Los impuestos, tema clave de los comicios regionales de hoy en Jap¨®n
Los japoneses acuden hoy a las urnas para elegir a representantes de las administraciones regional y local, en la primera fase de un proceso que se completar¨¢ el d¨ªa 26. Aunque estos comicios cuatrienales suelen centrarse en asuntos de inter¨¦s local, en esta ocasi¨®n se han convertido en una ensayo de alcance nacional, sobre todo para el Partido Liberal Democr¨¢tico (PLD), del primer ministro, Yasuhiro, Nakasone. El motivo es el rechazo a las propuestas de incrementar los impuestos.
Para los candidatos del PLD, su propio l¨ªder, Nakasone, se ha convertido en una figura un tanto inc¨®moda. No suele asistir a los m¨ªtines electorales o, cuando lo hace, evita tomar la palabra. El Se?or Impuesto, como le llaman algunos por su plan de introducir un tasa del 5% sobre las ventas (una especie de IVA a la japonesa), ve reducida su popularidad a los niveles m¨¢s bajos de todos sus mandatos."Nakasone minti¨® a los electores en las legislativas del pasado mes de julio, al prometer que no subir¨ªa los impuestos", afirman en la sede del opositor Partido Socialista Japon¨¦s (PSJ), segunda formaci¨®n pol¨ªtica del pa¨ªs. Los socialistas esperan que los resultados de es tos comicios constituyan una prueba de la p¨¦rdida de influencia del potente PLD, con m¨¢s de 35 a?os de presencia ininterrumpida en el poder, tras ganar una tras otra las sucesivas elecciones legislativas.
El primer ministro defiende su nuevo plan impositivo sobre las ventas y lo acompa?a de promesas de reducciones de impuestos directos y en las empresas. Pero nadie parece con vencido de la bondad de su estrategia y miles de personas se han manifestado en contra durante los ¨²ltimos fines de se mana.
"La nueva necesidad de impuestos est¨¢ ligada al incremento en el gasto de defensa", dijo a EL PA?S Takako Doi, secretaria general del PSJ. Doi argument¨® que las actuales elecciones locales incrementar¨¢n la influencia de los socialistas en la gesti¨®n regional y local de Jap¨®n.
El Partido Comunista de Jap¨®n (PCJ), tambi¨¦n contrario a la creaci¨®n del nuevo impuesto, ha presentado ante la opini¨®n p¨²blica documentos de la Administraci¨®n norteamericana fechados en 1966, y que han sido desclasificados en los archivos nacionales en Washington. Seg¨²n estos documentos, Jap¨®n -y en consecuencia el PLD- firm¨® en 1960 un acuerdo secreto con Estados Unidos para aceptar la presencia de armas nucleares estadounidenses en su territorio. La noticia fue desmentida por Nakasone, pero el efecto no se ha borrado del todo.
A los problemas de pol¨ªtica interna, el Gobierno de Nakasone debe a?adir los creados en la escena internacional por la guerra comercial con Estados Unidos y los pa¨ªses de la Comunidad Europea. El conflicto se debe a la fuerte competencia de Jap¨®n en los mercados exteriores, con un enorme super¨¢vit en la balanza comercial que incide en el desequilibrio de las relaciones internacionales.
La Administraci¨®n Reagan utiliza la arriesgada arma del d¨®lar, que experimenta una depreciaci¨®n constante, para encarecer los productos japoneses vendidos en EE UU y hacer que Tokio abra sus mercados a los productos norteamericanos.
Nakasone ha enviado varias delegaciones econ¨®micas a Washington para apaciguar la tensi¨®n, al tiempo que promete un nuevo programa de reactivaci¨®n de la econom¨ªa interna, en particular en materia de obras p¨²blicas y vivienda.
Un ejemplo ser¨ªa la creaci¨®n .de una ciudad flotante en Tokio, ante la escasez de terrenos. La capital japonesa es una aglomeraci¨®n de casi 30 millones de habitantes, donde el precio astron¨®mico del suelo hace que un piso de 70 metros cuadrados -que es grande para el nivel japon¨¦s- cueste alrededor de 100 millones de pesetas.
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