Geoffrey Howe regresa a Londres sin resultados positivos de su "misi¨®n de paz" para Sur¨¢frica
El secretario del Foreign Office, sir Geoffrey Howe, regres¨® ayer a Londres despu¨¦s de una gira de cuatro d¨ªas por ?frica meridional, destinada a conseguir el apoyo de los pa¨ªses africanos para la misi¨®n imposible emprendida en nombre de la Comunidad Europea: el inicio de negociaciones entre el Gobierno surafricano y los nacionalistas negros. En su recorrido por Zambia, Zimbabue y Mozambique, calificado por el pol¨ªtico brit¨¢nico de "misi¨®n de paz", Howe s¨®lo encontr¨® un eco medianamente favorable a sus esfuerzos en la antigua colonia portuguesa, donde, aparentemente, el presidente Samora Machel le expres¨® su apoyo a los intentos de encontrar una soluci¨®n negociada al problema surafricano, parecida a la conferencia constitucional de Rhodesia en 1979.
[La oposici¨®n de los pa¨ªses africanos a la pol¨ªtica brit¨¢nica en Sur¨¢frica, contraria a la adopci¨®n de sanciones econ¨®micas contra el r¨¦gimen de Pretoria, ha puesto en peligro los pr¨®ximos Juegos de la Commonwealth. Kenia se convirti¨® ayer en el cuarto pa¨ªs africano que se suma al boicoteo del espect¨¢culo deportivo que debe comenzar el pr¨®ximo d¨ªa 24 en Edimburgo. Ghana, Nigeria y Uganda lo hab¨ªan hecho anteriormente, y se espera que otros lo hagan en los pr¨®ximos d¨ªas.][Al comenzar el segundo mes del estado de excepci¨®n, la violencia sigue siendo la nota dominante en Sur¨¢frica. Otras cinco personas murieron ayer en enfrentamientos pol¨ªticos, seg¨²n la inf¨®rmaci¨®n facilitada por la Oficina de Informaci¨®n del Gobierno, que no da m¨¢s detalles, y se espera en un clima de gran tensi¨®n la jornada de huelga contra el apartheid propuesta para ma?ana por los sindicatos negros.]
El ministro de Asuntos Exteriores mozambique?o, Joaquim Chissano, manifest¨®, tras una entrevista de 90 minutos entre Howe y Machel, que cre¨ªa en la buena fe del ministro brit¨¢nico, pero que la pasada experiencia demostraba que el Gobierno surafricano "no propicia precisamente las condiciones necesarias para que florezca un di¨¢logo".
Algunos observadores apuntan la posibilidad de que Machel pueda usar sus buenos oficios con las diversas partes en el caleidoscopio surafricano, ya que es uno de los pocos l¨ªderes negros que mantiene un di¨¢logo dif¨ªcil con Pretoria, pero di¨¢logo al fin y al cabo, como consecuencia del acuerdo de Nkomati entre los dos pa¨ªses, y al mismo tiempo tiene una gran influencia con la direcci¨®n del Congreso Nacional Africano (ANC).
El Gobierno de Machel -enfrentado a una sangr¨ªa diaria en recursos humanos y econ¨®micos como consecuencia de las actividades de la guerrilla del Renamo, y sin poder vender a Sur¨¢frica, como consecuencia de esa guerrilla, la electricidad producida por la gigantesca presa de Cahora Bassa- necesita los env¨ªos de sus trabajadores en las minas surafricanas -una de las pocas fuentes de divisas con que cuenta- para poder hacer frente al pago de sus importaciones.
La acogida recibida en Mozambique fue inmediatamente aprovechada por el pol¨ªtico brit¨¢nico en su viaje de regreso a Londres para hablar de "cautelosa esperanza" y "aliento considerable" en torno a sus esfuerzos. Howe tuvo mucho cuidado en insistir en sus entrevistas con los l¨ªderes surafricanos que su viaje estaba respaldado no s¨®lo por el Gobierno brit¨¢nico, cuya primera ministra, Margaret Thatcher, es tab¨² para algunos de los interlocutores de Howe, sino por la Comunidad Europea, as¨ª como por los Gobiernos de los pa¨ªses industrializados, incluidos Estados Unidos y Jap¨®n.
En sus entrevistas anteriores en Lusaka y Harare, el presidente Kenneth Kaunda y el primer ministro Robert Mugabe hicieron saber a Howie que consideraban su misi¨®n como "una p¨¦rdida de tiempo" y que era pr¨¢cticamente imposible que ¨¦l triunfara donde hab¨ªa fracasado el grupo de notables enviado por la Commonwealth.
Las posibilidades de ¨¦xito de Howe sufrieron un nuevo golpe el viernes, cuando Winny Mandela declar¨® en Ciudad del Cabo, poco despu¨¦s de entrevistarse en la c¨¢rcel con su marido, Nelson Mandela, que el l¨ªder nacionalista, siguiendo la actitud adoptada por otros dirigentes contrarios al apartheid, "no ten¨ªa inter¨¦s" en entrevistarse con el secretario del Foreign Office.
Sin embargo, Howe tiene todav¨ªa la remota esperanza de que en sus dos entrevistas con el presidente surafricano, Pieter Botha, previstas para los d¨ªas 23 y 29 de este mes, consiga convencerle de que su misi¨®n es la ¨²ltima oportunidad que tiene Pretoria de evitar la adopci¨®n de medidas econ¨®micas punitivas por parte de Occidente.
Sir Geoffrey Howe, que ma?ana inicia una ronda de conversaciones con el titular de Asuntos Exteriores sovi¨¦tico, Edvard Shevardnadze, viajar¨¢ a Washington a finales de la pr¨®xima semana para informar al secretario de Estado norteamericano, George Shultz, de sus entrevistas con su colega sovi¨¦tico y de su periplo por los pa¨ªses africanos.
Comienzo del curso
[El comienzo de la huelga ma?ana en Sur¨¢frica coincidir¨¢ con el inicio del curso escolar de los estudiantes negros, que se han destacado tradicionalmente por su posici¨®n de punta de lanza en la lucha. contra el apartheid, informa la, agencia Reuter. El Gobierno, que hab¨ªa dado a los estudiantes unas largas vacaciones para detener los enfrentamientos de los pasados meses, ha anunciado que la polic¨ªa estar¨¢ alerta para evitar incidentes y, que se dar¨¢ a los estudiantes unas tarjetas de identidad para, evitar que se infiltren entre ellos "los agitadores". Los padres y los alumnos han advertido que esta medida ser¨¢ "una fuente de enfrentamientos" entre estudiantes y fuerzas de seguridad".]
[Ante la jornada de ma?ana, las organizaciones sindicales han advertido del "clima propicio para tina escalada de la tensi¨®n" creado por la dura pol¨ªtica del Gobierno de Pretoria.]
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