Solo ante la evidencia

Jacobo Majluta parece encontrarse solo, con su determinaci¨®n de recusar a la Junta Central Electoral y no aceptar el resultado desfavorable de las urnas, ¨²nicamente rodeado de un grupo de fieles de su propia tendencia dentro del Partido Revolucionario Democr¨¢tico (PRD).

Es comprensible que para un pol¨ªtico en plena forma sea dif¨ªcil aceptar una derrota ante un anciano ciego, m¨¢s a¨²n cuando todas las encuestas, probablemente compradas y manipuladas, le daban como favorito. Sin embargo, Majluta ha cosechado el resultado de la pugna de varios meses que dividi¨® a su partido en tendencias. La designaci¨®n del candidato presidencial del PRD se resolvi¨® de mala manera en una convenci¨®n de la que ni siquiera hoy, varios meses despu¨¦s, existen resultados fiables.

Para conseguir el nombramiento presidencial, Majluta se dedic¨® desde su puesto de presidente del Senado a una pol¨ªtica de oposici¨®n al presidente de su propio partido, Salvador Jorge Blanco. Despu¨¦s vino la lucha contra el otro aspirante a la presidencia, el alcalde de Santo Domingo, Jos¨¦ Francisco Pe?a G¨®mez.

MajIuta cre¨® su propio partido, llamado La Estructura, que acudi¨® a las elecciones con candidatos propios, aunque sus votos se sumaban a los del PRD porque los dos ten¨ªan con Majluta, un mismo candidato. Ahora ser¨¢ dif¨ªcil que todas las tendencias del PRD se sumen al intento de Majluta de no aceptar unas elecciones que los m¨¢s sensatos en el PRD consideran ya como perdidas.