Los nuevos t¨ªtulos universitarios podr¨¢n ser realidad a finales de 1988

Las universidades podr¨¢n adaptar sus planes de estudios a las nuevas directrices m¨ªnimas establecidas por la reforma y crear t¨ªtulos nuevos a partir de la primavera de 1988, seg¨²n afirm¨® ayer a este diario Emilio Lamo de Espinosa, secretario general del Consejo de Universidades (CU). Lamo, que participaba en Barcelona en unas jornadas de pol¨ªtica universitaria de los socialistas catalanes, cree que la discusi¨®n el pr¨®ximo curso de las directrices m¨ªnimas de los nuevos planes no tiene por qu¨¦ ser conflictiva, y asegur¨® que el CU "est¨¢ abierto a recibir propuestas alternativas de todos aquellos que se sientan capaces de elaborarlas: profesores, estudiantes y entidades de todo tipo".

Lamo de Espinosa cree que todos los grupos de expertos entregar¨¢n, antes de finales de junio, sus informes t¨¦cnicos sobre m¨ªnimos a cumplir por los t¨ªtulos que tengan homologaci¨®n estatal. "Cinco grupos ya han finalizado su trabajo", explic¨®, "otros cinco est¨¢n a punto de hacerlo y s¨®lo ser¨¢ imposible cumplir esos plazos con dos grupos: el que estudia la educaci¨®n f¨ªsica, cuyo informe ha sido remitido al Ministerio de Cultura, de quien depende el Instituto Nacional de Educaci¨®n F¨ªsica (INEF); y el grupo encargado del estudio de Ciencias de la Educaci¨®n y escuelas de profesores de Ense?anza General B¨¢sica (EGB), que deber¨¢ esperar a que se dise?e de manera definitiva la reforma del sistema educativo".El secretario general del Consejo de Universidades cree que la discusi¨®n p¨²blica de las propuestas de los grupos de expertos tendr¨¢ lugar como m¨¢ximo hasta febrero pr¨®ximo, por lo que es probable que el CU apruebe en pleno los primeros t¨ªtulos universitarios de la reforma en la primavera de 1988.

A partir de entonces las universidades dispondr¨¢n de tres a?os para adaptar sus estudios a los nuevos t¨ªtulos y a las directrices m¨ªnimas, que se establecer¨¢n respectivamente por decreto y ¨®rdenes ministeriales. "Queremos que sea un proceso sin prisas, donde todos los universitarios y cualquier entidad interesada pueda expresar sus ideas. Nadie ha de temer golpes de mano, ni resoluciones con trampa. El consejo garantiza el m¨¢ximo de informaci¨®n y transparencia a lo largo del proceso", a?adi¨® Lamo de Espinosa.

El secretario general del CU no se mostr¨® partidario de la presencia de estudiantes en la ponencia del Consejo que dictaminar¨¢ la reforma de planes de estudio. "Su papel m¨¢s activo", afirm¨®, "deber¨¢ darse en la concreci¨®n de los planes de estudio de cada universidad a las directrices m¨ªnimas establecidas".

En opini¨®n del m¨¢ximo responsable del CU, la protesta estudiantil sobre la reforma "ha sido resultado de un amplio inter¨¦s y de muy poca informaci¨®n, lo que condujo a rumores falsos, a pesar de que todos los centros universitarios espa?oles recibieron tres veces desde diciembre de 1985 explicaci¨®n pormenorizada del proceso". Lamo de Espinosa reconoce que, no obstante, los estudiantes no recibieron informaci¨®n alguna a lo largo del curso hasta que hace pocos d¨ªas el CU reparti¨® masivamente un folleto sobre el tema.

Cr¨ªticas conservadoras

Lamo de Espinosa conf¨ªa en que las medidas tomadas por el Consejo de Universidades permitan que el curso pr¨®ximo se discuta sin demasiada conflictividad, aunque es l¨®gico que existan tensiones, tanto en el interior de los grupos de expertos, que en general han hecho un trabajo muy bueno, como en el conjunto de la universidad y la sociedad". A rengl¨®n seguido calific¨® de injustificadas las cr¨ªticas hechas por profesores conservadores a la designaci¨®n "a dedo" de los grupos de expertos: "Ten¨ªamos que partir de alg¨²n documento base, que no puede ser elaborado por una empresa consultora". "Adem¨¢s", a?adi¨®, "los grupos se formaron con un criterio amplio de representaci¨®n. Todas las propuestas alternativas que se hagan ser¨¢n bienvenidas y tenidas en cuenta por el Consejo de Universidades".