Ceaucescu y Gorbachov, insatisfechos con sus relaciones

El m¨¢ximo dirigente sovi¨¦tico, Mijail Gorbachov, y el presidente rumano, Nicolae Ceaucescu, expresaron anoche su insatisfacci¨®n (en tono directo, el primero, y con matices defensivos, el segundo) por el estado actual de las relaciones sovi¨¦tico-rumanas, que recib¨ªan ayer un impulso con la primera visita a Bucarest de un m¨¢ximo dignatario de la URSS en 11 a?os. Gorbachov fue acogido ayer en Bucarest con una pomposa y organizada bienvenida, claramente marcada por su anfitri¨®n.

Nicolae Ceaucescu, en una cena de gala dada en honor de Gorbachov, expres¨® tan s¨®lo su "inter¨¦s" por la pol¨ªtica de reestructuraci¨®n sovi¨¦tica, que no apoy¨® expl¨ªcitamente en su mecanismo concreto, aunque deseara "¨¦xitos" a la Uni¨®n Sovi¨¦tica, "como vecinos y amigos".Ceaucescu, que mantiene una f¨¦rrea pol¨ªtica de control centralizado del pa¨ªs, se pronunci¨® por el reforzamiento del papel del partido y opin¨® que "no podemos hablar de democracia socialista a menos que reforcemos la direcci¨®n del partido".

"Ceaucescu, Gorbachov", repet¨ªan r¨ªtmicamente, por este orden, grupos de rumanos que portaban profusi¨®n de retratos de ambos l¨ªderes -el rumano, considerablemente retocado y rejuvenecido, y el sovi¨¦tico, con la mancha de nacimiento que tiene en la frente-, mientras el avi¨®n de Aeroflot, un Iliushin 62 M, se posaba en el aeropuerto de Octopeni. De ¨¦l descendieron Mijail Gorbachov y su esposa, Raisa, ambos vestidos a juego en los mismos tonos beige. Al pie de la escalerilla les esperaban Nicolae Ceaucescu y su esposa, Elena, primer vicepresidente del Consejo de Ministros, ambos de azul, con traje oscuro ¨¦l y traje claro ella.

Beso en la mejilla

El dirigente rumano y el sovi¨¦tico se besaron en las mejillas, en tanto que sus respectivas esposas se daban la mano. Decenas de miles de personas corearon con v¨ªtores su paso en coche descubierto por las calles de la ciudad, plagada de polic¨ªa. Gorbachov y su esposa llegaron incluso a bailar la jora (danza popular rumana con reminiscencias de la sardana), en tanto que el n¨²mero de banderas, lemas relativos a las relaciones rumano-sovi¨¦ticas y abundantes retratos de ambos l¨ªderes trataba de mantener una paridad formal.La entrevista vespertina entre Gorbachov y Ceaucescu discurri¨®, seg¨²n la agencia rumana Agerpress, en una atm¨®sfera de "c¨¢lida amistad, comprensi¨®n y aprecio mutuo". En la cena, Gorbachov dijo haber explicado a Ceaucescu los cambios que tienen lugar en la Uni¨®n Sovi¨¦tica y se?al¨® que las relaciones sovi¨¦tico-rumanas hab¨ªan sido el tema central del encuentro.

Gorbachov subray¨® la necesidad de "poner el mecanismo de cooperaci¨®n a tono con las exigencias de los tiempos" y confes¨® que parte de este mecanismo se ha desarrollado de forma "d¨¦bil" y "regular". La Uni¨®n Sovi¨¦tica aspira a cambios cualitativos de la relaci¨®n y a un mayor contacto entre las organizaciones del partido, los colectivos laborales y en el campo ideol¨®gico, seg¨²n el mensaje de Gorbachov en Bucarest.

Ceaucescu se mostr¨® dispuesto a incrementar su vinculaci¨®n econ¨®mica, tanto con la Uni¨®n Sovi¨¦tica como con el Comecon (mercado com¨²n socialista), un paso que, seg¨²n observadores occidentales, est¨¢ forzado por los problemas de abastecimiento de energ¨ªa y bienes de consumo, as¨ª como una deuda exterior pagada a base de restricciones. Reconoci¨® el presidente que se hab¨ªa producido un "cierto retraso" en los "intercambios econ¨®micos" con la Uni¨®n Sovi¨¦tica y que se necesita "acci¨®n" en los pr¨®ximos a?os para "remediar la situaci¨®n".

Dijo tambi¨¦n haberse decidido a dar "pasos" para "impulsar" la realizaci¨®n del plan econ¨®mico de cooperaci¨®n. a largo plazo entre la Uni¨®n Sovi¨¦tica y Ruman¨ªa hasta el a?o 2000. Nicolae Ceaucescu admiti¨®, adem¨¢s, que los programas de cooperaci¨®n del Comecon se pueden "desarrollar" m¨¢s y asegur¨® que Ruman¨ªa "har¨¢ todo lo que pueda para usar mejor todas las posibilidades".

Afinidad de posiciones

En materia de armamento, ambas partes subrayaron la afinidad de posiciones. Mijail Gorbachov asegur¨® no haber perdido la esperanza de que los pa¨ªses de la Alianza Atl¨¢ntica se avengan a llegar a un acuerdo sobre los cohetes de alcance medio (INF), lo cual, seg¨²n dijo, propiciar¨ªa una "reacci¨®n en cadena" extensiva a otras armas. Ceaucescu apoy¨® claramente las propuestas sovi¨¦ticas sobre los misiles de alcance medio y los misiles de alcance inferior y exhort¨® a Estados Unidos y a la Alianza Atl¨¢ntica a dar una "respuesta constructiva", "abandonar las reservas" y "encontrar una v¨ªa para liquidar las armas nucleares del continente".Siguiendo la costumbre de otros viajes, Gorbachov rompi¨® el protocolo para hablar con la poblaci¨®n, un momento no recogido por los medios de comunicaci¨®n rumanos, pero s¨ª por la televisi¨®n sovi¨¦tica.

"Incluso si me dicen que todo est¨¢ bien en su pa¨ªs y en la familia, no les creer¨¦. Hay problemas", dijo Gorbachov, seg¨²n un telespectador, en Mosc¨².

Ceaucescu ha exaltado recientemente las excelencias del plan y la direcci¨®n centralizada unitaria, pero en el r¨ªgido marco de la econom¨ªa rumana parecen alzarse t¨ªmidas e incipientes voces -no detectadas en el pasado por los observadores occidentales- criticando las directrices arbitrarias.