La oposici¨®n se mantiene contra la ley de televisi¨®n privada, pese a las ¨²ltimas rectificaciones del PSOE

Alianza Popular, CDS, Izquierda Unida, PDP y PL mantienen su prop¨®sito de votar en contra del proyecto de ley de la televisi¨®n privada despu¨¦s de haber conocido las rectificaciones "de detalle" a las que est¨¢n dispuestos los socialistas. El PNV tambi¨¦n discrepa de la redacci¨®n del proyecto, y Minor¨ªa Catalana no s¨®lo se opondr¨¢ al texto de la ley, sino que, cuando est¨¦ definitivamente aprobada por el Parlamento, presentar¨¢ un recurso de inconstitucionalidad contra ella, seg¨²n anunci¨® ayer su diputado Josep L¨®pez de Lerma.

El PSOE tiene, por tanto, todas las perspectivas de quedarse solo en la defensa del proyecto de ley, aprobado por el Gobierno el pasado d¨ªa 4 de abril y que ser¨¢ debatido en el pleno del Congreso a mediados de la semana pr¨®xima.

En las conversaciones mantenidas en los ¨²ltimos d¨ªas por el portavoz del grupo parlamentario socialista, Eduardo Mart¨ªn Toval, con los representantes de los grupos de la oposici¨®n, el PSOE anunci¨® la elevaci¨®n en 5 puntos -del 10% al 15%- del porcentaje m¨ªnimo de emisiones de producci¨®n propia de las cadenas privadas y el establecimiento de la obligaci¨®n de que el 55% de su programaci¨®n sea de "expresi¨®n originaria espa?ola".

La introducci¨®n de este precepto parece relacionada con la matizaci¨®n prevista por, los socialistas para que el 40%. de la programaci¨®n emitida no sea ya de "producci¨®n nacional", como se preve¨ªa hasta ahora, sino de pa¨ªses de las comunidades europeas. Asimismo, se pretende satisfacer las solicitudes realizadas por representantes de Estados hispanoamericanos que aspiran a ampliar el mercado comercial televisivo de sus pa¨ªses.

Fuentes socialistas anunciaron la aceptaci¨®n de la propuesta del CDS para que el c¨®mputo del porcentaje m¨¢ximo de publicidad permitida -10% de la programaci¨®n- sea realizado sobre un per¨ªodo anual en vez de mensual.

El PSOE ha renunciado asimismo a mantener la tesis de creaci¨®n de un organismo aut¨®nomo para la televisi¨®n privada, con lo que pasar¨¢ a ser competencia directa del Ministerio de Transportes la elaboraci¨®n del plan t¨¦cnico nacional de la televisi¨®n privada, la contrataci¨®n y gesti¨®n de los sistemas de transporte y difusi¨®n de las se?ales televisivas as¨ª como las propuestas de extinci¨®n de las concesiones para emitir y la labor inspectora del cumplimiento de las reglas impuestas por la ley de televisi¨®n privada.

Campa?as electorales

Los principales grupos parlamentarios de la oposici¨®n consideran que el texto destinado a regular el funcionamiento, mediante concesi¨®n administrativa, de tres canales privados de televisi¨®n es restrictivo, reglamentista e invade, seg¨²n los partidos nacionalistas, competencias de las autonom¨ªas.

A ¨¦stos y otros motivos puede a?adirse uno m¨¢s en los pr¨®ximos d¨ªas si el PSOE mantiene el criterio de promover una ley org¨¢nica que imponga a las televisiones privadas las mismas limitaciones que para los medios de comunicaci¨®n de propiedad p¨²blica establece la ley electoral general.

Dicha ley proh¨ªbe la contrataci¨®n de espacios de publicidad electoral durante las campa?as previas a los comicios, obliga a espacios gratuitos de propaganda y establece r¨ªgidamente la distribuci¨®n de ¨¦stos seg¨²n el n¨²mero de votos de los partidos en las elecciones precedentes.

La explicaci¨®n ofrecida por un alto cargo gubernamental acerca de la definitiva negativa a autorizar por el momento emisoras municipales de televisi¨®n remite a la voluntad del Gobierno de "evitar la influencia de las tendencias localistas en un pa¨ªs como el nuestro, con serios problemas de articulaci¨®n cultural". "El Gobierno", agreg¨® la misma fuente, "ha tomado una decisi¨®n pol¨ªtica y en estos momentos juzga que es prioritaria la consolidaci¨®n del modelo de televisi¨®n que ha elegido", antes que ofrecer cobertura legal a la puesta en marcha de cuantas iniciativas son t¨¦cnicamente viables.

Amparado en este criterio pol¨ªtico de "protecci¨®n cultural", el Gobierno no ha permitido que las emisoras privadas puedan difundir programas de televisi¨®n exclusivamente en las regiones que les interese, porque "previsiblemente, ser¨ªan las regiones m¨¢s ricas, las que m¨¢s cartera de publicidad puedan ofrecer, las que resultar¨ªan beneficiadas en perjuicio de las menos favorecidas econ¨®micamente", seg¨²n el razonamiento de una fuente socialista. En contrapartida, seg¨²n la versi¨®n gubernamental, las ¨¢reas sobre las que est¨¢n obligadas a emitir las emisoras privadas -aparte de las horas de programaci¨®n global para toda Espa?a- combinar¨¢n provincias de escaso mercado publicitario con otras de importante desarrollo econ¨®mico para que en conjunto resulten rentables a los empresarios.