La transmutaci¨®n de Gorbachov
DESPU?S DEL discurso de Mijail Gorbachov ante el Comit¨¦ Central del Partido Comunista de la Uni¨®n Sovi¨¦tica est¨¢ claro que perestroika es una palabra clave de su pol¨ªtica; palabra que, m¨¢s que reforma, significa transformaci¨®n. Despu¨¦s de una primera etapa, centrada en la renovaci¨®n econ¨®mica y en las mutaciones de muchos cuadros, Gorbachov ha emprendido la tarea mucho m¨¢s dif¨ªcil de introducir cambios en las, estructuras pol¨ªticas de la Uni¨®n Sovi¨¦tica.El aplazamiento del comit¨¦ central hasta m¨¢s de un mes despu¨¦s del tope fijado por los estatutos solamente se puede explicar por la lucha que Gorbachov ha tenido que librar contra un sector del bur¨® pol¨ªtico opuesto a las ideas expuestas en su informe y a los cambios de personas en la direcci¨®n que ser¨¢n dados a conocer en breve plazo.
Lo primero que destaca en el informe es una cr¨ªtica mucho m¨¢s abierta y dura contra el estancamiento, el conservadurismo y la corrupci¨®n que han caracterizado la larga etapa de Breznev. Con abundancia de citas de Lenin, Gorbachov enlaza su lucha contra los m¨¦todos nefastos de Breznev con un problema m¨¢s profundo: la superaci¨®n de las terribles deformaciones del socialismo cometidas por Stalin. La perestroika adquiere as¨ª mayor dimensi¨®n; se trata de realizar ahora lo que Jruschov no pudo hacer.
En cuanto a las propuestas concretas de Gorbachov, las m¨¢s notables son la elecci¨®n de los dirigentes del partido con voto secreto y con varias candidaturas., Medidas que en s¨ª no son nuevas y que caben dentro de los estatutos vigentes. Pero est¨¢n en total desuso, y si de verdad se llegaran a aplicar, tendr¨ªan consecuencias serias. Una ra¨ªz esencial del autoritarismo es que los ascensos de t¨¦cnicos se hacen por decisi¨®n de los superiores, refrendada luego con una elecci¨®n formal. Ello determina, en las decisiones y en las conductas, que todo dependa d¨¦ lo que llega de arriba, tanto en niveles locales como estatales. Para que empiecen a pesar las opiniones de los miembros de base, en elecciones secretas, hace falta m¨¢s que unas frases en un informe. Tendr¨¢n que cambiar unas pautas de comportamiento muy arraigadas, lo que exigir¨¢ una lucha dif¨ªcil y continuada. Gorbachov est¨¢ interesado en impulsar este proceso, que ¨¦l llama con excesivo optimismo "democratizaci¨®n", porque es indispensable para la modernizaci¨®n econ¨®mica, objetivo prioritario de toda su pol¨ªtica. Se trata, en cualquier caso, de una apertura: una batalla contra el inmovilismo del aparato del partido, defensor de los privilegios de sus miembros y freno para el ascenso de cuadros m¨¢s j¨®venes, m¨¢s capacitados y susceptibles de respaldar las novedades del nuevo l¨ªder.
Otra propuesta importante de Gorbachov se refiere a un nuevo sistema electoral, no ya en el partido, sino para los ¨®rganos estatales de la Uni¨®n Sovi¨¦tica. Aunque no est¨¢ claro el alcance de los cambios en este aspecto, cabe suponer que Mijail Gorbachov se ha dado cuenta de que es imposible seguir legitimando a las c¨¢maras legislativas mediante una caricatura de elecciones en las que una candidatura ¨²nica designada por el partido comunista obtiene m¨¢s del 99% de los votos.
El sistema de diversidad de candidaturas funciona en Hungr¨ªa, sin que ello haya elev¨¢do, por otra parte, la representatividad del Parlamento ni la credibilidad democr¨¢tica de la asamblea de este pa¨ªs. Pero es cierto que existe un mayor dinamismo y una mayor pluralidad de voces, dentro de un orden, en ese pa¨ªs que en otros del ¨¢rea. Gorbachov habla de dar mayor papel a los no comunistas; idea ambivalente, ya que puede in troducir cierta pluralidad real o quedar en pura cos m¨¦tica. Aunque el futuro de este cambio es incierto, es probable que a Mijail Gorbachov le interese promover a figuras de los sectores en los que hoy tiene mayor apoyo, es decir, la intelectualidad, tanto art¨ªstica como t¨¦cnica y cient¨ªfica.
Al anunciar la convocatoria de una conferencia nacional del partido en 1988 para examinar la marcha de la "democratizaci¨®n", el secretario general del PCUS recurre a un ¨®rgano que se halla en desuso desde 1941. Puede ayudarle a soslayar las rigidices de los congresos y facilitar que, incluso en la discusi¨®n de cuestiones del partido, est¨¦n presentes sectores abiertos a las ideas de renovaci¨®n y transparencia.
El nuevo l¨ªder sovi¨¦tico entra en la etapa m¨¢s delicada de su andadura; se sentir¨¢n afectados fuertes intereses y sectores que a¨²n disponen de un poder real. Ello intensificar¨¢ probables intentos de derrotarle o de erosionar y trivializar sus innovaciones. Esa amenaza le obliga, al tiempo, a potenciar los apoyos que tiene en esferas que no han sido la base tradicional del poder en la URSS. De lo que no cabe duda es de que nos hallamos ante un proceso que puede ser, por muchas razones, hist¨®rico.
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