La 'conexi¨®n iran¨ª' coloca a Reagan a la defensiva

Ronald Reagan, por primera vez desde que lleg¨® a la presidencia, est¨¢ a defensiva. Su magia de gran comunicador y la hasta ahora eficaz maquinaria de propaganda d¨¦ la Casa Blanca no consiguen dominar el excepticismo de la opini¨®n p¨²blica sobre la pol¨¦mica conexi¨®n iran¨ª. El inngreso abrir¨¢ esta semana una investigaci¨®n sobre el brusco cambio pol¨ªtica al vender armas a Ir¨¢n, manteniendo la operaci¨®n en secreto durante 11 meses y mintiendo mientras tanto a los aliados.

Primeroro el Parlamento quiere saber m¨¢s y est¨¢ dispuesto a entrar tambi¨¦n a fondo en la legalidad de la pol¨ªtica encubierta hacia Nicaragua y en la confusi¨®n recieinte sobre los acuerdos de aramentos con la Uni¨®n Sovi¨¦tica y lo que verdaderamente distinque Reagan con Mijail Gorbachov en Islandia. El presidente, lleva tres meses eludiendo comparecencia p¨²blica ante los periodistas, ha convocado fin una conferencia de prensa televisada para el mi¨¦rcoles.Reagan est¨¢ solo frente a lo e los dem¨®cratas consideran nada importante cat¨¢strofe de pol¨ªtica exterior", y los propios publicanos, como el hasta ahora l¨ªder de la mayor¨ªa del Sena, Robert Dole, se?alan que es Ignora en lo que es muy dificil aportar al presidente. Ayer se conm¨®ci¨®n que ¨¦ste ni siquiera hab¨ªa formado a la junta de jefes de estado Mayor del suministro de mas a Ir¨¢n. El jefe de la misma, almirante William Crowe, se sorprendi¨® tanto, al enterarse

la Prensa, que orden¨® una investigaci¨®n en la cadena de mando por si alguno de sus subalternos no le hab¨ªa informado. Estupefacto, descubri¨® que el secretario de Defensa, un civil, Caspar Weinberger, y el consejero de Seguridad Nacional, un militar, el almirante John Poindexter, no le hab¨ªan comunicado nada por orden del presidente.

"Hemos recibido un impacto directo", admiti¨® ayer un miembro de la Casa Blanca tras conocer los sondeos que reflejan que la mayor¨ªa de los americanos desaprueba las negociaciones con Ir¨¢n.

El secretario de Estado, George Shultz, critic¨® ayer indirectamente la entrega de armas a Ir¨¢n y se?al¨® que el embargo militar de Washington contra Teher¨¢n sigue en vigor, informa France Presse. En una en¨²si¨®n de la cadena de televisi¨®n CBS, Shultz declar¨® que estaba en contra de la entrega de armas a Ir¨¢n dada "la guerra entre Ir¨¢n e Irak, el persistente apoyo del r¨¦gimen iran¨ª al terrorismo y el hecho de que est¨¦ asociado con quienes mantienen secuestrados a los rehenes" norteamericanos.

Reagan, utilizando su instinto, tambi¨¦n bajo la presi¨®n de los familiares de los rehenes en L¨ªbano, y empujado por la audacia y el activismo de su jefe de gabinete y del Consejo de Seguridad Nacional -convertido en una mini CIA- dio su aprobaci¨®n a una operaci¨®n secreta que no contaba con el visto bueno de los m¨¢s importantes miembros de su gabinete: George Shultz y Caspar Weinberger. "No estoy preparado a admitir a¨²n que hemos fracasado", afirm¨® ayer Poindexter en una entrevista.