Aborto por analog¨ªa
Me ha sorprendido poderosamente el art¨ªculo de Jes¨²s Moster¨ªn con el titulo El roble, la bellota y el aborto, publicado en EL PA?S del s¨¢bado 18 de octubre. Ataca varios argumentos de los antiabortistas de forma muy expeditiva. El argumento principal contra el que parece combatir (el feto es verdadera vida humana individualizada y no puede, por lo mismo, ser sacrificada) lo expone en farma muy inadecuada y pretende desmontarlo a partir de una analog¨ªa en la que insiste de muchas maneras. Su argumento podr¨ªa resumirse as¨ª: "Una bellota no es un roble. Un embri¨®n humano no es un hombre, aunque son estadios de un mismo organismo. La prohibici¨®n de talar robles no implica la prohibici¨®n de arrancar algunas de sus bellotas. Y lo rnismo cabe decir acerca de la supresi¨®n de embriones humanos. Eri conclusi¨®n: el aborto no es un homicidio".Sabe muy bien Jes¨²s Mosterin que los argumentos de analog¨ªa son muy endebles, como ya lo hizo ver Arist¨®teles. Tales argumentos, adem¨¢s, pueden volverse muy f¨¢cilmen te en contra de lo que se quiere probar o a favor de lo que no se quiere llegar a decir. Podemos intentar verlo brev¨ªsimamente.
La raz¨®n decisiva para admitir o no la supresi¨®n de embriones no est¨¢ en que sean una etapa biol¨®gica distinta de la del individuo adulto, "aunque son estadios de un mismo organismo". Moster¨ªn deber¨ªa haber precisado cu¨¢ndo se trata ya (de verdadera vida humana, de verdadero hombre o mujer. (No vale recurrir al lenguaje usual: "El embri¨®n no es un hombrer". Tambi¨¦n decimos: "El ni?o no es un hombre todav¨ªa", o "esta ni?a parece ya una mujer".) La cuesti¨®n de fondo est¨¢ en si el embri¨®n es ya una vida individuafizada, de la especie que sea, y en si puede ser leg¨ªtimo suprimir una vida de esa especie. Puestas las cosas as¨ª, la analog¨ªa de Jes¨²s Moster¨ªn podr¨ªa proponerse de esta otra manera: "No es lo mismo un brote de vivero que un ¨¢rbol en plena producci¨®n de frutos, ni ¨¦ste es lo mismo que una planta ya vieja e infecunda. La prohibici¨®n de talar olivos en un pa¨ªs no tiene por qu¨¦ afectar a la supresi¨®n de arbolitos ole vivero, sobrantes o raqu¨ªticos, ni tampoco a la sustituci¨®n de olivos infecundos por otros j¨®venes y productivos. Por la misma raz¨®n, no habr¨ªa por qu¨¦ ver mal la supresi¨®n de vidas humanas, en ni?os minusv¨¢lidos o en ancianos improductivos".
Me gustar¨ªa: saber si el se?or Moster¨ªn estar¨ªa dispuesto a suscribir tan humanitarias. propuestas.- Isidro Mu?oz Triguero.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.