Quique S¨¢nchez Flores: "Me cuesta arrancarme por sevillanas"
Hijo y sobrino de folcl¨®ricas, es novedad en la selecci¨®n de Miguel Mu?oz
Quique, que juega desde hace tres a?os en el Valencia, en el puesto de lateral derecho, ha sido centro de atenci¨®n este verano por su posible fichaje por el Atl¨¦tico de Madrid de Jes¨²s Gil y Gil. El joven lateral vio subir su cotizaci¨®n tras cuajar una buena temporada con el Valencia en Segunda Divisi¨®n, en la que consigui¨® nueve goles, y jugar como titular en la selecci¨®n Sub 21. Pero su popularidad se ha disparado despu¨¦s del mencionado intento de fichaje, que result¨® pol¨¦mico. El Atl¨¦tico parec¨ªa dispuesto a llev¨¢rselo, pero el Valencia puso un precio que fue considerado excesivo: 200 millones de pesetas. Quique dice que todo esto le ha afectado bastante y que la fama no se la ha subido a la cabeza. Pero asegura que ahora est¨¢ todo olvidado y que su ¨²nica ambici¨®n est¨¢ centrada en el Valencia y en su mujer, Nuria, con la que se cas¨® el 25 de junio pasado.Pregunta. Su carrera futbol¨ªstica ha sido fulgurante. ?A qu¨¦ se ha debido esa explosi¨®n?
Respuesta. La verdad es que no ha sido todo tan r¨¢pido. Lo que pasa es que en el ¨²ltimo a?o se, han juntado muchas cosas. Jugu¨¦ la final de la Copa de Europa de selecciones Sub 21, hice una buena campa?a en el Valencia, marcando nueve goles, y finalmente surgi¨® lo del posible fichajes por el Atl¨¦tico de Madrid. Pero la gente no se acuerda que yo debut¨¦ hace tres a?os con el Valencia en Primera Divisi¨®n y que jugu¨¦ toda la temporada como titular. Y tampoco sabe que con 16 a?os ya jugaba en el Pegaso, en Tercera Divisi¨®n, ni que con nueve ya pertenec¨ªa al equipo de alevines del Madrid.
P. ?Qu¨¦ ha significado para usted su frustrado fichaje por el Atl¨¦tico de Madrid?
R. Yo recib¨ª la noticia con verdadera sorpresa. Estaba en Tenerife en mi luna de miel y, l¨®gicamente, alejado de todo esto. Adem¨¢s, hac¨ªa varios meses que hab¨ªa renovado mi contrato por cinco a?os m¨¢s en el Valencia, y no me hab¨ªa planteado salir de aqu¨ª. Despu¨¦s, todo lo que ha pasado me ha influido much¨ªsimo, m¨¢s de lo que la gente cree. Me ha quedado una gran responsabilidad. Si el a?o pasado sal¨ªa al campo con ganas de hacerlo lo mejor posible pero sin pensar en que la gente se iba a fijar especialmente en m¨ª, ahora es distinto; ahora s¨¦ que me observan. Y como no me gustan los abucheos... me puedo derrumbar f¨¢cilmente.
P. La afici¨®n valencianista ha hecho de usted un ¨ªdolo y espera que todo esto no le haya afectado demasiado, que siga siendo el mismo.
R. Y lo soy. Lo que pasa es que con nueve goles marcados la pasada temporada... Me he puesto el list¨®n demasiado alto. Hacer nueve goles, siendo un defensa no es nada f¨¢cil, ni siquiera en Segunda Divisi¨®n. Adem¨¢s, ahora me he dado cuenta de que he pasado de ser un marcador a estar marcado desde el principio. De todas formas, tengo fe en mis posibilidades.
P. Su madre terci¨® en la pol¨¦mica del fichaje y dio la impresi¨®n de que quiso presionar para que ¨¦ste se realizara finalmente. ?Qu¨¦ papel ha tenido Carmen Flores en todo el asunto?
R. Mi madre entr¨® en la pol¨¦mica sin querer. Yo estaba fuera, y alguien ten¨ªa que decir algo. Tengo una madre famosa, y lo que dice repercute m¨¢s. Pero fueron las declaraciones de una madre cualquiera que quiere lo mejor para su hijo. Lo que pasa es que al salir de Carmen Flores... le buscaron las cosquillas y se aprovecharon del nerviosismo. De todas formas, yo dije claramente que el que decid¨ªa era yo.
Una traici¨®n
P. El Valencia no le dej¨® marchar. Usted podr¨ªa haber utilizado la v¨ªa del famoso art¨ªculo 1.006, ?no?R. No lo hubiera hecho nunca. En mi situaci¨®n es muy dif¨ªcil de aplicar, porque el Valencia se ha portado muy bien conmigo. Y el art¨ªculo 1.006 es una traici¨®n al club. A no ser que las cosas se pusieran muy mal, no lo utilizar¨ªa.
P. ?Qu¨¦ hubiera pasado si en lugar del Atl¨¦tico de Madrid se hubiera interesado por usted el Real Madrid, el equipo de si padre?
R. No lo s¨¦. Siempre se me ha tachado de madridista, porque la gente me relaciona con mi padre que fue jugador del Real Madrid Pero yo no he sido nunca madridista ni atl¨¦tico. De peque?o ya me gustaba mucho el f¨²tbol, pero no ten¨ªa ning¨²n equipo determinado. Me gustaba jugar y tambi¨¦n que ganara el equipo en el que estuviera de entrenador mi padrino, Alfredo di St¨¦fano.
