Las letras del grupo Dire Straits causan pol¨¦mica en EE UU

El ¨²ltimo disco de larga duraci¨®n del grupo brit¨¢nico Dire Straits, Brothers in arms, sexto en sus siete a?os de vida como grupo, va camino de ser el disco de rock m¨¢s vendido de 1985. El elep¨¦, que ocupa desde hace dos semanas el primer lugar de las listas de ventas norteamericanas, ha vendido hasta ahora cerca de dos millones de copias y ha generado una enorme pol¨¦mica con la canci¨®n Money for nothing, escrita por Mark Knopfler e interpretada por Dire Straits.La letra de Money for nothing apunta a uno de los aspectos m¨¢s enga?osos de los v¨ªdeos musicales: la ilusi¨®n que tiene el espectador que ve a los cantantes doblar en play-back sus canciones, simulando hacerlo sin esfuerzo y con naturalidad, reduciendo el trabajo del m¨²sico a una simple pose.

Seg¨²n Knopfler, la letra y su ofensivo lenguaje provienen de una conversaci¨®n que escuch¨® entre los empleados de una tienda al hablar del triunfo f¨¢cil de las estrellas del rock. En la segunda estrofa, la voz que monologa habla en t¨¦rminos algo insultantes hacia los homosexuales, al referirse a un cantante que usa maquillaje y pendiente de oro. El rudo lenguaje que utiliza en la canci¨®n ha causado que su emisi¨®n sea excluida por varias emisoras.

Algunas revistas incluyen art¨ªculos de protesta por las ideas que Knopfler vierte en sus canciones. ?l responde que no comprende c¨®mo periodistas inteligentes pueden tomar mal sus canciones. Money for nothing es s¨®lo una del las muchas canciones del disco, que explora ideas de hermandad, machismo y militarismo desde distintas perspectivas.

Otros personajes ficticios a trav¨¦s de los que Knopfler contempla la agresi¨®n masculina incluyen un criminal a lo Rudolf Hess en la canci¨®n The mans too strong, y dos personajes, un mercenario y un soldado de la libertad, en Ride across the river. Mientras la letra apunta a un discurso pacifista, la orquestaci¨®n dramatiza el combate y el comando jer¨¢rquico.

La hosca voz de Knopfler -eco c¨¦ltico de la de Dylan- y sus melanc¨®licos solos de guitarra rompen la tensi¨®n y a menudo la crean y recrean, en una confusi¨®n deliberada de sus canciones, que oscilan entre los aspectos heroicos y demoniacos de la camarader¨ªa.

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