Casi 2.000 espa?oles son baha'is'
Los seguidores de esta religi¨®n quieren acabar con la divisi¨®n del mundo a trav¨¦s de un Gobierno ¨²nico
Casi 2.000 espa?oles de 130 ciudades y pueblos profesan la fe Baha'i, una religi¨®n que aspira a ser la cuarta surgida del tronco de Abraham. Fundada a mediados del siglo XIX, la fe Baha'i quiere sintetizar y actualizar todas las grandes corrientes religiosas hist¨®ricas en su embri¨®n de gobierno mundial, el cual propugnan como ejemplo a seguir para acabar con la actual divisi¨®n del mundo.
?nicamente las personas m¨¢s atentas a la actualidad internacional recordar¨¢n las escuetas notas que de cuando en cuando informan de la persecuci¨®n y ejecuciones de los miembros de esta religi¨®n en el Ir¨¢n de Jomeini. Para el resto, la fe Baha'i ser¨¢ una perfecta desconocida a pesar de su importante implantaci¨®n en casi todo el mundo mediante 29.664 asambleas espirituales locales en 148 pa¨ªses.La baha'i, con poco m¨¢s de un siglo de antig¨¹edad, no s¨®lo aspira a su reconocimiento como cuarta religi¨®n revelada del tronco de Abraham -despu¨¦s del juda¨ªsmo, el cristianismo y el islam-, sino que afirma ser la s¨ªntesis actual de una ¨²nica verdad contenida en todas las grandes religiones anteriores, adem¨¢s de las tres citadas: la hind¨² de Krishna, la zoroastriana de Zoroastro y la budista del Gotama Buda.
Su principio fundamental es la unidad del g¨¦nero humano. Propugnan un ¨²nico gobierno mundial como soluci¨®n a todos los males actuales, y ellos, por su cuenta y en la medida de sus fuerzas, han comenzado ya a edificarlo.
Actualmente son casi 2.000 sus fieles en Espa?a, presentes en 130 localidades de todo el territorio y agrupados en 45 asambleas locales. Una minor¨ªa religiosa desconocida por la opini¨®n p¨²blica, discreta y muy activa, con una editorial en Tarrasa (Barcelona), un centro de formaci¨®n en Liria (Valencia) y una sede central en M¨®stoles (Madrid), que la pr¨®xima primavera se trasladar¨¢ a un nuevo edificio en construcci¨®n en la calle de Mat¨ªas Turri¨®n de la capital de Espa?a.
En un t¨ªpico piso de clase media acomodada del barrio de la Concepci¨®n de Madrid vive uno de sus principales impulsores y representantes, un agente comercial de 62 a?os, Fernando Sanz Mill¨¢n, que en pleno per¨ªodo de b¨²squeda espiritual, en su treintena, tom¨® contacto con el n¨²cleo inicial de los baha'is, agrupados alrededor de una ciudadana norteamericana, Virginia Orbison, que introdujo esta fe en Espa?a en 1947. Durante 20 a?os ha formado parte de la asamblea nacional, y en los ¨²ltimos 12 la ha presidido, hasta dejar el cargo hace unos meses a causa de un desprendimiento de retina.
"Estar en todas partes"
"Y porque no debe ser un cargo vitalicio", a?ade en su forma educad¨ªsima y serena de expresarse el se?or Sanz. "Ahora, el presidente es el iran¨ª nacionalizado espa?ol Ruhoala Merabkhani, que ha colaborado toda la vida conmigo. Lo importante para nosotros no es el n¨²mero que seamos, sino estar en todas partes para que en el momento propicio podamos cumplir el mensaje. Este es el tiempo de una religi¨®n universal que sintetice todas las anteriores".No tienen im¨¢genes sagradas ni ministros de culto. Para ser admitido no se necesita abjurar de nada ni seguir ning¨²n cursillo. ?stos son sus 12 principios b¨¢sicos: investigaci¨®n independiente de la verdad, unidad del g¨¦nero humano, la religi¨®n como causa de armon¨ªa y uni¨®n, la religi¨®n de acuerdo con la ciencia y la raz¨®n, abolici¨®n de todo prejuicio, la instrucci¨®n universal, igualdad del hombre y la mujer, un idioma y una escritura universales, paz universal, un tribunal internacional de justicia, resoluci¨®n espiritual del problema econ¨®mico y, finalmente, la unidad fundamental de la religi¨®n.
Esta religi¨®n contempor¨¢nea apareci¨® en Ir¨¢n. El Bab fue su precursor martirizado y Baha'u'llah su profeta fundador, que pas¨® casi toda su vida desterrado y preso. Design¨® como int¨¦rprete de sus ense?anzas y gu¨ªa de sus disc¨ªpulos a su hijo mayor, Abdul'I-Baha, que desde 1912 extendi¨® la doctrina a Europa, Egipto, Estados Unidos y Canad¨¢. En su testamento fue designado guardi¨¢n de la fe baha'i su nieto mayor, Shoglii Effendi, estudiante en Oxford, que hasta su muerte, en 1957, estructur¨® y organiz¨® la religi¨®n, d¨¢ndole implantaci¨®n mundial. Le sucedi¨® un cuerpo administrativo supremo colegiado, que a partir de 1963 se constituy¨® en Casa Universal de la Justicia, un embri¨®n de gobierno mundial que estableci¨® su sede central, sus archivos y la tumba del fundador en impresionantes edificios en las laderas del monte Carmelo, en Haifa, actual Israel, desde donde dirigen una s¨®lida organizaci¨®n de finanzas sigilosas en las que se calcula en 1.000 millones de pesetas anuales lo dedicado a proyectos asistenciales de ayuda en pa¨ªses del Tercer Mundo.
La 'c¨²pula'
Nueve personas forman la c¨²pula baha'i: los norteamericanos Chance, Kavelin, Mitchell, Ruhe y Wolcott; los brit¨¢nicos Semple y Hofman, y los iran¨ªes Fatheaxan y Nakhjavani. Son elegidos cada cinco a?os por el millar de miembros de las asambleas nacionales, formadas tambi¨¦n por nueve miembros. El 9 y el 19 son los n¨²meros que presiden toda su vida. El calendario tiene nueve meses de 19 d¨ªas y ayunan 19 d¨ªas anuales seguidos en el mes de marzo.Algunos observadores cr¨ªticos han hablado de una progresiva americanizaci¨®n de esta religi¨®n, y las autoridades iran¨ªes nunca han probado sus acusaciones de "espionaje imperialista y sionista". El jazzista Dizzy Gillepsie fue baha'i, y en cuanto a ese idioma auxiliar universal que propugnan, todo se?ala al ingl¨¦s, aunque Fernando Sanz afirma que tambi¨¦n podr¨ªa ser el espa?ol: "A¨²n no est¨¢ claro". Pero de aqu¨ª al a?o 2000 se conseguir¨¢ la paz menor y los pa¨ªses se unir¨¢n primero en federaciones continentales y luego vendr¨¢ una comunidad mundial.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.