Cinco posmodernos para las arquitecturas fin de siglo
Stern, Botta, Siza, Hollein y Czech debaten sus trabajos y teor¨ªas en San Sebasti¨¢n
Cinco figuras de la arquitectura internacional, Mario Botta, ?lvaro Siza, Herman Czech, Robert A. M. Stern. y Hans Hollein, han expuesto la semana pasada ante centenares de profesionales vascos las alternativas que cada uno de ellos representa en la denominada arquitectura posmoderna, en las jornadas Arquitecturas fin de siglo. En San Sebasti¨¢n, estos cinco arquitectos consagrados en el campo internacional han presentado tambi¨¦n sus ¨²ltimos proyectos, algunos de ellos desconocidos hasta ahora, y destapado su particular y evocador universo arquitect¨®nico.
"Un edificio tiene que ser un retrato psicol¨®gico del lugar", "los edificios deber¨ªan tener la altura de un ¨¢rbol maduro", "las torres y los ascensores son antisociales", "San Sebasti¨¢n es una arrogancia cultural del siglo XIX que ha arrinconado la villa de pescadores", "hay que crear una nueva s¨ªntesis entre lo actual y lo pasado", son algunos de los enunciados m¨¢s sugerentes defendidos por Robert Stern, el viernes, d¨ªa de la clausura de las jornadas Arquitecturas fin de siglo, organizadas por el Colegio Oficial de Arquitectos Vasco-Navarro.?lvaro Siza, el hombre de la arquitectura posible, ha sido quiz¨¢ el que m¨¢s ha conectado con los profesionales asistentes, y no ha faltado quien, desde posiciones nada ecl¨¦cticas, ha observado ir¨®nicamente que la mayor¨ªa de las grandes figuras parecen sentirse obligadas a servir permanentemente al modelo de estilo y de concepci¨®n que han acu?ado en las revistas especializadas, y, naturalmente, en el mercado. Siza ha dicho que la "arquitectura de pobres" le proporciona tanta satisfacci¨®n como la arqUitectura lujosa.
Herman Czech ha defendido que su oficio es arte -"el plano guardado en el caj¨®n de mi estudio seguir¨¢ siendo arte aunque el proyecto no se haga realidad"-e insistido en su rechazo del concepto de belleza aplicado a la arquitectura.
La belleza, sospechosa
"La belleza es sospechosa. Todo lo bello despierta sospecha. La arquitectura tiene que ver con la belleza, pero hoy nos despiertan admiraci¨®n y sentimientos de belleza cosas que quiz¨¢ hace 50 a?os no suscitaban esos sentimientos. La raz¨®n y el pensamiento puro deben primar en arquitectura. No es cierto que cada forma sea un. invento precioso, una hermosa creaci¨®n".Uno de los polemistas m¨¢s destacados, y probablemente el m¨¢s provocador del movimiento posmoderno, Robert Stern, ha apuntado la necesidad de eliminar las construcciones de los a?os sesenta y reafirmado, desde la concepci¨®n norteamericana de la historia y la tradici¨®n, la importancia de fundamentarse en los or¨ªgenes. "Para saber c¨®mo ser¨¢ la ciudad del a?o 20OV, ha dicho, "tenemos que decidir qu¨¦ hacer con esos extrarradios, esas torres an¨®nimas, esas plazas asquerosas inundadas de coches y con la ropa colgando en los balcones". "Yo no creo", ha dichoStern, "que la arquitectura progrese. Si as¨ª fuera no nos interesar¨ªa la Alhambra ni el Parten¨®n".
Mario Botta ha planteado la necesidad de recuperar la dignidad de la vivienda -"como objeto final que determina el contexto hombre-medio ambier¨ªte"- y de la ciudad -"que resume el problema entre el hombre y su historia"- A su juicio, la casa ha perdido significado, aunque haya ganado en comodidades, y se ha convertido en un lugar de paso, en un aparcamiento. El arquitecto suizo ha criticado ¨¢speramente el h¨¢bito actual de salvar la fachada de los edificios y despreocuparse de los interiores. "Eso", ha indicado, "es una actitud hip¨®crita, de pura escenograf¨ªa".
Hans Hollein reiter¨® su pasi¨®n por los espacios vac¨ªos, los museos sin obras de arte, "el antiespacio". Hollein mostr¨® sus obras m¨¢s monumentales, los museos de Moenchenglandbach, Francfort y Tur¨ªn, y dijo que en su b¨²squeda de la definici¨®n de la arquitectura,quiere llegar a la arquitectura absoluta, concepto pr¨®ximo al de escultura.
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