Las elecciones japonesas

SUDDEUTSCHE ZEITUNGEl ¨¦xito del Partido Dem¨®crata Liberal (PDL) en las elecciones legislativas japonesas ha superado incluso las previsiones m¨¢s optimistas. Sobre todo en lo que concierne a la C¨¢mara baja, en la que el partido conservador en el Gobierno ha logrado el mejor resultado, ( ... ) que ha logrado en su historia. Pero tambi¨¦n en la segunda C¨¢mara del Parlamento, que deb¨ªa ser renovado en su 50%, se ha asegurado el partido del primer ministro Nakasone una c¨®moda mayor¨ªa.Gracias al indiscutible ¨¦xito electoral del Partido Dem¨®crata Liberal la pol¨ªtica japonesa podr¨¢, despu¨¦s de diez largos a?os de inestabilidad, volver a la tranquilidad que perdi¨® hacia la mitad de la d¨¦cada de los setenta. El poder monopol¨ªstico del PDL, que desde su creaci¨®n en 1955 ha gobernado de forma ininterrumpida, ha sido. de nuevo instaurado. Esto viene tambi¨¦n a significar el retorno al dominio del partido ¨²nico. ( ... )

Si se buscan las razones para el ¨¦xito obtenido por el PDL, se podr¨¢n observar, junto a ciertas situaciones favorables y algunas ventajas coyunturales, una serie de factores de gran importancia.

En primer lugar, el que la oposici¨®n, dividida en cinco partidos, no fuera capaz de ofrecer una alternativa que inspirase confianza al electorado. Para el Partido Socialista de Jap¨®n (PSJ), ocupado en colocar a su partido en la situaci¨®n del Partido Socialdem¨®crata alem¨¢n de tiempos del programa de Godesberg, las elecciones se celebraron demasiado pronto. Y, aparte de todo esto, al PSJ le hace falta un l¨ªder atractivo. (...) A los comunistas no les ha salido la jugada de intentar superar las p¨¦rdidas sufridas en las anteriores elecciones. Los ¨²nicos que no han salido trasquilados han sido los budistas, pese a que, por sus caracter¨ªsticas religiosas, est¨¦n muy limitados.

En segundo lugar, el PDL, en¨¦rgicamente dirigido por Yasuhiro Nakasone, logr¨® presentar ante los electores la imagen de un partido din¨¢mico, que, pasados los a?os, hab¨ªa conseguido sacar fuerzas, abandonar las actitudes defensivas ante las cr¨ªticas recibidas y reaccionar a la ofensiva ante los m¨¢s acuciantes problemas y buscarles soluciones.