La protesta, pac¨ªfica de la mayor¨ªa negra acompa?¨® ayer a las urnas a los blancos surafricanos
La minor¨ªa blanca de Sur¨¢frica, que representa un 17% de sus 30 millones de habitantes, particip¨® ayer en unas elecciones generales consideradas a nivel nacional e internacional como cruciales para el futuro, del pa¨ªs, mientras infles de trabajadores y estudiantes negros permanec¨ªan por segundo d¨ªa en sus casas para protestar por la ausencia de derechos para la mayor¨ªa negra. Esta madrugada, las agencias informativas se?alaban que el partido gubernamental reforzaba sus posiciones, en detrimento de las de la oposici¨®n liberal. Por otra parte, el Gobierno de Pretoria envi¨® ayer una dura protesta a Zimbabue, reserv¨¢ndose el derecho de emprender "cualquier acci¨®n necesaria para la defensa de sus ciudadano, despu¨¦s de que un soldado blanco resultara gravemente herido al desenterrar una mina.
El hecho ocurri¨® a pocos kil¨®metros de la frontera entre los dos pa¨ªses. Un trabajador negro result¨® muerto y otros 11 heridos el martes al chocar el cami¨®n en que viajaban con otra mina. En ambos casos, seg¨²n un comunicado oficial surafricano, las huellas de los que plantaron las minas procedian de Zimbabue.En las elecciones de ayer, s¨®lo para blancos, convocadas el pasado 30 de enero por el presidente Pieter W. Botha en busca de "un nuevo mandato para proseguir la reforma", 482 candidatos de cinco partidos pol¨ªticos se disputaron los 166 esca?os en litigio para la C¨¢mara blanca del Parlamento tricameral.La distribuci¨®n de esca?os en la anterior C¨¢mara era: Partido Nacional, del Gobierno, 109 diputados; Partido Federal Progresista (PFP, oposici¨®n liberal blanca), 26; Partido Conservador (extrema derecha), 16; Partido Nueva Rep¨²blica (en alianza con el PFP), cinco; Independientes, dos; Herstigte Nasionale Partei (extrema derecha), uno; esca?os sin cubrir, siete.Una de las inc¨®gnitas de esta elecci¨®n es la actitud del electorado joven, que toma parte por primera vez en unos comicios y cuyo n¨²mero es de 750.000, de un total de 3.100.000 personas con derecho a voto. La veterana luchadora liberal Hellen Stizmam (del PFP) expres¨® hace unos d¨ªas sus temores de que los j¨®venes se negaran a participar como forma de expresar su desacuerdo con las elecciones.Candidaturas independientes
Aunque nadie duda de la victoria del partido del Gobierno, en el poder desde 1948, el inter¨¦s de estas elecciones radica en la presentaci¨®n por primera vez de tres candidaturas independientes encabezadas por anteriores partidarios del Gobierno, entre los que se encuentra el ex embajador surafricano en Londres Denis Worrall. Seg¨²n todos los observadores, uno de los tres candidatos independientes, el ex diputado del Gobierno por Randburg, en Johanesburgo, Wynand Malan, tendr¨¢ pr¨¢cticamente asegurada su elecci¨®n. Worrall confiaba en arrebatar el esca?o a su contrincante, el peso pesado y ministro de Planificaci¨®n y Desarrollo Constitucional, Chris Heunis, mientras que la doctora Esther Lategan lo tendr¨¢ dif¨ªcil en la circunscripci¨®n de Stellenbosch, sede de la m¨¢s famosa universidad afrikaner del pa¨ªs, a pesar del apoyo de 365 profesores y acad¨¦micos de esa universidad.
Los analistas consideran que si alguno de los independientes triunfa y la oposici¨®n liberal blanca aumenta el n¨²mero de votos -elemento muy a tener en cuenta, ya que el sistema electoral vigente en Sur¨¢frica es una copia del brit¨¢nico, en el que s¨®lo sale elegido en cada circunscripci¨®n el diputado m¨¢s votado-, ser¨¢ posible formar una alianza que desbancara al Partido Nacional del poder en las elecciones de 1989.
Las elecciones, calificadas por los grupos nacionalistas negros de "farsa electoral blanca",- se celebran con un estado de emergencia vigente desde julio del pasado a?o. Al mismo tiempo, y para expresar su rechazo de las elecciones, el Frente Democr¨¢tico Unido (UDF), la m¨¢s amplia organizaci¨®n antiapartheid del pa¨ªs, y la Confederaci¨®n de Sindicatos Surafricanos (Cosatu), convocaron a la poblaci¨®n negra a permanecer en sus casas durante dos d¨ªas. La convocatoria fue atendida, seg¨²n un grupo de seguimiento financiado por las universidades, por aproximadamente un mill¨®n de personas.
[El Gobierno surafricano expuls¨® ayer a dos periodistas de la televisi¨®n australiana por considerar que sus informaciones buscaron "distorsionar" la realidad del pa¨ªs, informa Efe].
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