P. Ahora es el entrenador del Valencia. ?C¨®mo son las relaciones entre Quique, jugador, y Di St¨¦fano, entrenador?
R. Al principio me sent¨ªa rar¨ªsimo. Estar a las ¨®rdenes de mi padrino era algo nuevo. S¨ª sab¨ªa como llamarle, en eso no tuve que cambiar nada, porque siempre le he hablado de usted. Pero no sab¨ªa c¨®mo me iba a tratar, si lo har¨ªa con m¨¢s rigor o si, por el contrario, iba a ser m¨¢s permisivo conmigo. Pero no ha sido ni una cosa ni la otra. Es la relaci¨®n que existe entre un jugador y su entrenador. Si hay un cari?o especial, va por dentro. A la hora de ser jugador y entrenador somos eso y nada m¨¢s.
P. La influencia de su padre en su vida ha quedado clara con su dedicaci¨®n el f¨²tbol profesional. ?C¨®mo le ha influido el otro ambiente de su familia, el folcl¨®rico, el del flamenco?
R. No ha influido mucho. Quiz¨¢ me ha hecho ser m¨¢s t¨ªmido. Cuando estaba en el colegio la gente me preguntaba si era el sobrino de Lola. Me daba verg¨¹enza. Pero lo he ido asimilando y ya me resulta normal, aunque no me gusta mucho lo folcl¨®rico. Admiro a mi t¨ªa y a todos, pero no me atrae demasiado. Ha habido deb¨²s importantes de mi familia en los que s¨®lo faltaba yo.
P. ?Le gusta bailar sevillanas?
R. La verdad es que me cuesta arrancarme por sevillanas. La ¨²ltima vez que lo hice fue en m¨ª boda, y porque me obligaron.
P. En los ¨²ltimos tiempos se ha puesto de moda el flamenco, los pubs han sido reconvertidos en tablaos flamencos. ?No los frecuenta?
R. No, salgo muy poco, y cuando lo hago es para ir al cine. ?ste es un pa¨ªs de booms. De peque?o recuerdo las modas del yoy¨®, de las canicas o del tirachinas. Esto es igual. La gente se, aburre, y cuando se cansen de las sevillanas inventar¨¢n otra vez el vals. Desde luego, si hace dos a?os me dicen que montar un tablao flamenco es un buen negocio, no me lo creo.
La intimidad
P. ?Y qu¨¦ piensa de las llamadas revistas del coraz¨®n, que tanto se ocupan de su familia?R. Es un mundo que no me incumbe demasiado. Ha habido muchas revistas de esas que me, han llamado para hacerme reportajes, y no he aceptado. Si fueran deportivas o peri¨®dicos, eso es otra cosa. No dudo que las revistas del coraz¨®n son fundamentales para mi familia, por el mundo en el que viven. Es l¨®gico que salgan ah¨ª. Lo raro sena que salieran en la prensa deportiva.
P. Tambi¨¦n es un mundo que constantemente entra en la vida privada y en la intimidad de las personas, aunque en ocasiones sean esas mismas personas las que venden su intimidad. ?Qu¨¦ piensa de eso? ?D¨®nde est¨¢ la frontera de la propia intimidad?
R. Pienso que el derecho a la intimidad es esencial. La vida privada pertenece a cada persona. Si alguien quiere vender su vida privada, est¨¢ en su derecho. En mi caso la frontera est¨¢ muy clara, porque vida privada es todo lo que no concierne al f¨²tbol. Pero para mi t¨ªa o mi madre es mucho m¨¢s complicado.
P. Su familia est¨¢ tambi¨¦n intimamente relacionada con el mundo gitano, que se encuentra con muchos problemas en este pa¨ªs. ?Qu¨¦ piensa de esto?
R. Es un problema de cultura. Pero creo que el pa¨ªs est¨¢ suficientemente culturizado como para sobreponerse a este problema. Lo que pasa es que la gente no cree en los gitanos, s¨®lo piensa en ellos como delincuentes. Si a los gitanos les dieran las mismas oportunidades que a los dem¨¢s ser¨ªa muy distinto. Es un caso claro de racismo.
P. ?Y de la pol¨ªtica?
R. Tengo mis ideas, ideas firmes que me gustar¨ªa ver realizadas. Pero lo que yo piense no importa. La verdad es que no creo demasiado en la eficacia de la pol¨ªtica. Lo que hay, se sabe de antemano.
P. Pero su t¨ªa, Lola Flores, Lola de Espa?a, como le llamaban durante el franquismo, s¨ª que ha dejado claras sus simpat¨ªas pol¨ªticas.
R. Mi t¨ªa nunca ha negado que durante el franquismo le fue mejor. Pero tambi¨¦n es verdad que aquella etiqueta no le ha favorecido en los ¨²ltimos a?os.
P. ?Qu¨¦ espera del futuro?
R. El futuro me lo planteo siempre a corto plazo. Ahora es la temporada con el Valencia lo que me importa, no me puedo plantear si me voy a ir el a?o que viene o no. S¨¦ que tengo que hacerlo lo mejor posible.
P. Y ahora, la selecci¨®n.
R. Es algo que esperaba que llegara alguna vez, aunque confieso que cuando me llamaron los periodistas para decirme que estaba seleccionado lo primero que pens¨¦ es que era otra vez para la ol¨ªmpica. Bueno, resulta que no, que ya estoy en la A. Ahora la cuesti¨®n es hacerse un sitio y mantenerlo.
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