Terroristas libaneses recibieron fondos del 'Irangate'

Washington no s¨®lo vendi¨® armas al r¨¦gimen del ayatol¨¢ Jomeini, sino que financi¨® la revoluci¨®n ¨ªsl¨¢mica. Tres millones de d¨®lares (unos 390 millones de pesetas) procedentes de la venta de armas norteamericanas a Ir¨¢n fueron a parar a los extremistas proiran¨ªes que tienen secuestrados a rehenes estadounidenses en L¨ªbano, seg¨²n public¨® ayer The New Yark Times. Ronald Reagan, que se enfrentar¨¢ hoy a los periodistas en su primera conferencia de prensa en cuatro meses, deber¨¢ responder a esta nueva bomba del Irangate, que confirma que EE UU pag¨® rescate y carg¨® incluso con gastos de los secuestradores.

El Congreso y el fiscal especial llegaron ayer a un acuerdo de concesi¨®n de inmunidad limitada al ex consejero de Seguridad Nacional John Poindexter, para que pueda contar si actu¨® con ¨®rdenes del presidente, sin miedo a ser procesado por sus declaraciones.Poindexter no testificar¨¢ en sesiones p¨²blicas hasta mediados de junio, concediendo al juez Lawrence Walsh los 90 d¨ªas que hab¨ªa solicitado para preparar su acusaci¨®n contra los arquitectos del Irangate. Se estima que el testimonio de Poindexter, que despachaba todos los d¨ªas con el presidente y actuaba como tomador de notas en importantes reuniones, es m¨¢s importante a¨²n que el de Oliver North y permitir¨¢ descubrir hasta d¨®nde llegan las responsabilidades en la Casa Blanca.

Poindexter podr¨ªa testificar, a puerta cerrada, en mayo, pero sus declaraciones no ser¨¢n reveladas para no perjudicar la investigaci¨®n del fiscal especial. North, el Rambo que ejecut¨® la operaci¨®n clandestina, recibe tambi¨¦n una inmunidad similar y no testificar¨¢, ni siquiera en sesiones privadas, como Poffidexter, hasta el 15 de junio. Personajes m¨¢s secundarios, pero importantes para saber los manejos de la red privada de ayuda a la contra, cuando estaba prohibida po el Congreso, tambi¨¦n recibir¨¢n inmunidad. Las primeras audiencias p¨²blicas de los comit¨¦s especiales del Congreso, en sesiones conjuntas, comenzar¨¢n el 5 de mayo. La investigaci¨®n concluir¨¢ en el oto?o y habr¨¢ un informe final conjunto de las dos C¨¢maras.

Una cuenta en Suiza

El intermediario iran¨ª Manucher Gorbanifar deposit¨® entre dos millones y tres millones de d¨®lares (de 260 millones a 390 rnillones de pesetas) de las cantidades recibidas por las armas entregadas a Ir¨¢n en una cuenta del banco Cr¨¦dit Suisse, a nombre del Movimiento Global Isl¨¢mico, una organizaci¨®n que financia a los grupos extremistas que trabajan para extender la revoluci¨®n isl¨¢mica del ayatol¨¢ Jomeini. Uno de sus clientes es Hezbol¨¢ (Partido de Dios), el grupo shi¨ª en cuyas manos est¨¢n algunos de los norteamericanos secuestra dos en Beirut.

Gorbanifar ha descrito estos pagos como "rescate", y un funcionario norteamericano como "compensaci¨®n por los servicios prestados". Si esta informaci¨®n se demuestra que es cierta quedar¨¢ totalmente destruida la coartada de Reagan, que a¨²n insiste en que su intenci¨®n fue una apertura estrat¨¦gica a los moderados en Ir¨¢n. Los investigadores del esc¨¢ndalo deber¨¢n, descubrir si los funcionarios norteamericanos implicados en el ?rangate sab¨ªan que se estaban haciendo estos pagos. El informe de la comisi¨®n Tower, que responsabiliz¨® el pasado mes al presidente y a sus asesores del desastre de la operaci¨®n iran¨ª, dice que algunos funcionarios sospecharon que se estaba "comprando" a los iran¨ªes.

'Engrasar voluntades'

Gorbanifar ha dicho que la venta clandestina de armas al r¨¦gimen que califica a EE UU como "el gran Sat¨¢n" fue ayudada por la entrega de unos 10 millones de d¨®lares a varios dirigentes de Teher¨¢n, cantidad necesaria para engrasar sus voluntades.

De estas contribuciones pol¨ªticas, seis millones de d¨®lares fueron para el presidente del Parlamento iran¨ª, Hachemi Rafsanyani, y su familia. Posteriormente, Rafsanyani, considerado como "pragm¨¢tico moderado" por la Casa Blanca, descubri¨® la operaci¨®n y puso en rid¨ªculo a Estados Unidos, al mostrar al mundo una Biblia firmada por Reagan y entregada por los fontaneros de la Casa Blanca en se?al de buena voluntad.

Gorbanifar, que actu¨® corno intermediario a pesar del resultado negativo de una prueba del detector de mentiras a la que fue sometido por la CIA, escribi¨® el pasado a?o al presidente norteamericano para contarle que "sustanciales sumas de dinero" procedentes de la venta de armas hab¨ªan ido a parar al ayatol¨¢ Al¨ª Husein Moritazeri, uno de los aspirantes a la sucesi¨®n de Jomeini, considerado como el l¨ªder de la facci¨®n mas extremista y que controla al denominado Movimiento Global Isl¨¢mico.

Gorbanifar quiso cubrirse bien y reparti¨® dinero a todos los grupos enfrentados en Ir¨¢n, seg¨²n The New York Times, que cita siempre fuentes pr¨®ximas a este sorprendente hombre de negocios.

El informe de la comisi¨®n Tower explica que Gorbanifar no escondi¨® su juego, y advirti¨® a la Administraci¨®n de Ronald Reagan que la operaci¨®n iran¨ª requerir¨ªa pagos dudosos, con "rescate en met¨¢lico para los secuestradores".

En una carta al magnate saud¨ª Adnan Kashogrui, que tambi¨¦n particip¨® en el negocio emprendido con Ir¨¢n, Gorbanifar explic¨®: "Quiz¨¢ necesitemos realizar sobornos encubiertos o un regalo, a funcionarios, pol¨ªticos o cl¨¦rigos iran¨ªes".

El l¨ªder del Movimiento Global Isl¨¢mico, Medhl Hachemi, el hombre encargado por Montazeri de impulsar la revoluci¨®n isl¨¢mica, fue detenido el pasado octubre acusado de traici¨®n. El movimiento recib¨ªa una comisi¨®n del 3% al 5% en todas las adquisiciones de equipo militar que se hac¨ªan para los guardianes de la revoluci¨®n, seg¨²n fuentes iran¨ªes en Europa.