Blancos y negros, unidos en el rechazo a las sanciones contra Pretoria
El limitado paquete de sanciones econ¨®micas contra Sur¨¢frica decretado el lunes por el presidente Ronald Reagan ha tenido el curioso efecto de producir una rara unanimidad entre los dirigentes de las comunidades blanca y negra del pa¨ªs. El resumen ha sido que las medidas, por distintas causas, no han contentado a casi nadie.Por una parte, la decisi¨®n del presidente norteamericano ha causado consternaci¨®n en c¨ªrculos cercanos al Gobierno de Botha, que la consideran como "el desaire de un amigo", quiz¨¢ el ¨²nico amigo que le queda a Pretoria.
La reacci¨®n del propio presidente surafricano, P. W. Botha, no deja lugar a dudas sobre el desencanto que las medidas norteamericanas ha producido en los c¨ªrculos dirigentes del pa¨ªs. Frases tales corno "la cooperaci¨®n no puede estar basada en la coacci¨®n"; "estas medidas reducen la capacidad de Estados Unidos para influir en los acontecimientos del ?frica austral"; y "las medidas son punitivas y negativas adem¨¢s de lamentables", pronunciadas por Botha, ilustran suficientemente los sentimientos de su Gobierno, que hab¨ªa centrado sus esperanzas en un veto presidencial a las sanciones del Congreso de EE UU.
La opini¨®n de los hombres de negocios surafricanos fue expresada por el presidente de la Asociaci¨®n de C¨¢maras de Comercio, Reymond Parsons, quien manifest¨® que, "aunque las medidas anunciadas son m¨¢s suaves que la legislaci¨®n propuesta por el Congreso, no se puede ocultar el hecho de que constituyen un precedente desafortunado".
Aunque los c¨ªrculos financieros del pa¨ªs consideran que los efectos de las sanciones norteamericanas sobre la econom¨ªa surafricana ser¨¢n m¨ªnimos, no obstante han expresado sus temores de que la decisi¨®n de Reagan pueda provocar una, reacci¨®n en cadena por parte de otros pa¨ªses.
Tutu arremete
En el otro lado del espectro pol¨ªtico, el obispo anglicano de Johanesburgo y premio Nobel de la Paz, Desmond Tutu, ha manifestado que Reagan "se ha echado hacia atr¨¢s para salvar al Gobierno surafricano de las consecuencias de sus propias acciones". "Si Reagan fuera mi presidente, me sentir¨ªa avergonzado de ¨¦l", declar¨® el obispo. "Lo que se nos est¨¢ diciendo b¨¢sicamente es que las v¨ªctimas negras no tienen importancia", a?adi¨®.
Por su parte, un portavoz de la organizaci¨®n radical negra Azapo (Azanian Peoples Organization) manifest¨® que las medidas de Reagan "son un instrumento dedicado a salvar la cara y poder ganar tiempo para retrasar el clamor incesante de la poblaci¨®n negra para conseguir la autodeterminaci¨®n".
El jefe Gatsha Buthelezi, l¨ªder de la tribu zul¨² -la m¨¢s importante del pa¨ªs, con seis millones de miembros-, considera que las medidas son "responsables" y pueden ser consideraradas como un anuncio de otras m¨¢s duras si el Gobierno no realiza un cambio en profundidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.