Pablo Lizcano y las mujeres,

Bochorno, indignaci¨®n y verg¨¹enza ajena liemos sentido ante la visi¨®n del programa Fin de siglo del mi¨¦rcoles d¨ªa 5 de marzo.La entrevista a Lidia Falc¨®n la realiz¨® el se?or Lizcano en medio de risitas y con un torio jocoso inadmisibile, ante la problem¨¢tica que la abogada y escritora feminista le expon¨ªa, sobre la situaci¨®n de las mujeres. M¨¢s tarde, el coloquio, entre la prestigiosa feminista y l¨ªder pol¨ªtica y un pobre ignorante con pretensiones, como es el peluquero Rupert (que, como bien le expuso Lidia Falc¨®n, debe hablar de peinados, no de filosofia), result¨® indignante, con insultos hacia Lidia Falc¨®n, hacia las feministas en general y hacia todas las mujeres: "que muchas (en referencia a un colectivo de 10 millones que representan las amas de casa) se pasan la vida sin trabajar y gastando el dinero que su pobre marido gana con tanto esfuerzo, en comprarse cosas y embellecerse", o "que los travestidos se hacen ricos cuando cambian de sexo", con claras insinuaciones de que mediante la "prostituci¨®n" a que nos dedicamos todas las mujeres conseguimos mucho dinero, resulta intolerable.

Especialmente porque el presentador no puede dejar que el programa se le vaya de las manos, aunque aqu¨ª fue peor, Lizcano se regocijaba ante el teatro que representaba el ignorante peluquero, y en ning¨²n momento hizo intento alguno de cortar la situaci¨®n. Al

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