Nuevas ideas para la izquierda

Al abandonar gran parte de su doctrina caracter¨ªstica, los socialistas europeos se est¨¢n enfrentando a una crisis de identidad. Esto reza para los partidos socialistas que est¨¢n en el poder (Grecia, Italia, Espa?a), en la oposici¨®n (Reino Unido, Alemania Federal) y medio dentro medio fuera (Francia). Si ya no pueden creer en la salvaci¨®n por el Estado, ?en qu¨¦ pueden creer?Una soluci¨®n es la coalici¨®n arco iris: m¨¦zclense mujeres y negros, verdes y partidarios del desarme, homosexuales y trabajadores no manuales, y red¨¢ctese un manifiesto que amalgame los problemas que les preocupan. Estas amalgamas son se?al de los cambios b¨¢sicos producidos en el funcionamiento de la pol¨ªtica: la gente se siente m¨¢s atraida por campa?as sobre temas aislados que afectan directamente a sus vidas que por extensos manifiestos que abordan problemas ajenos y ofrecen una perspectiva global de la sociedad. Pero esta estrategia no s¨®lo ofrece riesgos de conflicto entre los grupos, sino que tambi¨¦n indica una falta de autoconfianza intelectual.

Encorsetada por el ¨¦xito de su pasado relativamente reciente, para la izquierda ha sido m¨¢s dif¨ªcil que para la derecha dejar de lado el bagaje intelectual que adquiri¨® en los a?os 20 y 30. En Australia y Nueva Zelanda, dos pa¨ªses donde la izquierda se ha defendido bien en las urnas, los partidos laboristas son m¨¢s pragm¨¢ticos que sus hom¨®logos europeos.

4 de octubre