Una s¨¢tira sobre un general jubilado conmociona Belgrado

Ciento catorce periodistas yugoslavos exigen que Zivorad Minovic, el director de Politika, el diario m¨¢s influyente de Belgrado, emplace ante el tribunal de honor profesional del peri¨®dico al autor de una s¨¢tira en la que se dice que el general jubilado Goiko Nikolis est¨¢ casado con una antigua esp¨ªa francesa que le robaba las valijas diplom¨¢ticas cuando el militar era embajador en la India. El autor firm¨® con seud¨®nimo y hasta la fecha nadie ha descubierto su identidad.Nikolis particip¨® en la guerra civil espa?ola como oficial de sanidad, poco despu¨¦s de haber concluido la carrera de medicina el a?o 1936. Al t¨¦rmino de la II Guerra Mundial dirigi¨® los servicios de Sanidad de Josip Broz Tito, con el rango de general. En su libro de memorias, Tronco, ra¨ªces y virutas, ganador de uno de los premios literarios m¨¢s prestigiosos del pa¨ªs, describe su paso del Ebro en barca y una cena con Josef Stalin.

Hace dos a?os devolvi¨® su viejo carn¨¦ de comunista y pas¨® a ser uno de los cr¨ªticos m¨¢s duros del postitismo. Nikolis est¨¢ casado en segundas nupcias con la arist¨®crata francesa Margueritte d'Anjou -hoy, Margot Nikolis-, con la que vive en su modesto piso de Belgrado.

El texto sat¨ªrico hace referencia a ella como Argo Nikolic. "Argo anda por las escaleras de su casa quej¨¢ndose de que, si el capitalismo se hunde en Suiza, se quedar¨¢n sin el muy sudado capital que all¨ª tienen". M¨¢s adelante se lee que, tras haberla conocido en un barco de lujo, "a Voiko le desaparecieron documentos secretos que alguien entreg¨® posteriormente al portero de la embajada yugoslava".

En realidad, Margot Nikolis cruz¨® Espa?a, tras la rendici¨®n de Francia a Hitler, y de all¨ª pas¨® a Londres para ponerse al servicio de la Francia libre de Charles de Gaulle.