Alarma en el 'caso Banca Catalana'

YA

La siempre sensata voz del presidente del Consejo General de la Abogac¨ªa ha dejado sentirse nuevamente, en torno esta vez a las singularidades que rodean el caso Banca Catalana. (...) T¨¦rminos como alarma, riesgo de influenciar desde fuera las decisiones o beligerancia no justificada del ministerio p¨²blico en boca del ilustre abogado producen evidente desasosiego por estar referidos a un affaire que, a su acusada relevancia pol¨ªtica, une notas de excepcionalidad que le: hacen carecer de precedente en nuestra m¨¢s pr¨®xima historia. (...)En otras ocasiones nos hemos ocupado de los aspectos generales del asunto, susceptibles de transformar a corto plazo la realidad pol¨ªtica catalana, con la consiguiente influencia en el mapa nacional. Hemos defendido, pese a todo, la ineludible sujeci¨®n de todo ciudadano, por alto que sea su status, a la ley y, por lo mismo, la razonable necesidad de imprimir la urgencia adecuada a las actuaciones en curso. Ahora, con motivo de la difusi¨®n por un peri¨®dico madrile?o -el mismo que en su d¨ªa dio a la luz el inicio de la investigaci¨®n judicial- del documento acusatorio fiscal, al regreso de Pujol de tierras argentinas tras un importante viaje de Estado, debemos plantearnos los elementos informativos del caso cuando el procedimiento todav¨ªa se encuentra en su estado inicial. En este sentido, Ya ha propugnado siempre la libertad y transparencia informativa, por lo que debe felicitar al colega que demostr¨® acierto al hacerse con la primicia del inicio de diligencias, corroborado ahora por la nueva exclusiva. Distinto juicio nos merece, sin embargo, la insistente preferencia, mezclada con cierta agresividad injustificada, susceptible de advertirse en los telediarios de los ¨²ltimos d¨ªas, en contraste con la pereza propia de la difusi¨®n de otras informaciones como las relativas, hace tiempo, al caso Flick, o ahoraal esc¨¢ndalo de las concesiones de loter¨ªas. (...)

Parece razonable pensar que pretende erigirse (...) un paralelo proceso de opini¨®n en el que se presenta al hasta ahora s¨®lo imputado presidente Pujol como centro sflente y pasivo de todas las acusaciones formuladas desde la autoridad y el rigor que proporciona el ministerio fiscal. A trav¨¦s de la. escalonada difusi¨®n de estas acusaciones no contestadas se genera un goteo difamatorio evidente respecto de un pol¨ªtico que simult¨¢neamente rige los destinos de la primera comunidad aut¨®noma del Estado. En este contexto, cada vez se convierte en m¨¢s imprescindible la celebraci¨®n de un juicio oral contradictorio p¨²blico que desemboque en una sentencia absolutoria, como ¨²nico mecanismo eficaz que exonere plenamente al dif¨¢rnado de las acusaciones vertidas reiterada e insistentemente contra ¨¦l. Tal vez sea eso lo que se persiga. Esto es, sentar en el banquillo a Pujol, con independencia del ¨¦xito o del fracaso de los cargos formulados, como ejercicio supremo de degaste pol¨ªtico de quien lidera un partido que s¨®lo ha conseguido aumentar votos con ocasi¨®n de cada disputa electoral. (...)

15 de agosto