El Gobierno ultima los nombramientos y la estructuraci¨®n de la pol¨ªtica espa?ola para las nuevas relaciones con la CEE

El titular de Asuntos Exteriores, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, y el secretario de Estado para las Relaciones con la CEE, Manuel Mar¨ªn, han estado ultimando en estos d¨ªas la reestructuraci¨®n de la pol¨ªtica espa?ola con respecto a la CEE. El nuevo dise?o de la pol¨ªtica comunitaria implica una reorganizaci¨®n de la Secretar¨ªa de Estado, el nombramiento de un segundo comisario -que puede ser consensuado con la oposici¨®n- y el reforzamiento de la representaci¨®n permanente en Bruselas. Aunque las decisiones ¨²ltimas corresponden a Felipe Gonz¨¢lez, fuentes del Gobierno han insistido en la urgencia de los nombramientos, que se han "retrasado excesivamente por la crisis del Gabinete".

El Gobierno, como consecuencia del ingreso efectivo de Espa?a en la CEE el pr¨®ximo 1 de enero, tiene que llevar a cabo una profunda remodelaci¨®n de la pol¨ªtica comunitaria para asumir la enorme actividad derivada de la adhesi¨®n. Los cambios y modificaciones se producir¨¢n a tres niveles. En primer lugar, la reestructuraci¨®n de la Secretar¨ªa de Estado para las Relaciones con la CEE y la adecuaci¨®n de los ministerios afectados a la pol¨ªtica comunitaria. Por otro, el reforzamiento de la Representaci¨®n Permanente ante la CEE, que suceder¨¢ a la actual Misi¨®n Espa?ola y que garantizar¨¢ una parte importante de las tareas de participaci¨®n espa?ola en las decisiones comunitarias. Y, por ¨²ltimo, la elecci¨®n de los dos comisarios que corresponden a Espa?a, as¨ª como la selecci¨®n de los funcionarios de alto nivel y de los representantes espa?oles en instituciones comunitarias.Los reorganizaci¨®n de la Secretar¨ªa de Estado para las Relaciones con la CEE es el tema que m¨¢s preocupa porque ¨¦ste ser¨¢ el organismo encargado de coordinar la pol¨ªtica de los diferentes ministerios con respecto a la Comunidad. La sustituci¨®n de Manuel Mar¨ªn, que pasar¨¢ a ocupar el cargo de comisario europeo, es el mayor problema. Para sustituirle se han barajado nombres como los de Carlos Westendorp, uno de los coordinadores del grupo negociador, que tambi¨¦n suena como futuro representante espa?ol en Bruselas, y Manuel Medina, diputado socialista y catedr¨¢tico de Derecho Internacional, aunque otras fuentes argumentan las preferencias de Felipe Gonz¨¢lez a que el responsable m¨¢ximo sea un pol¨ªtico antes que un t¨¦cnico.

La ubicaci¨®n org¨¢nica de la Secretar¨ªa de Estado para las Relaciones con la CEE era otro de los problemas a resolver para evitar las fricciones que se produjeron en alg¨²n momento de la negociaci¨®n, cuando se hac¨ªa dif¨ªcil al secretario de Estado imponer su criterio a un ministro sectorial m¨¢s preocupado por los intereses concretos de su departamento que por el equilibrio global de la negociaci¨®n. La opci¨®n parece ser mantenerla integrada en Asuntos Exteriores, aunque es necesario, seg¨²n una fuente de este ministerio, "que a la vez est¨¦ directamente vinculada al presidente del Gobierno o al vicepresidente para asegurar su funcionamiento y evitar los problemas de competencias".

Coordinaci¨®n ministerial

La coordinaci¨®n interministerial para el desarrollo y aplicaci¨®n de la pol¨ªtica comunitaria se realizar¨¢ aprovechando el n¨²cleo de la task force, el equipo t¨¦cnico que negoci¨® el tratado de adhesi¨®n. A partir de enero, los ministerios afectados, fundamentalmente Exteriores y Agricultura, tendr¨¢n que dedicar la mayor parte de sus efectivos de alto nivel a las relaciones con el Mercado Com¨²n. El titular de Exteriores tendr¨¢ que asistir a un Consejo de Ministros comunitario cada tres semanas, sin contar las reuniones extraordinarias. Seg¨²n el actual embajador ante la CEE, aproximadamente la mitad de los viajes del ministro tendr¨¢n como destino Bruselas.Actualmente Espa?a asiste como observador a las reuniones comunitarias y participa ya, con voz pero sin voto, en m¨¢s de un centenar de comit¨¦s. Incluso cuenta con un plazo de ocho d¨ªas para poner objeciones a cualquier decisi¨®n comunitaria que pueda afectarle tras el ingreso.

Para la Representaci¨®n Permanente en Bruselas, el proyecto es pasar de los actuales 16 diplom¨¢ticos a 40, lo que har¨¢ un total de 90 personas, incluido el personal auxiliar y administrativo. El representante permanente asiste a las reuniones preparatorias de los Consejos de Ministros de la CEE. El Estado ya ha adquirido un solar pr¨®ximo al edificio de la Comisi¨®n Europea para establecer una nueva sede m¨¢s amplia que la actual Misi¨®n Espa?ola, que albergar¨¢ tambi¨¦n en el futuro a la Embajada de Espa?a en B¨¦lgica. Pero el problema m¨¢s urgente es el de las comunicaciones. En la Secretar¨ªa de Estado para las Relaciones con la CEE se insiste en que la necesidad de conocer las resoluciones y de adoptar decisiones con urgencia exige sustituir la actual comunicaci¨®n por valija por un sistema de telecopiadora moderno que env¨ªe copias simult¨¢neas a los departamentos afectados.

Para cubrir una de las dos plazas de comisario europeo parece segura la designaci¨®n de Manuel Mar¨ªn, pendiente de la confirmaci¨®n oficial por el presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez. El otro, cuyo perfil y caracter¨ªsticas puede ser consensuado con la oposici¨®n, podr¨ªa recaer en el ex vicepresidente Fernando Abril Martorell, aunque el propio interesado lo desmiente, quiz¨¢ para que su nombre no se vea quemado. Tambi¨¦n aspira al puesto Eduardo Punset, que recientemente visit¨® Bruselas, acompa?ado de Adolfo Su¨¢rez, para entrevistarse con el comisario Lorenzo Natali.

El primer comisario, Mar¨ªn, ocupar¨ªa una de las vicepresidencias de la Comisi¨®n Europea y la cartera de Asuntos Sociales. El segundo comisario se har¨¢ cargo, casi con seguridad, de la titularidad de Transportes. Estas dos responsabilidades, de peso menor, pueden verse compensadas con alguna direcci¨®n general fuerte, aunque no es f¨¢cil que se nos conceda la de Agricultura. Espa?a contar¨¢ con dos direcciones generales dentro de la Comisi¨®n Europea, y una de ellas, seg¨²n algunas fuentes en Bruselas, puede ser la de Informaci¨®n, que goza de bastante prestigio.

Aparte de estos nombramientos, a nuestro pa¨ªs le corresponden m¨¢s de un centenar de funcionarios de alto nivel, cuya importancia es decisiva, a pesar de que trabajen para la CEE. Espa?a tiene derecho a representantes en otras instituciones comunitarias, como el Tribunal de Justicia (un juez) y el Banco Europeo de Inversiones (un vicepresidente, cargo que deber¨¢ ceder a Portugal en uno de cada tres turnos).