Judith Miller opina que "Ia difusi¨®n del psicoan¨¢lisis precisa de una instituci¨®n reticular"

La hija de Jacques Lacan, Judith Miller, estuvo ayer en Barcelona para impartir en el Instituto Franc¨¦s una conferencia sobre el tema El psicoan¨¢lisis tiene su ¨¦tica que la ?tica ignora. Con ella se cierra el curso lectivo del Seminario del Campo freudiano en Barcelona. Judith Miller present¨® asimismo en la capital catalana la revista de orientaci¨®n freudiana L' Ane que ella misma dirige. "El psicoan¨¢lisis precisa de instituci¨®n reticular para su difusi¨®n", dijo la estudiosa en un momento de la conversaci¨®n mantenida con este diario.

Judith Miller, hija del pensador franc¨¦s y de Sylvia Bataille, no procede del campo del psicoan¨¢lisis y efectivamente, al principio de su conferencia, tuvo especial inter¨¦s en se?alar que no hab¨ªa participado nunca en un proceso anal¨ªtico, ni en calidad de analizante ni tanto menos en el de analista. Su ¨¢rea de trabajo espec¨ªfica es la filosofia, disciplina que ense?a en la Universidad de Par¨ªs VIIEl psicoan¨¢lisis en Francia tiene estatuto universitario. De hecho el marido de Judith, Jacques-Alain Miller, es jefe del departamento dedicado a esta mater¨ªa en Par¨ªs VIII. En Espa?a este reconocimiento no se ha producido a¨²n. "Este fen¨®meno tiene de hecho una explicaci¨®n muy simple ante la que se encuentra cotidianamente la Fundaci¨®n del Campo freudiano: cada pa¨ªs tiene su historia y su cuiltura particulares. En Francia hemos podido beneficiamos directamente de las ense?anzas de Lacan, el ¨²nico que despu¨¦s de la guerra dictaba clases con el fin de dar a conocer cuanto Freud hab¨ªa escrito. El futuro del psicoan¨¢lisis depende, sin embargo, no s¨®lo de lo que pueda producirse: en Francia, sino de todas las lecturas que de Lacan puedan darse en todo el planeta".

Formaci¨®n permanente

Judith Miller explica que la Fundaci¨®n del Campo freudiano, creada por Jacques Lacan en 1979 y que ella preside en la actualidad, no tiene como objetivo el reconocimiento acad¨¦mico del ¨¢rea: "Se cre¨® en el espacio que se abr¨ªa en Francia entre la instituici¨®n anal¨ªtica y la funci¨®n que pod¨ªa tener el psicoan¨¢lisis para aquellos que de hecho no son ni analistas ni universitarios. Forrna aparte de lo que en nuestro pa¨ªs se llama formaci¨®n permanente, a la que acuden fundarnentalmente, aunque no s¨®lo, analistas cl¨ªnicos, es decir los que tratan con enfermos mentales para discutir los problemas de su trabajo"."De hecho la constituci¨®n de la Fundaci¨®n del Campo freudiano es previa a la disoluci¨®n por parte de mi padre de la Escuela freudiana de Par¨ªs", contin¨²a Nliller, "pero en cierta forma surge como una necesidad del hecho de que mucha gente que corr¨ªa ya por el mundo se hab¨ªa apropiado y beneficiado del pensamiento de n¨² padre sin hacerlo circular. De ah¨ª la necesidad de disolver la Escuela y crear una instituci¨®n que permitiera el acceso de nuevos estudiosos que no hab¨ªan seguido personalmente los seminarios originales".

"De todas formas", a?ade Judith Miller, "la difusi¨®n del pensamiento lacaniano hoy en d¨ªa se produce sin la necesidad de la fundaci¨®n y lo demuestra el hecho de que este pensamiento, y en general el inter¨¦s por el psicoan¨¢lisis, se encuentra desarrollado en diferentes pa¨ªses incluso antes de su constituci¨®n. De lo que se trataba era de crear ¨²nicamente un espacio de intercambio de diferentes puntos de vistas determinados por realidades hist¨®ricas diferentes. No existe un psicoan¨¢lisis posible si no se adapta a circunstancias concretas".

Otra actividad de Judith Miller, ahora presentada en Barcelona, es la direcci¨®n de la revista L'Ane, publicaci¨®n que, seg¨²n ella misma aclara, no es el ¨®rgano de ninguna instituci¨®n. Sobre el curioso nombre de la cabecera,

L'Ane (el burro), Miller aclara que procede de una broma de Lacan en el momento de la diso luci¨®n de la Escuela freudiana de Par¨ªs, cuando hizo un juego de palabras con el t¨¦rmino analiste, es decir L'¨¢ne-¨¢-l?ste, el burro a la carta: "No siendo yo psicoanalis ta, decidimos finalmente quedar nos con el burro y olvidarnos de la lista", bromea Miller. La publicaci¨®n, de periodicidad bimen sual o trimestral, tiene una tirad de 14.000 ejemplares.