El Gobierno egipcio har¨¢ todo lo posible para probar la complicidad libia en el secuestro a¨¦reo

El primer ministro de Egipto, Ali Lufti, prometi¨® ayer que su Gobierno har¨¢ todo lo que est¨¦ a su alcance para demostrar la implicaci¨®n libia en el secuestro del avi¨®n civil egipcio, y amenaz¨® al r¨¦gimen del coronel libio Muammar el Gaddafi. "Aunque no somos amantes de la guerra", record¨®, "tomaremos una decisi¨®n en el momento y lugar oportunos, porque no podemos olvidar su crimen". Mientras tanto, el Ej¨¦rcito egipcio sigue en estado de m¨¢xima alerta en la frontera con Libia. Por su parte, Gaddafi calific¨® esa concentraci¨®n de tropas egipcias como "un compl¨® de las fuerzas del imperialismo y de la reacci¨®n".

Despu¨¦s de haber pronunciado el s¨¢bado por la ma?ana un discurso apaciguador ante la Asamblea del Pueblo (Parlamento), el jefe del Ejecutivo egipcio endureci¨® el tono en la sesi¨®n del domingo al pasar revista a todos los indicios que inducen a sospechar a su Gobierno que Libia ha fomentado el secuestro hasta Malta del aparato de Egypt Air. Durante el secuestro y la operaci¨®n de rescate, hace una semana, por una unidad de elite egipcia, murieron 60 personas, entre piratas a¨¦reos y rehenes. Esta cifra se alcanz¨® ayer al fallecer en Malta una joven israel¨ª herida por arma de fuego durante el incidente.Al t¨¦rmino del debate desarrollado en la C¨¢mara baja, la mayor¨ªa de los diputados aprob¨® una moci¨®n de apoyo a la decisi¨®n del Gabinete de recuperar a la fuerza el Boeing, descarg¨¢ndole "de cualquier responsabilidad internacional o humana por la muerte de los pasajeros inocentes".

El texto votado expresa tambi¨¦n "la esperanza de que las autoridades de La Valetta mantengan bajo vigilancia al superviviente acusado para que las fuerzas del terrorismo no logren ocultar los secretos del crimen", cuyo autor a¨²n con vida debe ser extradido a Egipto, seg¨²n insisti¨® ayer el ministro del Interior, Ahmed Rocl¨ªdi.

El Gobierno malt¨¦s ha contestado afirmativamente a la petici¨®n de entrega de Omar Mazurki, tunecino, ingresado en un hospital de la isla para ser curado de sus graves heridas, pero no ha comentado las afirmaciones del piloto del avi¨®n, Hani Galal, que el s¨¢bado asegur¨® que un segundo terrorista permanec¨ªa con vida y se encontraba tambi¨¦n hospitalizado.

La leal oposici¨®n

Los dos partidos de la oposici¨®n egipcia con representaci¨®n parlamentaria, el conservador Neo Wafd y el laborista -que juntos cuentan con 62 diputados, frente a los 390 de la formaci¨®n pol¨ªtica gubernamental-, aplaudieron la intervenci¨®n del primer ministro, pero insistieron en la necesaria creaci¨®n de una comisi¨®n de investigaci¨®n parlamentaria, propuesta respaldada por el movimiento izquierdista de Jaled Mohiedin, pero que no ha prosperado.El primer ministro hizo recaer la responsabilidad de la acci¨®n terrorista "sobre un pa¨ªs vecino que lamentamos siga siendo considerado como parte integrante del mundo ¨¢rabe e isl¨¢mico" y, a rengl¨®n seguido, se comprometi¨® a "continuar recogiendo todas las pruebas de su implicaci¨®n porque no actuamos, en base a sospechas".

"?ste", a?adi¨®, "es un asunto con graves repercusiones y, por ese motivo, debe ser examinado objetivamente para poder tomar una decisi¨®n en el momento y el lugar oportunos porque no podemos olvidar su crimen.

Desde que sucedi¨® la tragedia en el aeropuerto de La Valetta, las tropas egipcias estacionadas a lo largo de la frontera occidental de su pa¨ªs han recibido refuerzos, al tiempo que fueron puestas en estado de m¨¢xima alerta, motivo por el cual los medios de comunicaci¨®n libios denuncian a diario las "intenciones agresivas" de su vecino.

Tres son los indicios que incitan a sospechar de la participaci¨®n indirecta del r¨¦gimen de Tr¨ªpoli en el secuestro, seg¨²n explic¨® Lufti desde la tribuna:

1. La estancia de Mazurki en Libia junto con su familia.

2. La distribuci¨®n por el encargado de negocios libio en Kuwait del comunicado en el que la organizaci¨®n Liberaci¨®n de Egipto reivindica el desv¨ªo del Boeing.

3. La exigencia de los piratas de dialogar con el embajador libio en Malta y con nadie m¨¢s.