Josep Sol¨¦ Barber¨¢, dirigente del PSUC

Josep Sol¨¦ Barbera, que falleci¨® ayer, v¨ªctima de un derrame cerebral, a los 74 a?os de edad, fue ante todo un gran patriota catal¨¢n. O¨ªrle discutir en Madrid sobre su militancia comunista en el PSUC, explicar como s¨®lo ¨¦l pod¨ªa hacerlo la diferencia entre esta militancia y la del PCE, sobre todo a los militantes de este ¨²ltimo partido; defender las libertades nacionales de Catalu?a desde su sabidur¨ªa hist¨®rica y desde el marxismo, que no quiere decir otra cosa que desde la solidaridad con el conjunto de pueblos que configuran el Estado espa?ol, y desde la ¨®ptica de los distintos sectores sociales y no de la concepci¨®n metaf¨ªsica de algunos nacionalismos, eran ideas de cabecera de este fundador del PSUC.Conceb¨ªa su militancia comunista como una constante puesta en cuesti¨®n de ideas, como un actuar de monaguillo -de escolanet, dir¨ªa ¨¦l- de CC OO, de la Uni¨® de Pagesos, de todos aquellos movimientos sociales que ol¨ªan a nuevo, a vida. Ostentaba un confesado y confesable Manolosacristanismo, que le llev¨® hace pocas semanas a discutir las actuaciones a emprender para evitar la instalaci¨®n de un vertedero de residuos industriales en el mismo t¨¦rmino municipal donde ahora va a reposar. Su no dogmatismo le llevaba a desear -"c¨®mo no", dec¨ªa Josep- la unidad de los comunistas, pero no como un acto lit¨²rgico, sino desde el debate, desde la puesta en com¨²n de las ideas, desde la pr¨¢ctica cotidiana.

Sus ideas sobre la justicia, gran letrado como era -adquiri¨® notoriedad por su defensa del comunista Miguel N¨²?ez y de otros presos pol¨ªticos-, no pod¨ªan sino proceder de su humanidad a raudales. Josep Sol¨¦ Barber¨¤ era un hombre alto, de largos brazos, que gustaba de abrazar a sus amigos y amigas porque quer¨ªa que se notase fisicamente su humanidad. Personaje de vitalidad contagiosa, de verbo f¨¢cil y c¨¢lido, donante permanente de sonrisa sincera, fue durante mucho tiempo, con Franco vivo, el rostro del comunismo en Catalu?a. Lo sab¨ªa y acept¨® el reto. Por eso se le prohibi¨® ejercer de abogado, se le detuvo, se le encarcel¨®; por eso tambi¨¦n fue a Burgos a defender a la gente de ETA contra el franquismo, y, de reproducirse aquellas circunstancias, estoy seguro de que volver¨ªa a ir, aunque ¨²ltimamente dudaba sobre qui¨¦n fue el utilizado y qui¨¦n el utilizador en aquel juicio. Antes, en 1939, tras la guerra civil, estuvo condenado a muerte, siendo indultado, y permaneci¨® encarcelado hasta 1944. Con la democracia, fue elegido diputado por Tarragona en las legislaturas de 1977 y 1979.

Sol¨¦ Barber¨¤ hizo de su vida un continuo ejercicio de entrega a Catalu?a, a la democracia y a los ideales del socialismo. Con nadie del PSUC y m¨¢s all¨¢ del PSUC habr¨¦ discutido tanto y tan duramente de pol¨ªtica ni me habr¨¦ puesto de acuerdo m¨¢s veces para actuar al servicio de tres ideas comunes: el inter¨¦s de los trabajadores y los campesinos, la b¨²squeda de la honestidad en la Administraci¨®n de justicia y las libertades nacionales de Catalu?a.