Raymond Louw

Raymond Louw, periodista surafricano que ha superado ya la barrera de los 50 a?os, padre de dos hijos y una hija, es consciente de que informar en su pa¨ªs es un "delito" que puede costarle pagar una multa de dos millones de pesetas y varios a?os de c¨¢rcel si se aplican las ¨²ltimas medidas restrictivas sobre la Prensa. Pero a Louw, que tuvo que exiliarse en otro tiempo en el Reino Unido precisamente por su posici¨®n antiapartheid, no le asusta a estas alturas denunciar los atropellos contra los derechos humanos.

El periodista surafricano ha estado estos d¨ªas en Madrid, donde ha participado en los actos conmemorativos del d¨¦cimo aniversario de EL PA?S, y se ha mostrado "sorprendido" por la pujanza de la Prensa en Espa?a. "Creo que est¨¢ a la altura de los dem¨¢s pa¨ªses democr¨¢ticos occidentales", ha afirmado.No quiere hablar directamente de sus peripecias personales. "Porque", dice, "las acciones de represi¨®n no se han dirigido contra mi persona,* sino contra la libertad de expresi¨®n". Sin embargo, su carrera profesional est¨¢ marcada, como la de otros muchos periodistas de su pa¨ªs, por la lucha contra las restricciones a la libertad de informaci¨®n.

Amigo personal del obispo Desmond Tutu, premio Nobel de la Paz, la expresi¨®n de su posici¨®n cr¨ªtica respecto al "estado de cosas en Sur¨¢frica" se remonta a los a?os sesenta, cuando fue responsable del Weekly Newsletter.

'Rand Daily Mail'

Una de las etapas que recuerda con m¨¢s nostalgia es la de 1966 a 1977, en la que fue editor del peri¨®dico Rand Dady Mail, fundado en 1902 por el novelista ingl¨¦si Edgar Wallace. Cuando desapareci¨® este peri¨®dico, en mayo det a?o pasado, "por problemas pol¨ªtico-ec¨®n¨®micos", ten¨ªa una circulaci¨®n auditada de 120.000 ejemplares, que supon¨ªan un miill¨®n de lectores. Al menos la mitad era de raza negra.Durante los cinco a?os siguientes Louw desempe?¨® funciones directivas en la Asociaci¨®n de Peri¨®dicos de Sur¨¢frica. Lleg¨® a ser incluso director general de esta asociaci¨®n. Posteriormente tuvo que marcharse al Reino Unido "empujado por las circunstancias de su pa¨ªs". Volvi¨® recientemente a Sur¨¢frica y en la actualidad dirige el Southern African Report de Johanesburgo.

Durante su estancia en el Reino Unido tuvo la ocasi¨®n de reforzar su trabajo como miembro del comit¨¦ ejecutivo internacional del Instituto Internacional de Prensa (IPI), que tiene su sede en Londres. Como miembro de la plana mayor de este organismo ha intervenido decisivamente en las repetidas condenas que el IPI ha hecho p¨²blicas contra las restricciones a la libertad de informaci¨®n impuestas por el Gobierno de Sur¨¢frica.

Raymond Louw afirma que la batalla m¨¢s importante que tienen que librar ahora los editores de diarios es precisamente la de cambiar las leyes restrictivas contra la Prensa. "La situaci¨®n se ha hecho cada vez m¨¢s dificil porque han aumentado las restricciones que desde las normas jur¨ªdicas se pretende imponer a la libre informaci¨®n". "Es necesario, ante todo, hacer lo posible para cambiar estas leyes", a?ade el director del Southern African Report.