Suicidios misteriosos en la c¨¢rcel de Almer¨ªa
Cuatro muertes por ahorcamiento en los ¨²ltimos meses
En la c¨¢rcel de Almer¨ªa se producen suicidios, como en otros centros. Pero hay muertes que nadie explica y que sorprenden por la frialdad de los protagonistas. Hay quien sostiene la posibilidad de que los dos principales sospechosos de la violaci¨®n y muerte de una anciana, ocurrida el 30 de marzo, fueron suicidados. El d¨ªa 11 de abril, Francisco Cano Fern¨¢ndez, de 25 a?os, y Luis Mart¨ªnez Arriaga, de 22 a?os, fueron hallados ahorcados en la c¨¢rcel de Almer¨ªa.
Este peri¨®dico tuvo acceso varios d¨ªas despu¨¦s a la carta que ambos dejaron escrita. "La justicia no nos oye", escrib¨ªan con faltas de ortograf¨ªa, "no somos culpables, y nuestra ¨²ltima voluntad es que nos entierren en Purchena". Ni la familia ni nadie del pueblo reclam¨® los cad¨¢veres. La burocracia penitenciaria y judicial se limit¨® a enterrarlos en el cementerio de AImer¨ªa, a 130 kil¨®metros de Purchena, localidad donde ocurri¨® el suceso. Ning¨²n tribunal ha demostrado que ambos fueran culpables, aunque alg¨²n peri¨®dico local les calificase de asesinos.En la c¨¢rcel, el director, Juan Manuel Ruiz, y los funcionarios aseguraron que era imposible acceder a la celda que ambos ocupaban a la hora en que fueron encontrados, uno de ellos a¨²n con signos de vida. La reanimaci¨®n no fue posible. A los pocos d¨ªas, Francisco Navarro Navarro, de 29 a?os, casado y natural de la localidad almeriense de Roquetas de Mar, era hallado ahorcado. Como todav¨ªa respiraba, fue trasladado al hospital provincial. Los m¨¦dicos le fracturaron las costillas al intentar reanimarlo. Muri¨®. Especialistas consultados solicitan a gritos que en la c¨¢rcel deber¨ªa haber centro de reanimaci¨®n. La mayor¨ªa de las muertes podr¨ªan evitarse.
Emilio Fern¨¢ndez Pe?a, de 26 a?os; soltero y natural de Roquetas de Mar, compa?ero de celda de Navarro, dice que a su amigo le faltaban semanas para salir de prisi¨®n. "Ten¨ªa la obsesi¨®n de la presi¨®n social". Navarro no ten¨ªa antecedentes judiciales "porque ¨¦l no era un delincuente". Se le acusaba de haber sustra¨ªdo un frigor¨ªfico de un apartamento de la urbanizaci¨®n tur¨ªstica de su pueblo. El frigor¨ªfico lo quer¨ªa para su mujer y sus hijos.
No han sido s¨®lo esas tres muertes. En los ¨²ltimos meses tambi¨¦n se ahorc¨® Jos¨¦ Montes P¨¦rez, de 29 a?os, acusado del atraco frustrado a un estanco en N¨ªjar (Almer¨ªa). El pasado martes, un joven de Gab¨®n intentaba suicidarse cuando un funcionario se percat¨®. "El psiqui¨¢trico no lo soporto porque me atan a la cama y me dan pastillas que me dejan gilipollas". Este joven, de 23 a?os, desde que estuvo en la Legi¨®n padece un desequilibrio ps¨ªquico.
Las mujeres son las que m¨¢s denuncian las condiciones poco higi¨¦nicas en que se dan las comunicaciones personales. Se amontonan los familiares en un habit¨¢culo insoportable y poco higi¨¦nico.
La falta de lavabos y de agua caliente son otras cuestiones planteadas. Para el director, de la prisi¨®n, Juan Manuel Ruiz, se solventar¨¢n con la entrada en funcionamiento de la nueva c¨¢rcel, prevista para los pr¨®ximos meses y que tiene un.presupuesto de 2.200 millones de pesetas. Su entrada en funcionamiento lleva un retraso de m¨¢s de un a?o.
Hacinamiento
La prisi¨®n de Almer¨ªa tiene capacidad para 150 internos, y el pasado jueves hab¨ªa 319 hombres y 18 mujeres. Despu¨¦s de atravesar cuatro rejas y situarse en cualquiera de las galer¨ªas se percibe la situaci¨®n y el hacinamiento cuando se oyen los cerrojos y los golpes met¨¢licos de las puertas.Un funcionario acompa?¨® al periodista hasta el interior en direcci¨®n a la biblioteca. Libros descoloridos y de saldo. Hay ambiente de trabajo, la c¨¢rcel de Almer¨ªa es la decana de la Prensa penitenciaria. Tienen una revista, Flash, cuyo director, Pedro Mu?oz, est¨¢ condenado por estafa y por ejercer de abogado. Ahora trabaja y hace vida normal hasta que por las noches regresa a prisi¨®n. Algunos ni se inmutan por la presencia de los improvisados invitados.
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