Una exposici¨®n con 500 dibujos de los arquitectos suecos AspIund y Lewerentz abierta en Madrid
Una exposici¨®n sobre los arquitectos suecos Erik Gunnar Asplund (1895-1940) y Sigurd Lewerentz (1885-1975), con m¨¢s de 500 dibujos originales, fotograf¨ªas, muebles y maquetas, ocupa desde ayer la sala del MOPU, en la arquer¨ªa de los Nuevos Ministerios, de Madrid. La muestra ha sido cedida por el Museo de Arquitectura de Estocolmo, y es la primera vez que en Espa?a se presenta material original de estos arquitectos. Asplund y Lewerentz representan a lo largo del siglo una s¨ªntesis del lenguaje cl¨¢sico y la est¨¦tica moderna.
El Museo de Arquitectura de Estocolmo, fundado en 1962, con un fondo de 700.000 dibujos de arquitectura sueca de los ¨²ltimos 100 a?os, procedentes de donaciones, ha reunido en una exposici¨®n las dos figuras m¨¢s representativas de Suecia en este siglo, Asplund y Lewerentz. La muestra, tras su presentaci¨®n en Finlandia y Dinamarca, se va a presentar a continuaci¨®n en Italia, Francia, Reino Unido y, posiblemente, Estados Unidos.Karin Winter, de 44 a?os, conservadora del museo, destaca de los dos arquitectos su capacidad para combinar los estudios cl¨¢sicos con la tradici¨®n escandinava, "un aire especial de clasicismo y tradici¨®n", que se desarrolla en los estudios iniciales en la antiacad¨¦mica escuela Klara y en los viajes a Dinamarca, Italia, Austria y T¨²nez.
El movimiento internacional, a finales de los a?os veinte, ejerce una gran influencia, aunque siguen diferentes caminos, que se van a reflejar en sus obras, sobre todo en la Biblioteca Municipal de Estocolmo (1920) y la Exposici¨®n de Estocolmo de 1930, de Asplund, que en 1915 hab¨ªa proyectado con Lewerentz el cementerio Sur de Estocolmo.
"La actitud de Asplund frente al movimiento moderno", dice Karin Winter, "fue menos radical, m¨¢s humanizada, pensando en el usuario, con unas l¨ªneas m¨¢s org¨¢nicas, como las suaves superficies de la capilla del crematorio. En cambio, Lewerentz tiene una manera m¨¢s intelectual en la b¨²squeda del lenguaje de las formas. Despu¨¦s de la II Guerra Mundial, en plena industrializaci¨®n de los edificios, vuelve a sus propias ra¨ªces, incluso forma una casa de decoraci¨®n de interiores para producir sus dise?os. En la iglesia de San Marcos, cerca de Estocolmo, crea un espacio capaz de expresar el sentimiento religioso. Los dos eran devotos de la arquitectura pura".
Azul p¨¢lido y siena
Karin Winter est¨¢ de acuerdo con el aspecto de pueblo mediterr¨¢neo que el arquitecto Gabriel Ruiz Cabrero ha dise?ado para el montaje de la exposici¨®n, con detalles y colores dominantes en una primera etapa de los dos arquitectos suecos, que corresponde a sus viajes por Italia y el estudio del clasicismo. Seg¨²n Ruiz Cabrero, en el montaje, el color azul p¨¢lido corresponde al car¨¢cter m¨¢s rom¨¢ntico y dulce de Asplund frente al siena de un Lewerentz m¨¢s estricto y duro. La exposici¨®n es cronol¨®gica y en las calles, con detalles constructivos en ventanas y cornisas, se sigue la educaci¨®n inicial en el romanticismo n¨®rdico, el per¨ªodo neoclasicista y su participaci¨®n en la arquitectura moderna de los dos arquitectos.La exposici¨®n estar¨¢ abierta al p¨²blico hasta el 1 de abril. Ma?ana, jueves, a las ocho de la tarde, se celebrar¨¢ en la misma sala una mesa redonda, con la participaci¨®n de Karin Winter, Sim¨®n March¨¢n, Mar¨ªa Teresa Mu?oz, Jos¨¦ Manuel L¨®pez-Pel¨¢ez, Gabriel Ruiz Cabrero y Luis Moreno Mansilla.
Babelia
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