El Supremo debe decidir sobre la inscripci¨®n como mujer de un transexual nacido var¨®n
El pleno de la Sala Primera del Tribunal Supremo estudi¨® ayer la inscripci¨®n como mujer en el Registro Civil de Antonio Castillo Gonz¨¢lez, de 32 a?os, que en enero de 1985 se someti¨® en Londres a una operaci¨®n de cambio de sexo. La decisi¨®n del Supremo se conocer¨¢ el pr¨®ximo jueves, d¨ªa 2, aunque la deliberaci¨®n y el fallo tendr¨¢n lugar hoy.
En medios jur¨ªdicos se da por segura una sentencia favorable a la inscripci¨®n del transexual como mujer, ya que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo ha fallado ya en dos ocasiones que el cambio de sexo forma parte del derecho a la personalidad. La decisi¨®n, sin embargo, puede tener alguna matizaci¨®n en el sentido de que el transexual no es totalmente mujer.La resoluci¨®n del Supremo es de gran importancia porque sienta un precedente sobre el tema, ya que en breve la misma sala del alto tribunal deber¨¢ resolver al menos otros dos asuntos en los que se plantean casos similares. El presidente de la sala decidi¨® convocar al pleno para que la resoluci¨®n sea adoptada por todos los magistrados debido a su trascendencia y para unificar los criterios.
Antonio Castillo, a ra¨ªz de su cambio de sexo, en el que se le practic¨® una vagina artificial de 17 cent¨ªmetros con sus correspondientes labios, solicit¨® el cambio de inscripci¨®n en el registro, a lo que accedi¨® un juzgado de Las Palmas. El fiscal recurri¨® la decisi¨®n y la Audiencia Territorial de Las Palmas revoc¨® la sentencia inicial. El transexual recurri¨® a su vez al Supremo, que est¨¢ pendiente de deliberaci¨®n.
Este no es el primer caso que se resuelve en Espa?a sobre cambio de sexo, ya que anteriormente dos hombres, uno de M¨¢laga y otro de Valladolid, fueron reconocidos legalmente como mujeres en instancias inferiores. En ninguna de las dos ocasiones el fiscal present¨® recurso contra la decisi¨®n judicial, por lo que, en cualquier caso, la decisi¨®n del Tribunal Supremo no les afecta y son ya mujeres de pleno derecho, con la posibilidad de contraer matrimonio con hombres o de intentar la adopci¨®n de un ni?o.
En el recurso de Antonio Castillo, defendido por la abogada Soledad Quesada, se argumentaba que la Audiencia de Las Palmas no hab¨ªa tenido en cuenta un dictamen forense en el que se destacaba la realidad de Castillo como mujer. Adem¨¢s se se?alaba que la normativa del Registro Civil no conlleva la inmutabilidad de la inscripci¨®n, y, por tanto, los datos registrados pueden modificarse. Por ¨²ltimo, la letrada esgrim¨ªa que la sentencia de Las Palmas vulneraba los art¨ªculos 10 y 14 de la Constituci¨®n, prohibiendo el derecho al libre desarrollo de la personalidad.
El fiscal, Francisco Hern¨¢ndez Gil, destac¨® que el caso era de una gran trascendencia y que no se opone a que se solucione el problema, y por ello el fiscal general del Estado ha elevado una moci¨®n al Gobierno para que asuma el problema y env¨ªe a las Cortes un proyecto de ley en el que se regulen los aspectos relativos al cambio de sexo.
El fiscal, que se opuso a la inscripci¨®n de Castillo como mujer, precis¨® que se trata de una laguna en el ordenamiento jur¨ªdico espa?ol, pero que no debe rellenarse con jurisprudencia o con una interpretaci¨®n por analog¨ªa.
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