El Ej¨¦rcito filipino acusa a la guerrilla comunista de violar el alto el fuego
Rafael Ileto, ministro de Defensa de Filipinas, afirm¨® ayer en Manila que "actos como el celebrado en Samail suponen una clara violaci¨®n del acuerdo de alto el fuego", refiri¨¦ndose al descenso de guerrilleros armados del Nuevo Ej¨¦rcito Popular (NEP) a dicha localidad, situada a unos 150 kil¨®metros al oeste de la capital.
"Es un acto de provocaci¨®n, ya que el acuerdo de alto el fuego deja claro que los guerrilleros no pueden ir armados en zonas urbanas", a?adi¨® el general Fidel Ramos, jefe del Estado Mayor filipino.Ramos e Ileto, condenaron el acto organizado por los guerrilleros del NEP en Samal, situada en la provincia de Bataan, a s¨®lo 30 kil¨®metros de la base militar estadounidense de Subic-. En la jornada del pasado jueves, los 50 guerrilleros bajaron al barrio de San Juan, en Samal, armados con fusiles ametralladoras, pistolas y granadas, para participar, ante la Prensa filipina y extranjera, en un acto pol¨ªtico en presencia de Satur Ocampo y Antonio Z¨²mel, los dirigentes del Frente Nacional Democr¨¢tico (FND), la coalici¨®n pol¨ªtica de la izquierda filipina que negoci¨® el alto el fuego con el Gobierno de Coraz¨®n Aquino y que integra, entre otros, a la rama pol¨ªtica de los guerrilleros comunistas del NEP.
Romeo Capulong, uno de los abogados del FND, rechaz¨® ayer las cr¨ªticas del ministro Ileto y del general Ramos, y replic¨®: "El acuerdo de alto el fuego no determina qu¨¦ puntos deben ser considerados como zonas urbanas".
El ministro de Defensa, Rafael Ileto, precis¨®, sin dramatizar lo ocurrido, que corresponder¨¢ a la comisi¨®n para el control del alto el fuego determinar si se trat¨® de una violaci¨®n del acuerdo el hecho de la presencia de guerrilleros armados en Samal, o, como opinan algunos observadores, fue un simple acto de propaganda pol¨ªtica.
"Se trata de una oportunidad para el Gobierno y las fuerzas armadas de comprobar que el NEP es amado por el pueblo", dijo Ocampo en la jornada del pasado jueves, en Samal, ante unas 1.000 personas que participaron en el acto conjunto entre la guerrilla comunista y los l¨ªderes del FND.
Es evidente que a los tres d¨ªas de aplicaci¨®n del alto el fuego, la izquierda filipina capitaliza la atenci¨®n de la Prensa y de la opini¨®n p¨²blica. Sus l¨ªderes figuran en programas de televisi¨®n o aparecen diariamente en las primeras planas de los diarios, cuando hace tan s¨®lo unos d¨ªas estaba sumida en la clandestinidad.
Hasta ahora, el alto el fuego es respetado sin graves problemas, aparte de la muerte de un soldado el primer d¨ªa de tregua en Davao, en la isla de Mindanao. Pero para el Gobierno de Cory Aquino surge otro foco de inquietud: al sur de Filipinas, en la isla de Mindanao, el movimiento separatista isl¨¢mico del Frente Nacional de Liberaci¨®n Moro (FNLM) pide la independencia de la isla.
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