524 muertos al estrellarse un Boeing 747 en Jap¨®n debido a la descompresi¨®n explosiva que produjo la rotura de una puerta

Un Boeing 747 de la compa?¨ªa a¨¦rea japonesa Japan Air Lines (JAL), con 509 pasajeros y 15 tripulantes a bordo, se estrell¨® ayer por la tarde, a las 18.59, hora local (11.59, hora peninsular espa?ola), en las monta?as de la provincia de Nagano, al noroeste de Tokio. El accidente se produjo poco despu¨¦s de que el piloto enviara un mensaje de emergencia avisando de que se dispon¨ªa a tomar tierra en la base a¨¦rea estadounidense de Yokota porque ten¨ªa problemas con la puerta trasera del lateral derecho del avi¨®n. Este hecho debi¨® de producir una descompresi¨®n explosiva en el interior del aparato que, probablemente, caus¨® el hundimiento parcial del piso y destroz¨® numerosos elementos vitales para su control.

Con la primera luz, grupos de paracaidistas estaban preparados para descender al aparato por medio de cuerdas desde helic¨®pteros. Avionetas que sobrevolaron el lugar a 100 metros de altura no descubrieron se?ales de vida. Los restos humeantes del avi¨®n estaban desparramados sobre unos cinco kil¨®metros de bosque dif¨ªcilmente accesible.El avi¨®n hab¨ªa salido del aeropuerto de Haneda de la capital japonesa a las 18.12 hora local con direcci¨®n a Osaka. A las 18.31 el piloto lanz¨® un mensaje de socorro. La torre de control le perdi¨® de sus pantallas de radar 47 minutos despu¨¦s del despegue. Es la primera vez que se tiene conocimiento de los problemas sucedidos en el interior del aparato tanto tiempo antes de su accidente. Las escasas esperanzas de encontrar supervivientes le convierten en el mayor desastre de un s¨®lo aeroplano en vuelo de la historia de la

El jumbo iba completamente lleno, en su mayor¨ªa con hombres de negocios y trabajadores budistas que regresaban a sus ciudades natales para las fiestas del Obon, en las que se rinde culto a los familiares fallecidos. El aparato siniestrado era un modelo especialmente modificado para tener mayor capacidad, seg¨²n un portavoz de la compa?¨ªa fabricante. Los 747 suelen transportar entre 365 y 380 pasajeros, pero tienen una capacidad m¨¢xima de 550, precis¨® el portavoz de Boeing.

El avi¨®n transportaba 239 kilos de un radio-is¨®topo -un elemento qu¨ªmico radioactivo- en sus bodegas, seg¨²n manifest¨® un portavoz de JAL. Dicho producto hab¨ªa sido expedido por la Asociaci¨®n Japonesa del Is¨®topo y era trasladado en 92 cajas. Seg¨²n un responsable de dicha organizaci¨®n, los radio-is¨®topos no tienen peligro para los seres humanos "salvo en casos de contacto prolongado". El portavoz no precis¨® el destino, que ten¨ªa dicho material, pero estos productos se utilizan frecuentemente en investigaciones cient¨ªficas y para tratamientos m¨¦dicos.

A ¨²ltimas horas de la noche de ayer, funcionarios de la Japan Air Lines entregaron a los medios informativos la lista completa de pasajeros entre los que se encontraban 12 ni?os y 21 ciudadanos extranjeros, cuya nacionalidad a¨²n no se ha podido conocer, seg¨²n informa Robledo-Hara desde Tokio. Entre los nombres japoneses figura el del cantante Kyu Skamoto, de 43 a?os, cuya canci¨®n Sukiyaki le hizo internacionalmente famoso en 1961.

Un helic¨®ptero del Ej¨¦rcito japon¨¦s localiz¨® a primeras horas de la noche (hora local) los restos del jumbo. Seg¨²n precisaron las autoridades, los restos, a los que a ¨²ltima hora de ayer no hab¨ªan podido llegar las fuerzas de rescate, se encontraban a unos 2.000 metros de altitud, en la falda del monte Okura (de 2.112 metros), en las monta?as conocidas como los Alpes japoneses, entre las provincias de Nagano y Gunina, a 72 kil¨®metros de Tokio, y estaban desperdigados en una zona de cinco kil¨®metros y medio de radio.

Comunicaciones por radio

Las brigadas de rescate manifestaron que de haber quedado alg¨²n superviviente tras el choque, habr¨ªa fallecido quemado por el incendio del avi¨®n que se declar¨® inmediatamente. Un oficial del Ej¨¦rcito japon¨¦s que sobrevol¨® el lugar donde se estrell¨® el avi¨®n manifest¨® que la zona se encontraba en llamas. "He visto fuego en diez o doce sitios en un radio de 300 metros", declar¨® el capit¨¢n Izumi Omori.

El servicio meteorol¨®gico japon¨¦s inform¨® que las condiciones del vuelo eran muy malas y que una tormenta hab¨ªa estallado en la regi¨®n monta?osa en el momento del accidente.

El avi¨®n estaba pilotado por el comandante Masami Takahama, de 49 a?os, que entr¨® en la principal compa?¨ªa a¨¦rea japonesa en 1966 y contaba en su haber con 12.404 horas de vuelo.

La oficina japonesa de aviaci¨®n civil hizo p¨²blico ayer el texto de las ¨²ltimas comunicaciones por radio del vuelo 123 de la JAL, que confirma la hip¨®tesis de que se produjo un grave problema con la puerta trasera derecha del Boeing.

A las 18.31 hora local, el piloto llam¨® a Tokio, de donde hab¨ªa salido 19 minutos antes, para dar parte de un grave problema a bordo (emergencia). El aparato se encontraba entonces sobre la isla de Oshima (al suroeste de la bah¨ªa de Tokio). A las 18.39, el piloto llam¨® al centro de control de Tokorozawa (cerca de Tokio): "La puerta trasera derecha de la cabina est¨¢ destrozada. Vamos a realizar un aterrizaje de emergencia".

El controlador a¨¦reo le pregunt¨® entonces si iba intentar el regreso al aeropuerto de Tokio-Haneda y oy¨® una voz que gritaba en la cabina: "S¨ª, por favor". Unos minutos m¨¢s tarde, una voz sofocada lleg¨® al centro de control de Tokorozawa: "Se lo ruego d¨ªgannos d¨®nde estamos. Hemos perdido el control".

Las autoridades japonesas hab¨ªan indicado un poco antes que el jumbo hab¨ªa desaparecido de las pantallas de radar y la JAL hab¨ªa comunicado que un "objeto en llamas" hab¨ªa sido localizado a unos sesenta kil¨®metros de la base a¨¦rea norteamericana de Yokota, al oeste de Jap¨®n. Al parecer, el piloto del vuelo 123 de la JAL anunci¨® su intenci¨®n de hacer un aterrizaje de emergencia en la citada base a¨¦rea norteamericana, al norte de su ruta, que sigue normalmente la costa japonesa del Pac¨ªfico.

Al frente de la b¨²squeda se encontraban peque?os grupos de la polic¨ªa local y bomberos, pero tambi¨¦n fueron enviados al lugar de los hechos cerca de 700 soldados.