El Gobierno advierte a quienes pagan el 'impuesto revolucionario' que pueden acabar ante los tribunales

El Gobierno se ha puesto en contacto reservadamente con empresarios vascos que, seg¨²n la documentaci¨®n intervenida a ETA en la f¨¢brica Sokoa, pagaban el impuesto revolucionario a la organizaci¨®n terrorista, seg¨²n han informado fuentes gubernamentales. El Ejecutivo trata de evitar que vuelvan a pagar el impuesto, y les ha advertido que la Audiencia Nacional puede ejercer acciones legales contra ellos a pesar de que fueran extorsionados, y especialmente contra un reducido grupo de seis que contribu¨ªa voluntariamente a ampliar las arcas de ETA. Por otra parte, en la mencionada documentaci¨®n se ha comprobado que la organizaci¨®n terrorista ha mantenido relaciones con el IRA en relaci¨®n con la compra de armamento.

La estrategia del Ministerio del Interior pretende intimidar a los empresarios para que se resistan a pagar el denominado impuesto revolucionario, cuya recaudaci¨®n, seg¨²n los documentos intervenidos hace dos meses en la empresa Sokoa, de Hendaya (Francia) parece haber disminuido ligeramente en los ¨²ltimos a?os.El Ministerio del Interior, que en un principio se mostraba dispuesto a facilitar la inf¨®rmaci¨®n intervenida a ETA en Hendaya, ha variado su estrategia y prefiere que sean los tribunales correspondientes -en este caso, la Audiencia Nacional- los responsables de tan delicado caso.

La Audiencia Nacional ha solicitado a Francia por procedimiento de urgencia, y mediante la correspondiente com¨ªsi¨®n rogatoria, una copia compulsada judicialmente de la documentaci¨®n, ya que las copias normales no tienen valor a efectos judiciales para tomar las sanciones oportunas.

El Ministerio del Interior, que posee copia de toda la informaci¨®n desde inmediatamente despu¨¦s de que la polic¨ªa francesa interviniera en la f¨¢brica Sokoa, ha tratado de impedir las filtraciones period¨ªsticas para no ser acusado de utilizar esos datos en la campa?a electoral del Pa¨ªs Vasco, aunque, seg¨²n fuentes consultadas, esas filtraciones le habr¨ªan perjudicado inevitablemente.La documentaci¨®n financiera de ETA intervenida en la f¨¢brica de muebles Sokoa revela que alrededor de 90 empresarios del Pa¨ªs Vasco pagaban el impuesto revolucionario mediante la extorsi¨®n, a excepci¨®n de un grupo de seis personas que lo hac¨ªan voluntariamente. Si los primeros podr¨ªan ser sancionados judicialmente, los voluntarios se encontrar¨ªan en una situaci¨®n mucho m¨¢s dif¨ªcil, presumiblemente por colaboraci¨®n con banda armada.La documentaci¨®n de Sokoa es realmente minuciosa y describe los empresarios que pagaban a plazos o los que pagaban al contado, con sus respectivas cantidades y las fechas en que eran recibidas, Normalmente, el pago se efectuaba en met¨¢lico, y se hac¨ªa tanto en Francia como en Espa?a.

De la mencionada documentaci¨®n se desprende que existen personas y empresas francesas que tal vez est¨¢n tambi¨¦n relacionadas con las finanzas de la organizaci¨®n terrorista, hecho que est¨¢ siendo investigado por la polic¨ªa francesa en colaboraci¨®n con la espa?ola.

Sancrist¨®bal

Seg¨²n fuentes gubernamentales, el ex director de la Seguridad del Estado, Juli¨¢n Sancrist¨®bal, recientemente destituido, est¨¢ convencido de que una de las formas m¨¢s eficaces de reducir a ETA es desarticular su aparato financiero, y fue la persona que decidi¨® que fuera seguida una peque?a pista que finalmente dio con la f¨¢brica de muebles Sokoa, donde se encontraba la mayor parte del archivo de las finanzas de ETA. La citada documentaci¨®n demuestra, seg¨²n fuentes gubernamentales, que ETA pagaba dinero al grupo de exiliados vascos en el sur de Francia, a abogados de Herri Batasuna (HB), a publicaciones abertzales y a las juventudes de esa coalici¨®n, denominadas Jarral En la documentaci¨®n existen recibos pormenorizados de las cantidades pagadas por la orga nizaci¨®n terrorista a estos grupos Y personas.

Grandes bancos

Asimismo, en la documentaci¨®n figuran copias de las cartas enviadas a los presidentes de grandes bancos para exigirles el impuesto revolucionario, aunque se desconoce hasta el momento si llegaron a pagar a la organizaci¨®n terrorista.

Tambi¨¦n existen recibos relacionados con algunas entidades financieras del Pa¨ªs Vasco.

En cuanto a las relaciones internacionales de la organizaci¨®n, la documentaci¨®n intervenida en Sokoa demuestra que ETA ha mantenido relacione con el IRA en lo referente a la compraventa de armas.