El 'Discovery' aterriz¨® en California tras realizar el vuelo m¨¢s completo del programa de transbordadores espaciales
El transbordador espacial Discovery regres¨® ayer a la Tierra tras finalizar un vuelo que los expertos de la agencia espacial norteamericana, NASA, califican como uno de los m¨¢s logrados de la historia del programa de transbordadores espaciales. La nave, con cinco) cosmonautas a bordo, aterriz¨®, como estaba previsto, poco antes del alba, a las 6.16, hora local (13.16, hora peninsular), en la base a¨¦rea de Edwards, en California, tras un periplo de siete d¨ªas alrededor de la Tierra. Entre otros r¨¦cords, lograron realizar el paseo espacial m¨¢s largo de la historia, que dur¨® m¨¢s de siete horas.
En el transcurso de esta misi¨®n, la vig¨¦sima del programa, los tripulantes del Discovery pusieron en ¨®rbita tres sat¨¦lites de comunicaciones: el australiano Aussat 1 y los norteamericanos ASC-1 y Leasat 4. Adem¨¢s repararon en ¨®rbita un cuarto sat¨¦lite, el Leasat 3, de la compa?¨ªa Hughes, destinado a las comunicaciones de la Marina estadounidense, averiado desde el pasado mes de abril, fecha en la que fue lanzado por otra tripulaci¨®n del Discovery.La tripulaci¨®n estaba compuesta por el comandante Joe Engle, el copiloto Richard Covey y los cosmonautas James van Hoften, William Fisher y John Lounge.
El transbordador Discovery comenz¨® a establecer r¨¦cords incluso antes de su lanzamiento, el pasado martes: despeg¨® con tres d¨ªas de retraso (el mayor retraso en los 20 vuelos que han realizado los transbordadores espaciales).
El s¨¢bado los cosmonautas Van Hoften y Fisher pasaron m¨¢s de siete horas fuera de la nave -el m¨¢s largo paseo espacial de la historia- durante la primera de las dos salidas en los propulsores individuales, con los que cazaron, arreglaron y lanzaron de nuevo el sat¨¦lite que se encontraba a la deriva. Sin embargo, los resultados definitivos de esta reparaci¨®n no se conocer¨¢n hasta finales de octubre.
Los dos cosmonautas pasaron otras cuatro horas y 20 minutos fuera del Discovery el pasado domingo. Van Hoften, encaramado en el v¨¦rtice del brazo articulado de 17 metros del Discovery, dio tres vueltas al sat¨¦lite Leasat 3, ya reparado, para enviarlo, girando sobre s¨ª mismo, de nuevo al espacio.
Rescate de un sat¨¦lite
Dentro de dos meses, los fabricantes del sat¨¦lite -Hughes Aircraft, de California- intentar¨¢n ponerlo en su ¨®rbita operacional a 22.300 millas sobre la Tierra, ordenando por control remoto el encendido de sus motores.Esta es la segunda vez que se realiza el rescate y reparaci¨®n de un sat¨¦lite en ¨®rbita. La primera, en la que tambi¨¦n particip¨® el cosmonauta Van Hoften, fue la reparaci¨®n del Solar Max, que tuvo lugar en abril de 1984.
El Discovery estableci¨® una nueva marca, aunque esta vez se debi¨® m¨¢s a la necesidad que a la previsi¨®n, al colocar dos sat¨¦lites en ¨®rbita en un solo d¨ªa. Horas despu¨¦s del despegue, el primer sat¨¦lite de comunicaciones del Gobierno australiano, Aussat 1, tuvo que ser lanzado al estropearse la coraza protectora del sat¨¦lite.
A las pocas horas era puesto en ¨®rbita un sat¨¦lite comercial norteamericano de comunicaciones. El jueves, un tercero, el Leasat 4, gemelo del reparado, era colocado en ¨®rbita.
El transbordador trae a la Tierra un experimento cient¨ªfico realizado expresamente para la compa?¨ªa norteamericana 3M. Se trata del primer intento de conseguir cristales org¨¢nicos fabricados en el espacio utilizando un m¨¦todo de vapor.
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