Los sondeos dan como favoritos en Australia a los laboristas del primer ministro Robert Hawkle

Las elecciones generales que se celebran hoy en Australia muestran a los partidos mayoritarios con sus papeles habituales cambiados. El Partido Laborista, del primer ministro Robert Hawke, que es favorito en los sondeos, aspira a la reelecci¨®n ofreciendo propuestas pol¨ªticas y econ¨®micas moderadas, mientras la oposici¨®n conservadora se presenta a s¨ª misma como una alternativa radical. Mientras Hawke promete continuidad para sacar a Australia del pantano, la oposici¨®n anuncia fuertes recortes de los impuestos y del gasto p¨²blico.Los sondeos de opini¨®n m¨¢s fiables muestran que la mayor¨ªa de los 10,5 millones de votantes australianos es partidaria de mantener el actual estado de cosas, y otorgan a los laboristas alrededor de cuatro puntos de ventaja sobre la oposici¨®n conjunta del Partido Liberal y el Partido Nacional.

Confianza de los empresarios

Los empresarios han manifestado su confianza en el laborista Hawke, cambiando su tradicional apoyo a las fuerzas conservadoras. Los medios financieros, seg¨²n los observadores, est¨¢n inquietos despu¨¦s de la advertencia formulada por el encargado del Tesoro, Paul Keating, de queel d¨®lar australiano puede caer si gana la oposici¨®n.El l¨ªder de la oposici¨®n, John Howard, rechaz¨® la validez de los citados sondeos, que otorgan a los laboristas un aumento de 15 esca?os en una C¨¢mara de Representantes, integrada por 148 diputados, de los cuales 82 son laboristas, 45 liberales y 21 nacionales. Fuentes del Partido Liberal manifestaron que esperaban lograr a ¨²ltimo momento un aumento de 10 esca?os en la C¨¢mara, lo que les dar¨ªa el control de la misma. Se presentan 613 candidatos a diputados, incluyendo independientes y representantes de partidos menores.Un total de 255 candidatos intentar¨¢n ocupar, por su parte, los 76 esca?os del Senado, en el que los laboristas tienen 32 diputados, los liberales 28, los nacionales cinco, los dem¨®cratas seis, los independientes tres, y uno el Partido Uni¨®n Australiana. E11 esca?o restante est¨¢ vacante.

Tomando como base los datos de las ¨²ltimas elecciones de 1984, los conservadores necesitar¨ªan un trasvase del 2,3% de los votos para acceder al Gobierno. El Partido Liberal y el Nacional, que han roto hace dos meses la coalici¨®n que mantuvieron durante 40 a?os, no tienen la cohesi¨®n necesaria como para formar un frente s¨®lido ante los laboristas, seg¨²n los observadores.