Aparece muerto en Ginebra un dirigente democristiano de la RFA implicado en un escandalo pol¨ªtico
Uwe Barschel, el ex presidente democristiano del Estado federado de Schieswig-Holstein (RFA), apareci¨® muerto ayer en una habitaci¨®n de un hotel de Ginebra, un d¨ªa antes de su prevista comparecencia ante una comisi¨®n parlamentaria que investiga su implicaci¨®n en una campa?a de descr¨¦dito de su rival social dem¨®crata en las pasadas elecciones del 13 de septiembre. Todo hace suponer que el pol¨ªtico se quit¨® la vida, aunque la polic¨ªa no descarta tampoco la hip¨®tesis del asesinato.
La muerte de Barschel es la tr¨¢gica culminaci¨®n de un esc¨¢ndalo pol¨ªtico sin precedentes en la historia de la Rep¨²blica Federal le Alemania que a¨²n est¨¢ por aclarar y cuyos efectos, tambi¨¦n para el Gobierno federal, a¨²n son imprevisibles. La noticia de la muerte de este joven pol¨ªtico le 43 a?os, que hab¨ªa protagonizado un ascenso mete¨®rico en la Uni¨®n Cristiano Dem¨®crata (CDU), caus¨® gran conmoci¨®n en medios pol¨ªticos de la RFA.Barschel fue hallado muerto en su habitaci¨®n en el hotel Beau Rivage por periodistas de la revista Stern al mediod¨ªa de ayer. Su cad¨¢ver se hallaba en la ba?era llena de agua. No mostraba heridas externas ni signos de violencia. Hab¨ªa llegado a Ginebra el s¨¢bado procedente de Gran Canaria, donde hab¨ªa pasado unos d¨ªas de descanso en Bah¨ªa Feliz, en espera de prestar declaraci¨®n ante la comisi¨®n investigadora del Parlamento de Schleswig-Holstein.
El ex primer ministro del Estado m¨¢s septentrional de la RFA fue llamado el viernes a su retiro canario para que acudiera inmediatamente a prestar declaraci¨®n en Kiel, capital de este Estado, ante la acumulaci¨®n de indicios de que hab¨ªa mentido en sus declaraciones juradas en relaci¨®n con el esc¨¢ndalo de la pasada campa?a electoral. Hasta la vispera de su muerte, Uwe Barschel insisti¨® en su inocencia, puesta ya en duda por su propio partido. En las elecciones, la CDU perdi¨® su mayor¨ªa, que ostentaba desde hace 37 a?os, en favor del Partido Socialdem¨®cracia (SPD). Este partido logr¨® 36 esca?os, la CDU 33, los liberales cuatro y la minor¨ªa danesa 1.
La hegemon¨ªa democristiana
El esc¨¢ndalo en torno a Barschel salt¨® a la luz el s¨¢bado 12 de septiembre, pocas horas antes de abrirse los colegios electorales en Schleswig-Holstein, donde peligraba la tradicional hegemon¨ªa de la Uni¨®n Cristianodem¨®crata. El semanario Der Spiegel public¨® las declaraciones juradas de un ex colaborador de Barschel en la presidencia del Estado, Reiner Pfeiffer, seg¨²n las cuales hab¨ªa recibido ¨®rdenes del presidente para lanzar una campa?a difamatoria contra el candidato rival, el socialdem¨®crata Bjorn Engholm, utilizando todo tipo de recursos ilegales. As¨ª, Pfeiffer asegur¨® haber presentado una denuncia an¨®nima contra Engholm por evasi¨®n fiscal a instancias de Barschel. ?ste le habr¨ªa encargado tambi¨¦n contratar detectives para vigilar la supuesta vida promiscua y homosexual del candidato del SPD. Asimismo, le pidi¨® un micr¨®fono para instalar en su propio tel¨¦fono, en su despacho de la presidencia, para acusar despu¨¦s al SPD de su colocaci¨®n.Barschel sali¨® al paso de estas informaciones y asegur¨® que eran una "miserable mentira". El canciller, Helmut Kohl, y el jefe de la CDU en Schleswig-Holstein y antecesor de Barschel en la presidencia del Estado, Gerhard Stoltenberg, salieron en defensa de ¨¦ste. Stoltenberg acus¨® a Per Spiegel de ser un "¨®rgano de lucha izquierdista" y de orquestar una campa?a contra Barschel. El 25 de septiembre Barschel dimiti¨® como presidente, si bien insisti¨® en su inocencia y anunci¨® que luchar¨ªa ante los tribunales por demostrarla.
No obstante, en la comisi¨®n parlamentaria ya las primeras declaraciones de colaboradores de Barschel reforzaron los indicios de culpabilidad contra ¨¦ste. Las declaraciones de su ministro de Hacienda y miembros de la oficina de prensa de la Presidencia hicieron que en pocos d¨ªas toda la defensa de Barschel, basada en una conferencia de prensa de cerca de cuatro horas tras las elecciones, en la que dio su "palabra de honor" de que no hab¨ªa sabido de la campa?a sucia contra Engholm e hizo p¨²blicas varias declaraciones juradas al respecto, se desmoron¨® como un castillo de naipes. La fiscal¨ªa de Kiel abri¨® un sumario contra Barschel al considerar que exist¨ªan indicios racionales de culpabilidad.
El esc¨¢ndalo de Kiel se ha ido complicando d¨ªa a d¨ªa. El viernes se supo que el presidente del SPD en Schleswig-Holstein, G¨¹nther Jansen, se hab¨ªa encontrado con el denunciante Barschel varias veces antes de hacerse p¨²blico el esc¨¢ndalo. La intriga pol¨ªtica de Kiel ha alcanzado tales dimensiones que la opini¨®n p¨²blica se ve en crecientes dificultades; para comprender todo el entramado de mentiras, sobornos, falsificaciones y conexiones il¨ªcitas del mismo.
Dudas en su partido
Tras tres d¨ªas de investigaciones, los miembros del partido de Barschel se distanciaron claramente de ¨¦l, plantearon dudas sobre la veracidad de sus declaraciones y le conminaron a que declarara hoy ante la comisi¨®n y renunciara a su esca?o en el Parlamento. A¨²n en Canarias, Barschel insisti¨® en su inocencia. Desde all¨ª envi¨® un t¨¦lex al nuevo candidato cristianodem¨®crata a la presidencia, Klaus Kribben, y le anunci¨® que hab¨ªa logrado nuevas informaciones que iba a confirmar personalmente durante el fin de semana y que el lunes posiblemente pudiera presentar ante la comisi¨®n nuevas infomaciones sobre el trasfondo real del esc¨¢ndalo. Seg¨²n informaciones no confirmadas, Barschel se dio cita en Ginebra el s¨¢bado con un desconocido que iba a suministrarle la citada informaci¨®n sbre el caso.
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