El distrito Centro emprende programas de salud para marginados

El Centro de Promoci¨®n de la Salud del distrito madrile?o de Centro, coordinado por Pilar Est¨¦banez, ha emprendido un programa de salud para marginados que supone, seg¨²n sus promotores, la primera experiencia de este tipo en Espa?a. El programa est¨¢ dirigido prioritariamente a grupos de prostitutas, chaperos, heroin¨®manos y homosexuales. Tras un estudio relativo a la prevenci¨®n de la hepatitis, s¨ªndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), enfermedades sexuales y cobertura social y sanitaria, las conclusiones indican que hay un mayor riesgo de SIDA entre heroin¨®manos que entre homosexuales. El estudio se ha basado en los an¨¢lisis realizados a 300 prostitutas, 150 homosexuales y 30 heroin¨®manos.

El n¨²mero 10 de la calle de Las Navas de Tolosa es un edificio antiguo donde reina la armon¨ªa entre los 22 profesionales que trabajan all¨ª y los habitantes de Centro que acuden a la consulta. El distrito agrupa a 160.000 habitantes.

"?C¨®mo vienes aqu¨ª sin los an¨¢lisis de sangre que te pedimos?", comentaba una doctora apellidada Colomo a un joven de unos veintitantos a?os de edad. "Es que hay que levantarse pronto y nunca me despierto", respond¨ªa el citado joven. "No te preocupes", a?adi¨® la doctora Colomo, "dame tu n¨²mero de tel¨¦fono que te despertar¨¦ ma?ana a las siete y media de la ma?ana". La conversaci¨®n se desarrollaba en el pasillo del primer piso, un lugar donde se saludaban pacientes y personal del centro por su nombre de pila.

Cartillas de beneficencia

"Nuestro trabajo", explica Pilar Est¨¦banez, "se ha basado en atender a los grupos de marginados y priorizar los distintos aspectos seg¨²n las edades". "Por ejemplo", indica, "en este distrito hay un alto ¨ªndice de prostituci¨®n y hemos logrado contar con historiales cl¨ªnicos de 300 prostitutas". "Cuando detectamos enfermedades infecciosas", a?ade, "procuramos que sigan un tratamiento m¨¦dico, al mismo tiempo que les solucionamos el problema econ¨®mico mientras se curan", mediante la entrega de una de las 4.000 cartillas de beneficiencia ya expedidas que, en el caso de las prostitutas, les garantizan el pago de la pensi¨®n y de la manutenci¨®n de las afectadas mientras dura el proceso de recuperaci¨®n sanitaria". "Ya s¨¦ que esto no es el ideal", reflexiona Est¨¦banez, "pero evitamos la proliferaci¨®n de enfermedades y les mentalizamos para que se vigilen".Para Pilar Est¨¦banez, la configuraci¨®n de los grupos marginales ha variado y hay que ampliar el campo de acci¨®n, "que muchas veces es m¨¢s social que sanitario". Las prostitutas y chaperos, los homosexuales, los heroin¨®manos, son una realidad que est¨¢ presente en el barrio, afirma Est¨¦banez, "en su condici¨®n m¨¢s ¨ªnfima, porque no hay que olvidar que aqu¨ª est¨¢ la calle de la Ballesta, la zona de prostituci¨®n m¨¢s pobre de Madrid, y son grupos marginales que son rechazados en otros servicios sanitarios, al igual que muchas personas de la tercera edad que tambi¨¦n est¨¢n muy presentes en nuestros servicios". "Por ejemplo", explica, "ya hemos realizado 78 servicios domiciliarios a personas mayores de 65 a?os".

Del contacto del centro con los grupos marginales ha resultado un informe-programa destinado a la prevenci¨®n de la hepatitis, SIDA y enfermedades sexuales, consideradas de mayor riesgo en estos grupos. As¨ª, en el estudio realizado con 300 prostitutas, 150 homosexuales y 30 heroin¨®manos se desprende que en las pruebas realizadas sobre el SIDA dio positivo un 8,8% de homosexuales, el 90% de los heroin¨®manos "muy machacados", en expresi¨®n de Est¨¦banez, el 10% de entre los chaperos y nulo entre las prostitutas no heroin¨®manas. Estos an¨¢lisis significan que las personas que han dado resultado positivo han estado en alg¨²n momento en contacto con el virus, contra el que han desarrollado anticuerpos. Ello no supone que hayan sufrido o sufran necesariamente la enfermedad.

A la hepatitis tipo B, dieron positivo el 45% de los heroin¨®manos, el 33% de las prostitutas y el 47% de los homosexuales, porcentaje que se reduce al 6,5% en los casos de estado contagioso.

De las enfermedades de transmisi¨®n sexual, el informe destaca el elevado ¨ªndice de microplasmas y uroplasmas, las enfermedades ven¨¦reas m¨¢s corrientes de nuestro tiempo, y una mayor presencia de s¨ªfilis entre los homosexuales que entre las prostitutas, a las que afecta en un porcentaje del 5%, similar al de la poblaci¨®n general, lo que pone de relieve un mayor control sanitario entre las profesionales de la prostituci¨®n.