?¨ªas nacionales, dirigirse a la Asociaci¨®n de Navieros Espa?oles (plaza de la Lealtad, 4, Madrid; tel¨¦fono 91 / 232 2109). M¨¢s o menos lo mismo ocurre con las l¨ªneas de navegaci¨®n fluvial en Europa y en cualquier lugar del mundo. Para informarse, lo mejor es dirigirse a la oficina de turismo del pa¨ªs escogido o consultar como paso previo la gu¨ªa Viajar por el mundo o el Libro de los Jerrocarriles, de Thomas Cook.
Pero hay todav¨ªa una oferta muy apropiada para familias o peque?os grupos de amigos. Viajes Edelweiss (Serrano, 63, Madrid; tel¨¦fono 91 / 43177 24) organiza el alquiler de las casas flotantes que circulan a trav¨¦s de los canales abiertos en Francia durante la primera revoluci¨®n industrial. No se requiere ning¨²n tipo de carn¨¦, ya que el funcionamiento es muy simple, y la velocidad, muy corta. Las barcazas es t¨¢n equipadas con todo lo necesario para una estancia confortable. Es muy recomendable contar con una bicicleta para explorar las riberas. En B¨¦lgica conviene dirigirse a la Oficina de Turismo de Amberes (Suikerri, 19; 2000 Antwerpen; tel¨¦fono 03 / 232 0163). Para realizar excursiones independientes por el Danubio tambi¨¦n se cuenta con barcos de alquiler en Budapest, en el embarcadero de la calle Belgrad rkp. 2; distrito V; tel¨¦fono 18 17 04.
Sobre ruedas
El jeep y la caravana o el cami¨®n acondicionado son los veh¨ªculos m¨¢s indicados para afrontar un largo recorrido por carreteras y pistas. De sus ventajas apenas hay que indicar que, a pesar de los precios relativamente elevados que alcanzan, ofrecen la contrapartida de ahorrar el coste del alojamiento y el incordio que supone a veces buscar un hotel donde simplemente no lo hay. Si en principio le parece descabellado comprar una caravana que s¨®lo se utiliza dos o tres veces al a?o, el viajero puede optar por alquilarla.
En cuanto a los destinos a elegir, son literalmente infinitos. S¨®lo a t¨ªtulo de sugerencia, recordamos que la tradici¨®n aventurera se ha ido haciendo en algunas grandes rutas: la transafricana -desde T¨¢nger hasta Sur¨¢frica o Kenia-, la transamericana -desde Colombia hasta el Cabo de Hornos- y la transasi¨¢tica -desde Europa hasta la India- Esta ¨²ltima, sin embargo, encuentra en su camino las guerras de Afganist¨¢n y de Ir¨¢n-Irak. En cualquiera de estos tres casos la expedici¨®n debe durar varios meses, por lo que conviene reservarla para el a?o sab¨¢tico.
Aventuras 'pr¨ºt_a partir'
Afortunadamente, empiezan a proliferar las agencias especializadas en lo que podr¨ªa llamarse viajes alternativos. El veh¨ªculo m¨¢s adecuado suele ser -?c¨®mo no!- el cami¨®n o el autob¨²s acondicionado para proporcionar alojamiento y cocina, y lo ¨²nico que se requiere del viajero es una cierta facilidad para la convivencia. Las tareas se reparten entre todos por riguroso turno, y a cambio, siempre es posible introducir alguna modificaci¨®n en el programa.
Pero hay otras modalidades de viajes diferentes: recorridos a caballo o en bicicleta, traves¨ªas en veleros del siglo pasado, circuitos en jeep por el S¨¢hara y, por supuesto, el consabido trekking. Este ¨²ltimo consiste en recorrer a pie algunas zonas monta?osas pr¨¢cticamente inaccesibles de otra manera. Las expediciones avanzan por los caminos trazados desde hace siglos por los habitantes de los valles a un ritmo de unas cinco o seis horas diarias de marcha en compa?¨ªa de un gu¨ªa y los porteadores o los veh¨ªculos que cargan con el equipaje
Qui¨¦n organiza la aventura
A veces la aventura est¨¢ programada por un grupo de amigos que simplemente son buenos conocedores del pa¨ªs que proponen. En estos casos, la publicidad suele ser una simple y bienintencionada fotocopia pinchada con una chincheta en los vest¨ªbulos universitarios y en los bares frecuentados por gente joven. No obstante, ya hay en nuestro pa¨ªs una respetable lista de profesionales con experiencia probada en este tipo de viajes.
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