Bravo toreador

Medios informativos holandeses informaron con im¨¢genes sobre un hombre que atac¨® a un toreador por no matar un toro. Por lo visto, algunas personas fan¨¢ticas consideran como un crimen cuando un toreador muestra compasi¨®n de un toro para salvarle la vida. Aparte del hecho de que la mayor¨ªa de la gente civilizada condena las corridas de toros, la actitud del hombre que aparece en las im¨¢genes es prueba de poca mentalidad y dureza de coraz¨®n. Sangre, sufrimiento y crueldad, como en los tiempos de Ner¨®n clamaron tambi¨¦n los romanos, parecen ser m¨¢s importantes que amor y compasi¨®n. Pero as¨ª no podemos manejar la creaci¨®n de Dios. Ser¨ªa, por supuesto, mejor abolir las corridas por completo, pero por lo menos el mencionado toreador merece agradecimiento por su actitud brava al no matar el toro. ?l por lo menos reconoci¨® las m¨²ltiples intolerables manipulaciones con toros. A los aficionados de las corridas quisiera preguntar: ?pensar¨ªan ustedes de la misma forma si, en vez de los toros, ustedes mismos estuviesen en la arena para ser sacrificados de la manera que ahora les da tanta satisf¨¢cci¨®n?-